Con profunda tristeza hago del conocimiento de la Oficialidad y militares retirados, en general, acerca del zarpe de uno de nuestros viejos marinos.
Ayer, 19 de marzo, soltó amarras el alma del Capitán de Navío PABLO LIRA HIDALGO a quien conocí en los albores de mi carrera cuando, antes de un zarpe del D-11, se apersonó en representación de la Dirección de Ingeniería para pasar una Inspección Pre Zarpe. Ante tal anuncio, todo fue en nuestro D-11 un "cori-corri". Nada más y nada menos que la CGM-DI pasaría la inspección. Fue impresionante la presencia de aquel Oficial de porte elegante y con una aureola de sabiduría que lo iluminaba todo. Y todo, sin novedad; el buque zarpó y lo demás es historia. Ese fue mi primer encuentro con él y, en las mismas condiciones hubo otros encuentros más. La vida siguió su curso y volví a encontrarlo, ya, en la honrosa situación de Retiro que hoy nos agobia.
Si, pasado el tiempo volví a encontrarlo, ahora era un hombre gremialista, con ideas claras sobre ¿Qué hacer con el IORFAN? Es que el Capitán LIRA, siempre fue un hombre preocupado por la suerte del Oficial en Retiro y la de sus sobrevivientes, tanto así que para este nuevo período había sido postulado como Vocal por la Armada, ante la Junta Directiva del IORFAN; él decía "Tenemos que recuperar al IORFAN".
Hoy la infáusta noticia llega a mi correo y no puedo más que desear a su señora esposa, hijos y nietos, en especial al Capitán de Navío Pablo Lira Durán, su hijo y heredero de sus glorias, mis más sentidas palabras condolencia.
Perteneció el capitán LIRA a la promoción Contralmirante Jose Eugenio Hernandez del año 1951, Oficiales a quienes hago extensiva mi participación de pesar.
Paz a sus restos.
CN. JAVIER A. SÁNCHEZ PEREIRA
Remisión: Gilberto Rojas