PAGINAS Y RECORTES

domingo, 18 de abril de 2010

ENTREVISTA A OTTO GEBAUER// Por Sheyla G. Urdaneta

Entrevista realizada a Otto Gebauer, por Sheyla G. Urdaneta
para La Verdad, Maracaibo, el 11 de abril del 2010.
web@laverdad.com - Sheyla G. Urdaneta - Maracaibo - 11/04/2010 00:01 11
(No negocia)
Le pidieron que cambiara su versión de los hechos
y que dijera que el presidente Chávez estaba dispuesto
a morir por el pueblo. Se negó.

Hoy está preso desde hace cinco años
en la cárcel de Ramo Verde y afirma que pasa
las 24 horas luchando “contra esta dictadura".

Otto Gebauer, el capitán que vio llorar al Presidente
recalca que Lucas Rincón dijo la verdad
El 11 de abril Chávez lo que se quería era ir para Cuba
Tiene una sentencia de 12 años, seis meses 22 días y 12 horas. Lo detienen por primera vez el 10 de noviembre de 2004, luego le otorgan beneficio de régimen abierto el 13 de marzo de 2009 y dos meses y 13 días después una comisión lo busca, lo saca “a golpes” y lo devuelve a Ramo Verde, sitio donde cumple la pena que le impusieron.

A Otto Gebauer lo mantienen preso por “la complicidad en el delito de la privación ilegítima de la libertad de Hugo Rafael Chávez Frías los días 11, 12 y 13 de abril de 2002 y por el delito de insubordinación”. Ni su esposa Ana Mercedes de Gebauer “ni ningún jurista” le ha podido explicar porqué su pena, como supuesto cómplice de estos delitos, “es cuatro veces la pena de quien está sentenciado como autor, culpable y responsable de estos hechos”.

Tiene 41 años y una hija de ocho. Asegura que antes del 11 de abril jamás tuvo contacto directo con el presidente Hugo Chávez. Su trabajo en la Fuerza Armada estaba relacionado con el área de inteligencia. Le asignaron conformar una mesa de trabajo en la Disip y apuntó que sería colaborador, pero que no quería estar en la Policía Política.

De acuerdo con sus afirmaciones, Hugo Chávez renunció a la presidencia de Venezuela y quería irse a Cuba. Su historia de los hechos denota que bajo esa condición, el presidente tomó la decisión. Responsabiliza al General Efraín Vazques Velasco de que en menos de tres días Chávez Frías fue ex presidente y luego presidente. “Le endoso la responsabilidad a quien era el más antiguo en ese momento del componente militar, que era el general Efraín Vazquez Velasco, porque era el oficial de más alta graduación”.

A los militares al mando de la situación en esos días de abril los cataloga como “indisciplinados. Allí faltó toma de decisiones. Cuando uno lee lo que pasó y cómo actuaron los militares yo digo, estos parecen los osos revoltosos”.

Recuerda paso a paso lo que sucedió esos tres días. En ocasiones habla en tercera persona. Desde su celda en Ramo Verde dice que está “las 24 horas peleando contra esta dictadura desde todo punto de vista”. Rechaza que cada 11 de abril el Presidente cuente una historia diferente de lo que sucedió. “Otto Gebauer únicamente prestó el servicio. Estuvo allí y te puedo garantizar que mientras estuvo Otto Gebauer se les respetaron los derechos al teniente coronel Hugo Rafael Chávez Frías, ex presidente de la República de ese entonces. Porque él en ningún momento manifestó que era el Presidente y por el contrario en la noche le dijo al capitán Blondel que le recordara al coronel Rodríguez Salas, que una de las condiciones de su renuncia era que lo sacaran para Cuba y fue lo que mandó a pedir”.

Otto Gebauer vio llorar a Chávez frente a un televisor mientras los medios retransmitían los hechos del 11 de abril. Recalca que “cuando uno dice la verdad uno tiene por qué temer a nada”. Ya tiene cinco años detenido y apunta: “No me doblego. No negocio con estos malandros. No tranzo, ni me repliego".

-¿A Hugo Chávez lo secuestraron, como él dice, los que estaban al frente de lo que sucedió el 11 de abri?

- La palabra secuestro no cabe allí. Chávez se presenta ese día en la comandancia general del Ejército ante una petición del cuerpo de generales, para formalizar su renuncia personalmente ante lo que había dicho Lucas Rincón. Allí, tengo entendido -yo no estuve allí-, pero lo que tengo entendido es que se presentó una discusión entre los generales. El general más antiguo era Efraín Vázquez Velasco que era el comandante general del ejército y se determina que Chávez debe ser presentado ante la justicia con motivo de esclarecer los muertos ocurridos el día 11 de abril. Se decide entonces que en vez de permitírsele que se fuera de Venezuela, rindiese cuentas.

El general Vasquez Velásco ordena que se lleve al 35 regimiento de Policía Militar, que está en Fuerte Tiuna, y allí Chávez es recluído. Eso fue el día 12 de abril como a las 6.00 de la mañana. Yo me presento a eso de las 8.30 por orden del coronel Rodríguez Salas que era el jefe de la custodia y de la seguridad del señor Chávez. En el lugar estaban dos fiscales militares del Ministerio Público. El fiscal general militar las manda para constatar el estado físico del señor Chávez y el sitio de reclusión y aparte de eso, dicho por la misma fiscal militar, ellas fueron a notificar de la imputación de la cual sería objeto Hugo Rafael Chávez Frías.

- ¿Cuál era la imputación?

- No la sé. Ella habló de la imputación, más no de los delitos que se le iban a imputar. Ese día se levantó un acta donde se constató que estaba en buen estado de salud, en un sitio de reclusión acorde a su estatus y a su condición y que próximamente iba a ser presentado ante la justicia militar con la finalidad de determinar el sitio de reclusión.

- ¿Chávez renunció?

- Primero, la conducta de Hugo Chávez ese 12 de abril ante mi persona. Llegan las fiscales y levantan un acta y no le dan el estatus de Presidente de la República. Segundo, nunca, en ningún momento manifestó que era el Presidente de la República y que por lo tanto debía recibir el trato de presidente, es decir, no tenerlo en una habitación bajo una seguridad. Es más, cuando llegó a la Policía Militar ni honores le rindieron. Entonces todos esos son indicios. Tercero, la noche antes del traslado le dice al capitán Carlos Blondel que recuerde que una de las condiciones de su renuncia era que lo sacaran para Cuba. No me dijo que había renunciado, pero a Blondel le dijo que recordara al coronel Rodríguez Salas que una de las condiciones de su renuncia era que lo sacaran para Cuba y fue lo que mandó a pedir. Eso me hacía deducir que había renunciado. Aparte de eso, el mayor Suárez Chourio, que ahorita es coronel y jefe de su seguridad, ese día se fue de vacaciones. El general Vietri Vietri, que en ese momento era jefe de la Casa Militar, cuando yo lo llamé y hablé con él porque le estábamos pidiendo una ayuda para Chávez me dijo: Ya yo no trabajo para ese señor.

- ¿Entonces el ex ministro Lucas Rincón dijo la verdad?.

- Yo digo en el libro de “Yo lo vi llorar” que la cobardía de Lucas es proporcional a su tamaño. Lucas es muy alto. Lucas para mí dijo la verdad. De hecho él se fue inmediatamente después de la alocución esa en la que dijo que se le había pedido la renuncia la cual aceptó. Salió de Fuerte Tiuna. Él nunca se acostó a dormir ni se acostó con dos granadas ni con tres. Nada de eso. El se fue pa'l zipote.


- ¿A Chávez lo iban a matar?

- Jamás. De hecho, tengo estudios en Derecho Internacional Humanitario y a mí me designa para la comisión el general José Esteban Godoy Peña, general de brigada del Ejército, quien era el director de los derechos humanos de la Fuerza Armada Nacional y en todo momento la orden fue: Garantizar su integridad física y el respeto a sus derechos humanos. A Hugo Chávez se le permitió un teléfono en varias oportunidades. El hizo uso del teléfono celular del coronel Rodríguez Salas que es quien lo recibe.

- ¿Por qué Chávez lloró? ¿A qué le tenía miedo?

- Yo creo que esa sería una pregunta que el debería responder. Al Hugo Chávez que yo vi demacrado y llorando fue viendo el televisor cuando empezaron a pasar las escenas de los muertos de todos los hechos violentos que habían sucedido el día anterior. Un Chávez muy reflexivo, muy quebrado emocional y anímicamente. En una oportunidad manifestó que tenía miedo. Me imagino por todo ese cúmulo de situaciones. Tal vez culpa. Temor a lo que le venía. Entonces eso generó ese cuadro patético que observé ese día en Hugo Chávez, que me llevó a meterme en este embrollo. Porque cuando ellos buscan que yo cambie mi versión del Chávez que yo vi, yo digo bueno que eso fue lo que vi y no lo puedo cambiar porque eso fue lo que sucedió.

- ¿Su desgracia comienza cuando usted vio a Chávez llorar?

- Sí y continúa cuando yo me niego a cambiar la versión de los hechos del 12 de abril, de todo lo que presencié no solamente en la policía militar, sino allá en La Orchila. El general de división López Hidalgo que era inspector general del Ejército y que después me enteré que lo habían nombrado presidente de la comisión que investigaría los sucesos del 11, 12 y 13 de abril dentro de las Fuerzas Armadas, me llaman a mí y me dicen que colabore, que yo debo colaborar más.

Eso fue después de la sentencia del 14 de agosto del 2002 cuando el TSJ dictaminó que no hubo golpe de estado, sino vacío de poder. Cuando absuelven a todos esos generales, automáticamente ellos arremeten contra los oficiales subalternos que estábamos implicados en esos hechos. Me imagino y deduzco de eso que era para buscar que nosotros ante el temor de las imputaciones, de las acusaciones y todas las retaliaciones que venían por esos hechos, nosotros acusáramos a los generales.

- ¿Qué sucede luego?

- Ellos me llaman a mí después de la sentencia. López Hidalgo y los otros coroneles me dicen que yo debo colaborar más y mi respuesta fue: yo he colaborado hasta ahora. A mí me han llamado y yo he dado mi declaraciones y todo lo que me han preguntado yo he manifestado tal cual ocurrió para esclarecer los hechos. Entonces me dice: Nosotros necesitamos que usted nos diga que el 11 de abril habían m
ontado un golpe de estado, que al Presidente lo querían matar y que el presidente estaba dispuesto a morir por el pueblo. La respuesta mía en ese momento fue: Con todo respeto, si hubo un golpe de Estado montado eso no lo puede responder el capitán Gebauer, porque un capitán no da golpes de Estado. Si Chávez estaba dispuesto a morir por el pueblo o no, yo no vi eso, porque el Chávez que yo vi fue el que se quería ir para Cuba. Allí me dijo capitán entonces usted está botado y va preso.

- ¿Qué hay que hacer para que en Venezuela se respete la Constitución y haya separación de poderes?

- Las constituciones tiene los artículos 350 y el 333. Pero te voy a decir, la única estrategia que hay en un país que está bajo una dictadura es que el pueblo tiene que arrecharse, tan sencillo como eso.

De cara a la candidatura

- ¿Usted está en la lista de los presos políticos que quieren optar a candidaturas para la Asamblea Nacional. Cuáles son sus propuestas?

- Otto es un venezolano que está las 24 horas peleando contra esta dictadura desde todo punto de vista. Aquí estamos ya hace cinco años y no me doblego, no negocio con estos malandros, no tranzo ni me repliego. Aquí hay que mantenerse en la pelea. La pelea tiene que ser en todos los campos en el político, en el económico y en el social. Esta es una de las formas de acción si hace falta. Hay que tener claro una cosa, que para vencer debe existir la unidad por sobre todo, no porque Chávez sea mayoría sino porque esto es una dictadura y tiene secuestrado los poderes.

- ¿Usted lloró cuando lo pusieron preso?

- No lloré. Le dije a Ramírez Espósito, jefe de investigaciones de la DIM cuando me metieron preso el jueves 28 de mayo de 2009, cuando esto caiga coronel, usted y su jefe van a rendir cuentas ante la justicia, téngalo por seguro.
Fuente: Historia Actual