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martes, 22 de noviembre de 2005

ELEGIR Y LEGITIMAR. Por: Coronel ® (FAV) Sammy Landaeta Millán. Opinión. Política. Venezuela.

Foto: Por cortesía de Encuentro Perú 

ELEGIR Y LEGITIMAR. Por: Sammy Landaeta Millán. 

Las condiciones para preferir, escoger o seleccionar personas, por nombres y apellidos, como candidatos a cargos públicos por elección popular, se dificultan cada día más en la República Bolivariana de Venezuela. Ya no solo se visualizan los “abusos del régimen” en satisfacer su consolidación del poder totalitario mediante la designación de funcionarios “a dedo,” sino que ahora la pretendida revolución Castro Chavista, nos presenta nuevas opciones electrónicas, similares a un recetario de cocina.
Con la reciente aparición de una pagina web, diseñada y expuesta al público por parte de las fuerzas que avalan en impulsan el Socialismo y estimulan el Comunismo en la patria de Simón Bolívar, El Libertador, nos demuestran que con solo incorporar en ese portal, el número de cédula de identidad nacional, se nos muestran datos de dirección, centro de votación y otros, con una extraordinaria innovación; se nos da la “tendencia política del ciudadano,” situación que atenta contra los derechos políticos de cada individuo, y le cercena el derecho que tiene cualquier persona a la orientación política de su preferencia.
Podría interpretarse también que se pretende señalar personalmente con afrenta, burla, mofa o humillación, porque se somete al escarnio público en una suerte de “reconócelos pueblo” a aquellos que no les simpatizan, por ser contrarios a los desmanes de los ineficaces, que a fuerza de sangre, dolo, llanto, muerte, robo, matraca y corrupción pretenden consolidar las incapacidades de un proyecto político que lesiona los derechos humanos, por intermedio de una imposición ideológica, denominada revolución.
A la nuevas facilidades del “Internet revolucionario” se suman los mecanismos de los cuadernos electrónicos, el sistema automatizado y las nefastas máquinas capta huellas, que eliminan de plano el carácter secreto del voto en Venezuela, donde en tiempo real, el oprobioso régimen Castro Comunista conoce a ciencia cierta cuantas personas proporcionalmente, sufragan en contra del bandidaje revolucionario de turno en la Nación.
Las elecciones en Venezuela se han venido a descrédito, pese a contar con un moderno sistema automatizado, pero sus bondades fueron sesgadas para otorgar el triunfo fraudulento al bochinche revolucionario, enquistado en el poder del Estado.
La facultad de elegir para que mediante la representación política, se tome la decisión del soberano quedó en la retórica. La mano aparentemente sabia del ejecutivo subyuga la decisión popular y subordina los poderes públicos y en complicidad con miembros de la Asamblea Nacional designan magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) y constitucionalmente, hasta el Vicepresidente Ejecutivo de la República, que debería ser una figura elegible por voluntad popular, y no por designación voluntaria del jefe de Estado por o con recomendación un grupo de partidarios.
Contrario a ley Orgánica del Sufragio y participación política, hoy se vulnera no solo el ejercicio directo, secreto y universal del voto como acotamos anteriormente, sino que se pretende dosificar el porcentaje de escrutinios de las mesas electorales en los diferentes centros de votación, buscando satisfacer los intereses oscuros del desgobierno, pero lo que es mas lamentable; con el aval de diversos partidos políticos que actúan en flagrancia al permitir que el cuestionado CNE, ente electoral disfrazado de “poder publico,” les otorgue “dadivas de porcentajes de escrutinios.”
Las mesas electorales, deben ser escrutadas en su totalidad y su constancia debe quedar asentada en un acta final, que exprese los resultados del acto público. Mientas esa condición no se presente en el país, no estamos en posición de “elegir” a nadie. Por otra parte la comunidad nacional no puede ser cómplice o instrumento para avalar las nefastas condiciones que se pretende dar a unas elecciones automatizadas, para beneficio de las "fuerzas fidelistas invasoras" en perjuicio de la sociedad venezolana.
Entendemos que legitimar es probar o justificar la verdad de una cosa, o la calidad de las personas o procedimiento de acuerdo con las leyes. ¿A que ley electoral vamos a dar crédito, si se vulnera constante y abiertamente.? Tampoco podemos legitimar, ni mucho menos habilitar a una persona como el Dr. Jorge Rodríguez, rector principal del CNE por su categoría de inhábil para el ejercicio del cargo, oficio o empleo. El ha sido el instrumento del desgobierno para cometer delitos electorales, cuando en todo caso debería actuar con la imparcialidad que requiere el acto electoral.
El acto del sufragio se convierte poco a poco en la forma de legitimar la acción electoral de una casta de bandidos fracasados en el control del Estado por la fuerza en tiempos pretéritos y ahora lo hacen conculcando el derecho electoral avalado por las apetencias de ciertos partidos políticos, que solo ven su bienestar y subsistencia. Es insólita la posición miserable de los referidos partidos políticos, miembros de la llamada “oposición oficialista” al invocar estar defendiendo una supuesta democracia mancillada, vulnerada y sustituida en Venezuela por un régimen de corte totalitario.
Al asistir al acto de votación el 4 de Diciembre de los corrientes, estaríamos legitimando las condiciones antidemocráticas del sufragio, con características amañadas y curiosamente observadas en este momentos por la Organización de Estados Americanos y la Unión Europea.
También estaríamos dándole un espaldarazo al pretendido proceso revolucionario con bases Castro Comunistas y eso definitivamente para los venezolanos, sería una aberración porque se colocarían en sintonía con las agresiones del régimen a diversos países de la comunidad internacional, situación que es sumamente denigrante.
Concurrir a las elecciones de Diputados a la Asamblea Nacional, es una forma de “legitimar” la trampa y los atropellos del régimen que comanda el usurpador de la presidencia de la República, Hugo Chávez Frías y a la par estaríamos siendo cómplices de la consolidación, la implantación y la entrega definitiva de la Nación al "imperio Castro Comunista."
Los nuevos socialistas del siglo XXI en Venezuela, para esconder su ineficacia, estigmatizan a la oposición, como “elemento del imperio del norte” y mediante sus designios anti soberanos en lo sucesivo, no nos permitirnos ELEGIR sino LEGITIMAR su abuso de poder.

Cita: “El poder sin la virtud es un abuso y no una facultad legitima”.
Simón Bolívar.

Coronel (Av.) Sammy Landaeta Millán
C.I. N° 3.441.697
Email: sammylan@yahoo.es 
Caracas, 22 de Noviembre de 2005

martes, 15 de noviembre de 2005

ADVERSARIOS Y DEMAGOGOS. Por: Sammy Landaeta Millán. Venezuela

FOTO: Imagen REFERENCIAL, por cortesía de Nicolás Cortez en Twitter

ADVERSARIOS Y DEMAGOGOS. Por: Sammy Landaeta Millán. 

El viernes próximo pasado tuvimos en Venezuela la presencia del señor Rubén Pernía, representante de la Organización de Estados Americanos (OEA), para suscribir un “convenio de observación” con el Consejo Nacional Electoral (CNE.) La visita del funcionario, para el desgobierno, tiene la intención de mostrar confianza, claridad y transparencia en el venidero acto electoral, pero para la gran mayoría de nuestros coterráneos, nos da una ligera idea de como el cuestionado ente comicial nacional, trata de sobreponerse a las denuncias en su contra, con el aval de una organización internacional, que envía un representante que parecería que proviene de un alejado planeta, de un distinto sistema solar al nuestro, por la forma apreciar los efectos de la situación social, política, militar, económica, petrolera, diplomática y electoral que vive el nuestro país.
En su rueda de prensa daba la idea de que trataba de convencernos o esperanzarnos con el argumento que “en democracia el poder se comparte,” que nadie puede conservar el poder individual o eternamente, a la par de que incentivaba a formular las “denuncias y quejas” que a bien tengamos los venezolanos, en torno a las elecciones de Diputados a la Asamblea Nacional, el 4 de Diciembre de los corrientes.
Señor ilustre representante de la OEA, la mayor denuncia o queja de la oposición democrática de este país, se encuentra sustentada por diversos documentos presentados ante ese Organismo, por haber “avalado el fraude electoral” en el proceso del Referendo “Revocatorio Presidencial. En su argumento sugiere que no pretenden convalidar ninguna acto, (cosa que en Venezuela ya lo hicieron). Ni socavar las posiciones políticas (cosa que ya el desgobierno lo ha hecho), con el simple propósito de instaurar en Venezuela un sistema totalitario. Tiene razón usted al afirmar que no viene a impedir el trabajo de los Partidos Políticos de oposición con la presencia observadores internacionales del proceso electoral. Ya no es necesario. Dichos observadores, tenían que haber venido con antelación para que incluyesen en el informe final la violación a los derechos políticos y los derechos humanos. La ausencia de estado de derecho, las agresiones a la libertad de expresión, información y comunicación, la persecución, la detención, la tortura y la muerte en contra de los que usted catalogó como, “adversarios”.
La OEA, tendría que haberse apersonado con tiempo, para que presenciase la detención, enjuiciamiento y condena de civiles y militares que se han negado a ser instrumento callados del régimen de turno en Venezuela. De igual forma hubiesen tenido la oportunidad de catalogar las condiciones democráticas de la administración Chávez, con la actuación implacable del Dr. Isaías Rodríguez, Fiscal General de la República a favor del régimen, sesgando actuaciones y librando ordenes de captura contra la periodista Patricia Poleo, el General Eugenio Añez, el Señor Salvador Romaní y el empresario Nelson Mezerhane, señalándolos como actores intelectuales del asesinato del Fiscal Danilo Anderson, pretendiendo incluir a todos aquellos que se relacionen o participaron en los sucesos del 11 de Abril, la desobediencia de la Plaza Francia de Altamira y el paro petrolero. Advirtiendo que pretenden “llenar un autobús” de imputados o detenidos, para causar terror en el lado opositor.
Están a tiempo de observar la división política de la oposición a través de los segmentos de televisión, donde días antes un dirigente político del partido Primero Justicia, de nombre, Juan Carlos Caldera, se siente conforme y satisfecho con las condiciones logradas en acuerdos con el CNE referidos al voto y el proceso y escrutinios. Ciertos partidos políticos, para su subsistencia, aceptan las migajas o sobras que reparte la revolución en materia electoral. Bajan la frente ante la imposición del bandidaje revolucionario disfrazado de poder electoral, en perjuicio del derecho universal directo y secreto del sufragio.
De igual forma podrán ver, la posición del comunicador social, teniente coronel retirado de la Aviación, Iván Ballesteros, candidato a la Asamblea Nacional, donde renuncia por las pocas posibilidades que ofrece el CNE ante el proceso electoral. Planteamiento que comulga con su afirmación en el programa de radio “Plomo Parejo” en días pasados donde afirmó que en la Fuerza Aérea Venezolana lo enseñaron a ser honesto, apolítico, anticomunista y a no perseguir a sus compañeros. ¡Celebro con orgullo su decisión! Y finalmente la posición del Dr. Giussepe Gianneto, ex rector de la Universidad Central de Venezuela (UCV) candidato a la Asamblea Nacional, incentivando a concurrir al proceso. ¿Será todo esto normal en un país democrático?
A nuestra manera de ver, en materia política en Venezuela, el termino de “adversarios” es inaceptable para el desgobierno, los que estamos en contra posición al régimen somos “enemigos.” Ya es un hecho, que en ámbito internacional ahora tan solo George W. Bush, el presidente de los Estados Unidos de América, no solo lo es. Apreciamos, que también paso a serlo el presidente de México Vicente Fox a quien Hugo Chávez, catalogó de “cachorro del imperio”
Las actuaciones de una mayoría significativa de venezolanos que tenemos diferencias sustanciales y serias con el sistema de gobierno en Venezuela, se entienden como rivalidades contra el régimen, porque nos mostramos de la siguiente forma:
Contrarios, porque luchamos día a día por combatir la consolidación del Comunismoen Venezuela. Disidentes por rechazar la inherencia del asesino Fidel Castro en asuntos soberanos de la Nación. Opositores, por no avalar el saqueo y la dilapidación de recursos a nombre de una pretendida revolución Castro Comunista. Competidores, porque no aceptamos la imposición de un modelo político contrario a la forma cívica, pacifica y democrática en que hemos vivido tradicionalmente, rechazando el totalitarismo. En síntesis OEA, como dice el clamor popular; ¡ venga, pa´ que vea!
Para que vean, sucumbir a un país que a fuerza de totalitarismo, se incentiva el socialismo del siglo XXI, en perjuicio de la libertad, donde hay un claro imperio de la tiranía.
Por eso no somos adversarios, estamos catalogados como enemigos del régimen.
La presencia y actuación de la OEA en Venezuela, posterior al aval del fraudulento resultado electoral del 15 de Agosto del 2004, es totalmente demagógica. Los demagogos, pretender una vez más avalar la ambición de un gobernante en la dominación forzada de un pueblo soberano, que se resiste a vivir bajo las sombras del Comunismo.

Cita: “No quieren creer los demagogos que la practica de la libertad no se sostiene sino con virtudes y que donde estas reinan es impotente la tiranía. Así, pues mientras que seamos viciosos no podemos ser libres, désele al Estado la forma que se quiera”.
Simón Bolívar,

Coronel (Av.) Sammy Landaeta Millán
Caracas, 15 de Noviembre de 2005

lunes, 7 de noviembre de 2005

OBLIGACIÓN Y DERECHO. Por: Sammy Landaeta Millán. Venezuela


OBLIGACIÓN Y DERECHO. Por: Sammy Landaeta Millán. 

La antigua Constitución de la República de Venezuela promulgada en 1961; la misma que al inicio de la era de la pretendida revolución, Hugo Rafael Chávez Frías desconoció en su vigencia y la catalogó de “moribunda” establece en su Capitulo VI. Derechos Políticos. Articulo 110: “el voto es un derecho y una función pública. Su ejercicio es obligatorio, dentro de los limites y condiciones que establezca la ley.” Por su parte la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, promulgada en 1999, en su Capitulo IV, Sección Primera. De los Derechos políticos. Articulo 63 establece: “El sufragio es un derecho. Se ejercerá mediante votaciones libres, universales, directas y secretas. La ley garantiza en principio de la personalización del sufragio y la representación proporcional.”

Viendo el actual comportamiento del desgobierno en Venezuela, no nos queda otra alternativa sino catalogar el texto de la constitución actual, como viciado, por el alto contenido de “letra muerta”. Los hechos hablan por sí solos. Los derechos políticos se cercenan. Se detienen y enjuician a personas que colocan propaganda electoral. Se utilizan procedimiento abiertamente contrarios a la representación proporcional, como lo es el caso de la unión de dos o más tarjetas de movimientos políticos, que ha sido denominada, “morochas.” Se utiliza la ley de responsabilidad social en radio y televisión, conocida también como resorte ó mordaza, para conculcar los derechos de la propaganda electoral y el derecho de comunicación e información de los ciudadanos. No obstante a este ultimo aspecto, se transmiten cadenas televisivas de radio y televisión desde el exterior de la Nación protagonizadas por Hugo Chávez Frías, inquilino temporal del Palacio de Miraflores y para colmo, este se expresa en palabreas soeces y nos pretende dar lecciones de Socialismo y Comunismo de ocasión , al estilo de la década de los años 60s.

Vemos con estupor que el régimen gubernamental regrese a la obligatoriedad del voto en Venezuela, aplicable solo al sector que apoya al desgobierno, pero para el sector opositor se pretende aniquilar a los adversarios, en función de conservar la mayoría de los curules de la Asamblea Nacional, a cualquier precio. La recompensa esta proyectada en la supuesta consecución de 10 millones de votos de un universo de 14, para reelegir al payaso de las tiras cómicas de la política nacional, apoyado por el Comunismo internacional.
Se nos obliga a acatar la propaganda electoral sin límite de tiempo televisivo. Se nos impone respetar la imagen inmaculada de la representación política actual de "Ali Babá y los cuarenta ladrones”, aunque superan el centenar, mientras por el canal del estado, patrimonio de todos los venezolanos, en diversos programas se sataniza, se desacredita y se ofende la dignidad de los que tiene el valor de enfrentar al régimen, electoralmente.

Se nos obligó recientemente en Venezuela a ver una cadena de más de dos horas, con alto contenido político a favor de las fuerzas del gobierno, pero nos quedo de nuevo la evidencia fresca de la imagen del ilegal presidente, transmitida a todos los países del mundo. Se puede ser campesino, de origen humilde, de condición económica pobre y se puede haber crecido en su sector marginal. La mayoría de los venezolanos, incluyéndome, quizás aplicamos en una o varias de esas opciones. Lo que es imperdonable es llevar la marginalidad y el resentimiento social en la mente, el alma y el corazón. No estamos obligados a soportarlo ni mucho menos a aceptarlo dentro del marco de un evento de carácter internacional, en representación de todos los venezolanos. ¡Que vergüenza!

Tenemos el derecho de sufragar, pero no con la condiciones de desventaja, ante el actual Consejo Nacional Electoral (CNE). Exigimos ser representados por un presidente digno y no es justo que un orate, que a la par usurpa el cargo, se quede en el resentimiento y en las restricciones mentales y físicas, del encierro en el escaparate de su abuela; aflore sus sentimientos Castristas, Comunistas y exponga su lenguaje incendiario para motivar una lucha entre sus semejantes contra supuestas fuerzas imperialistas, en tierra ajena. Todo esto apoyado con el concurso de una serie de adeptos trasladados por vía marítima, aérea y terrestre, desde varios países de Latinoamérica con la subvención proporcionada por el dinero venezolano producto del petróleo. ¡Que desgracia!

Tenemos el derecho de reclamar ante la Comunidad Internacional, la apatía que demostraron los representantes de los gobiernos de América en la IV Cumbre de presidentes y jefes de estado, al observar que una vez que Hugo Chávez Frías, produjo un anti cumbre, se siente al lado de todos ellos a deliberar sobre el tema del “empleo digno,” Por lo indigno de su presencia, debió haberse quedado solo en el teatro del Hotel Hermitage en Mar del Plata, Argentina. No merecía, ni merece compartir un espacio público dentro de tantas personalidades, mientras antes incentivaba las pasiones y creaba conflictos canallescos, para enfrentar las diferentes corrientes de pensamientos en América Latina. Ese grosero Señor, debió quedarse solo o fuera de la cumbre, y el daño a Venezuela como Estado, hubiese sido mínimo, porque a una significativa mayoría de venezolanos, no nos representa. Pero pese a su actuación, tampoco conseguirá que le dejemos el campo abierto para que se adueñe totalmente de la patria e implante el Comunismo. ¡Tendrá que matarnos!

Tenemos el derecho de exigirle al usurpador de la presidencia, el hecho de lanzar al cesto de desperdicios el nombre y la imagen de un país con el nuestro, al expresar que habla en representación del asesino Fidel Castro y refiere en sus anécdotas que "Dios ayuda a Chávez y a sus amigos," según Fidel, sabiendo todos nosotros, que ese magnicida, no cree en Dios, en Cristo, ni mucho menos en la Virgen. ¡Que extraordinaria forma de manipular!

Todos los conciudadanos tenemos el deber de revisar que significa en materia de seguridad, que el usurpador de la presidencia pronuncie: ¡Viva el Socialismo del Siglo XXI! También estamos internamente obligados a pensar, que implicaciones tiene, que un ex militar golpista, sea actualmente el Comandante en Jefe de la Fuerza Armada Nacional de nuestro país, y pronuncie frases tales como: ¡Viva Fidel! ¡Viva el Che! ¡Hasta la victoria siempre! ¡Patria o muerte! Ante esto convendría preguntarnos: ¿Cuales son nuestras obligaciones y cuales son nuestros derechos? ¿Estaremos en el derecho de rechazar, en lo sucesivo, la receta obligada que nos impone el Castro Comunismo en perjuicio de nuestras libertades ciudadanas? ¡Reflexionemos hoy, para mañana es tarde!

Finalmente, tenemos el deber de exigirle a los partidos de oposición que defienden “espacios políticos,” si verdaderamente su obligación es convocar y concurrir a votar. O si por el contrario, su derecho está en no llamar a elecciones y retirar definitivamente sus candidatos, ante la perdida del estado de derecho, la paz, la seguridad y la soberanía de la Nación

Cita: “Son derechos del hombre: la libertad, la seguridad, la propiedad y la igualdad. La felicidad general, que es el objeto de la sociedad, consiste en el perfecto goce de estos derechos”.
Simón Bolívar.

Coronel (Av.) Sammy Landaeta Millán
Caracas, 07 de Noviembre de 2005

martes, 1 de noviembre de 2005

“Instigación al odio”. Por: Sammy Landaeta Millán.

En el inicio de la campaña electoral, para elegir los nuevos Diputados a la Asamblea Nacional, se observan acciones que tienden a infundir miedo, temor, amedrentar o quizás detener en forma alevosa, arbitraria e ilegal a las personas adversas al régimen que comanda el usurpador de la presidencia de la República, Hugo Chávez Frías, reforzado por la satrapía de sus seguidores, mal llamados "bolivarianos" que pretenden consolidar una revolución Castro Comunista en Venezuela.
Coincidencialmente se inicia esta nueva etapa de rencor, aversión, aborrecimiento antipatía y desprecio por los “enemigos” del desgobierno nacional, con la “noche de brujas” pero esto no es una ritual. No se nos coloca frente a la fantasía de la fiesta de la víspera de todos los Santos, o de la celebración moderna de Halloween, sino lamentablemente ante una realidad de la oscuridad y las tinieblas que palpa, vive, conoce y sufre a diario el venezolano; con el acecho del Comunismo internacional.
Con la detención de varios jóvenes del partido político Primero Justicia comenzó el ensayo de la parte inicial de la obra teatral macabra, de las elecciones del venidero 4 de Diciembre. Ahora no solo se arremete contra los miembros de la oposición que han llamado a la población a no concurrir a los comicios, que han advertido de abstenerse de votar o que invocan apegarse al desconocimiento del régimen de acuerdo con lo que consagra el artículo 350 de la Constitución vigente.
Curiosamente la acción recayó sobre miembros del mencionado partido primero Justicia, organización que junto a otros movimientos participó el fin de semana próximo pasado en un acto político en Caracas, que conminaba a la población de barriadas populares, clases desposeídas y electores en general a concurrir a votar masivamente para alcanzar la mayoría política que intenta, desde su punto de vista, poner freno a las arbitrariedades, las complicidades, las manipulaciones y a la obediencia ciega de ciertos miembros del parlamento nacional, que obedecen las ordenes de un autócrata bajo los preceptos fundamentales del militarismo, el autoritarismo, la violación a la constitución y la supresión del estado de derecho en Venezuela.
Los referidos jóvenes colocaban propagandas políticas en distintos sitios de Caracas, que incluían la figura de un fantasma. Su detención debe ser rechazada y condenada enérgicamente por todos los venezolanos. La acción política cargada de humor, critica y disentimiento del venezolano ha sido interpretada desde los oscuros sótanos de la policía política DISIP, como terrorista; desestabilizadora, dentro del marco de la propaganda electoral.
La acción del desgobierno incluye un nuevo delito imputable exclusivamente a los opositores. Con él se pretende aplicar la ley y por supuesto castigar a los adversarios, participen o no en las elecciones. Se tendrá razón e indicación de su comisión cuando las pancartas, murales, afiches o propaganda electoral, critique a un funcionario, personero o candidato de las fuerzas del gobierno, a ser elegido a cualquier cargo público. La mordaza es cada día más fuerte en la República de Venezuela. Los fiscales, los jueces y los cuerpos policiales deberían revisar lo concerniente a quien profesa en Venezuela y en América Latina el ODIO. Este no otro que el fantasma de los sótanos del palacio de Miraflores, encarnado en la persona de Hugo Chávez Frías.
El inminente advenimiento de este nuevo delito en Venezuela, es materia que los juristas deberían estudiar aceleradamente ya que con ello se pretende implicar a jóvenes de una organización política y en lo sucesivo a todos los adversarios al régimen por ser protagonistas de la acción terrorista de “instigación al odio.” Cabria preguntarnos: ¿Quién mas que este régimen ha etiquetado catalogado o vulnerado a las personas con epítetos, que vulneran la virtud de los ciudadanos?
El líder de la revolución entreguista, antipatriótica y dilapidadora de recursos del país, Hugo Chávez Frías. debería responder la pregunta anterior, porque en asuntos de odios, resentimientos, cárcel, exilio, persecución y muerte, él es un especialista. A todos nos ha etiquetado de fascistas, terroristas, golpistas, escuálidos, oligarcas y otros. Por tanto también debería ser el primer citado a los tribunales competentes, porque en su forma de querer conducir al país, dista mucho de fomentar la conciliación de los conciudadanos, en una Nación al borde del quiebre social, político, económico, petrolero, militar y electoral, porque en su gestión se erradicó la utilización de las palabras amor y afecto.
Quizás con el atropello de los jóvenes integrantes del referido partido Primero Justicia, sea una manera de que Dios trate de escenificar, de ejemplarizar, o de alertar a aquellos que todavía creen en los caminos democráticos del régimen. Tal vez sea la nueva forma de advertirles que ellos son también vulnerables y susceptibles de ser arropados por las acciones de los hombres malignos que manejan las revoluciones, sin escatimar los valores, las bondades y las virtudes de los demás.
Debemos pensar que todos somos susceptibles de ser detenidos. Que somos o podemos ser victimas y que al final representamos un objetivo de un proyecto que quiere ideologizarnos por la fuerza, a los predios del Comunismo. En síntesis, todos somos o estaremos afectados en Venezuela por el fomento del odio en perjuicio de las virtudes entre connacionales, “por ahora.” Quizás después, será toda Latinoamérica.
La “instigación al odio” es o será una forma de agredir a los contrarios al régimen. Pero en este momento el ataque se revierte contra un sector que manifiesta su intención de mantener “espacios políticos," presenta un candidato presidencial y hace un reiterado llamado a la consulta del 4 de Diciembre. ¿Tendrán razón los que lo califican como miembros de la oposición chavista? Ante las acciones del desgobierno, se hace preciso que reflexionen; la venganza, el odio, la revancha es materia de hombres malvados y de esto no cabe ninguna duda.
Cita: “Solo los malvados pueden profesar odio a la virtud”
Simón Bolívar
Coronel (Av.) Sammy Landaeta Millán
Caracas, 01 de Noviembre de 2005