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miércoles, 12 de enero de 2011

UNA ESTRATEGIA II // Por Nelson Maica C // POLÍTICA

POLÍTICA
UNA ESTRATEGIA II
Por Nelson Maica C

Retomamos la idea. Articular una estrategia con participación liberal para recuperar prontamente la libertad perdida en Venezuela. Seguimos.
01.   Esa estrategia debería incluir todo tipo de medios que nos conduzcan prontamente al objetivo: lograr la libertad. Nada de teorías gradualistas, nada por tramos. Nada de repetir como loros ese cliché “el fin justifica los medios”. El concepto de “medio” implica una actividad instrumental, ordenada con relación a un fin; es una verdad filosófica, contenida en la relación que se da entre los medios y el fin.
Cuando falla el cliché porque supuestamente se usaron malos medios, cuanto posiblemente ocurrió es que los medios usados violentaron otros fines insuficientemente valorados por quienes seleccionaron los medios. Ejemplo: cuando los socialistas comunistas asesinan y/o eliminan algún líder porque se les opone (lo consideran un medio), pero están violentando un fin que ellos supuestamente valoran: la vida misma. Cuando invaden y/o quitan y/o expropian con la violencia y la fuerza bruta están violando la propiedad, producto del trabajo de la propia humanidad e intelecto de cada persona, atropellan a la persona misma. Mas claro no canta un gallo.
Para el liberal venezolano, reconquistar la libertad es un fin y hacerlo rápido justificaría el empleo de medios expeditos para lograrlo. Pero esos medios no deberían entrar en contradicción ni en colisión; tampoco, colocar la obtención de la libertad en un segundo plano. Así que la estrategia gradualista no tiene, a mi juicio, cabida en este caso. El uso de la agresión, la fuerza bruta, como medio va directamente en contra del objetivo de la no agresión. Para eso esta la resistencia pacifica. Ej., Gandhi, Mándela, King, etc., Berlin, Moscú, etc.
Uno de los fracasos del destructor y depredador mayor converso al rojo, es su inmensa contradicción en casi todo y a cada momento. Usa la violación de todo principio natural y humano, constitucional, legal y abusa de la fuerza y la violencia para supuestamente imponer un paraíso, su paraíso, según sus peroratas, todo un poema a la contradicción ¿Un paraíso? ¿Con 130.000 muertes violentas bajo este régimen? Es, simplemente, un infierno, todo lo contrario.
02.   A los liberales nos correspondería en estos momentos trasmitir la renovación de la esperanza sobre la reconquista de la libertad, con la mayor celeridad y desarrollar, y/o contribuir, con una política de la sociedad civil que nos conduzca a ese fin. Es, en las actuales circunstancias, difícil, más no imposible. Dos cosas a tener en cuenta: una, apoyar siempre todo proceso que nos lleve a reconquistar la libertad, venga de donde venga; dos, evitar a toda costa las vías y los medios que entren en contradicción, implícita o explicita, con la reconquista de la libertad. Ojo con ese gradualismo filosófico y/o teórico, es una trampa de los “aprovechadores” rojos.
03.   Los liberales podrían sugerir a las demás fuerzas cívicas, de la sociedad civil, algunos objetivos políticos colaterales, coadyuvantes, de segunda importancia, con relación a la reconquista de la libertad: por ejemplo, exigir al gobierno la rebaja inmediata de impuestos sin sustitutos, seria una contribución hacia la libertad. Los altísimos ingresos por petróleo lo avalan. La imposición de nuevos impuestos va directamente contra la libertad. Otro  ejemplo, oponerse al servicio militar obligatorio porque atenta contra la propiedad del propio cuerpo y voluntad de la persona, es una violación de un derecho humano natural, del ciudadano; oponerse a los gastos superfluos, en armas y dadivas, sobre todo al exterior y a la cacareada expansión internacional del rojismo y ayuda a movimientos subversivos y sostenimiento y apuntalamiento de las economías de cuba y china, ambos con estrategias ocultas en contra del mundo occidental y su libertad y propiedad. Los liberales podrían usar sus capacidades intelectuales estratégicas y sus conocimientos sobre la realidad para determinar mejor sus prioridades en el ámbito de la política local.
04.   Los liberales tienen muy en cuenta que el mundo, hasta el presente, esta, en el largo plazo, dirigido por ideas. Que para triunfar hay que difundir el ideario liberal y conseguir que sea asumido por el pueblo, por el ciudadano. De aquí que la difusión masiva, y/o educación, de todos los tipos, sea una condición necesaria para obtener la libertad. ¿Conoce usted algún conjunto de ideas, disciplina, ya se traten de religión y/o de ciencia, etc., que avanzaron por si solas y consiguieron enraizar en las personas, en los ciudadanos, en el pueblo, sin la existencia de maestros, profesores, instructores, decididos a difundirlas? Los “cuadros”, los profesionales liberales deberían asumir plenamente ese cometido.
Da la impresión de que son pocos los liberales aquí en Venezuela que reconocen la necesidad del desarrollo de la libertad como una dedicación, como la base fundamental para el progreso de los conceptos teóricos y de la situación de la libertad en el mundo real.
05.   Los liberales se iniciaron, seguramente, a partir de una y/o pocas personas que luego se expandieron, aumentaron. En sus inicios fue una minoría de cuadros profesionales, luego constituyeron una “vanguardia” que, mas tarde, consiguió adherentes a la ideología liberal. Se realizo toda una revolución cuyos testimonios más cercanos, hoy, al liberalismo, son Inglaterra y Estados Unidos de América que, sin embargo, no son totalmente liberales. Todavía se lucha y se luchara por el liberalismo.
06.   Los liberales venezolanos deberíamos lograr despertar la conciencia del pueblo, de los ciudadanos, por alcanzar la libertad arrebatada. De no conseguirlo prontamente como es, a mi juicio, la actual situación, por lo menos se podría intentar ayudar a quienes se dejen ayudar a conseguirla. Y, en esta vía, esta la posibilidad cierta, tal como se ha dado en algunos de los matices del liberalismo local y que ha sido provechoso, de apoyar movimientos unitarios que aparentemente apuntan al logro de la libertad. Podría darse el caso, incluso, de formar coaliciones con no liberales para determinadas y bien definidas actividades. Un liberal, en su localidad, podría, en consonancia con sus prioridades y situación, formar parte de un “frente común”, para, por ejemplo, exigir la rebaja de los impuestos, viviendas, salud, seguridad, vías de comunicación, electricidad, gas, libertad de comercio, de actividades productivas, contra los discursos excluyentes, demagógicos, alienantes, y de guerra y groseros y amenazantes del depredador rojo, etc.
07.   La participación activa de los liberales, bien identificados, en estos “frentes comunes” y por unos temas bien definidos, debería lograr, además, multiplicar su capacidad para trabajar en beneficio de un objetivo liberal especifico y dárselo a conocer a todo aquel no liberal que también se moviliza, concurre a la lucha por esa causa; de igual manera, suponemos que esa actividad ayude a despertar la conciencia de los integrantes de la coalición y sirva para demostrarles que el liberalismo es un sistema completo. Los derechos de propiedad pueden ser salvaguardados, seguramente, si se defienden y/o restauran las libertades cívicas, con “valor cívico”, tal como acabamos de observar ha realizado el pueblo boliviano frente al gobierno actual con motivo del alza de la gasolina. Los bolivianos nos mostraron, esta vez, cómo se actúa con “valor cívico”; como se defienden los derechos civiles, con los líderes a la cabeza de las acciones correspondientes. Seguimos.
Pregunta: ¿Las universidades pueden sancionar a los egresados que actúan malvadamente y/o en su contra, para destruirla?
¡Insólito! ¿Quién acepta hoy leyes que contradicen la constitución? Lord Acton, 1834-1902, Ingles, historiador, tiene razón: “Con un poder absoluto hasta a un burro le resulta fácil gobernar”.
¡Espectacular! La burla que los rojos le hacen a los venezolanos y a las democracias representativas del mundo con esa directiva del soviet.
¡El colmo del sadismo rojo contra el pueblo! Carestía evidente de viviendas, refugios tipo gulag bolchevique por todas partes. País nadando en petróleo y carreteras intransitables. Los afectados somos todos. ¡El Colmo! Evidente sadismos contra el pueblo.
¿Por fin, algún organismo internacional como la OEA abrió un ojo, un oído, la boca, a favor de la democracia y de los demócratas venezolanos y/o del continente? ¿Pero, qué hará? ¿Podrá anular la habilitante totalitaria y antidemocrática?
Siempre que nos alejamos de la cooperación voluntaria e intentamos hacer el bien utilizando la fuerza, el anti valor de la fuerza triunfa sobre las buenas intenciones”
Milton Friedman, 1912-2006, economista de la escuela de Chicago, USA, premio Nóbel de economía 1976.

Caracas, Venezuela, 02/01/2011.