PAGINAS Y RECORTES

jueves, 31 de marzo de 2011

Hagamos de Venezuela un país alto promotor de la imaginación… (II) // Por: René Núñez // PORTACHUELO


PORTACHUELO/Por: René Núñez 
29 de marzo de 2011
Hagamos de Venezuela un país
alto promotor de la imaginación… (II)
 Si los venezolanos queremos mirar el futuro en positivo, no debemos seguir eludiendo y postergando la decisión colectiva de asumir la aventura del desarrollo humano convencidos de los sacrificios y de los esfuerzos necesarios para alcanzarlo con inteligencia, y con imaginación creadora.
 Los indicadores de ese proceso están relacionados con la educación, la salud (esperanza de vida al nacer) y el ingreso nacional. Con ellos el PNUD evalúa y mide el éxito de los países en la promoción y la ejecución del desarrollo integral de sus nacionales. En otras palabras, la calidad de vida.
 Envidiable que naciones como Noruega, Islandia, Australia, Irlanda, Dinamarca, Suiza, Suecia, entre otras, sin tener los inmensos recursos naturales (petróleo, hierro, oro, carbón, uranio, bauxita, ríos, lagos, estaciones de clima benignos) que hemos tenido los venezolanos, hayan alcanzado alto niveles de desarrollo humano. A esta élite cultural privilegiada de naciones, también pertenece una de las nuestras en América Latina: Chile.
 Venezuela, nuestro país, no ha sabido hasta ahora administrar sus recursos con eficiencia ytransparencia. El populismo nos ha hecho mucho daño a nivel de gobiernos y de dirigentes, hasta tal punto que seguimos siendo un país rentista, dependiente fundamentalmente del petróleo. Esta situación se ha agravado los doce últimos años por la insistencia del régimen de turno de implantar un sistema político centralizado, con una economía cerrada, donde lo ideológico pasa a ser la prioridad en las políticas públicas. Un modelo retrógrado, fracasado, conocido como “El socialismo-comunismo del siglo XXI”, muy parecido al cubano, e inspirado en la tesis ceresoliana donde toda la responsabilidad del Estado y de la sociedad recae sobre un mesías revolucionario con apoyo de un ejército popular de milicianos.
 Los resultados de ese proceso están a la vista, y se reflejan en la restricción de nuestras libertades, de nuestros derechos humanos, de nuestros derechos democráticos, en la progresiva pérdida del poder adquisitivo empobreciéndonos cada vez más, sin oportunidades de crear, de producir, de evolucionar, de avanzar unidos en una misma dirección de apuesta a una vida colectiva mejor, pacífica y segura. No es casual, sino una consecuencia que seamos hoy considerados a nivel mundial como uno de los países más improductivo, con la mayor inflación, menos transparente en la gestión pública, más inseguro, con un sistema de salud vulnerable.
 Debe quedar muy claro que no hay un vínculo automático entre crecimiento económico y desarrollo humano, la verdadera medida del éxito de una sociedad se centra en la manera como los logros económicos se traducen en beneficios y oportunidades concretas para los ciudadanos.
 Cuando se revisa el mapa de países con alto desarrollo humano, se encuentra uno que éstos presentan características comunes facilitadoras de los grandes acuerdos nacionales que tuvieron gobiernos-dirigentes-ciudadanos que llegar para lograrlo, estas son:
a) Tienen como sistema político la democracia. Como garantía para no solo elegir gobiernos, sino para cambiarlos en la próxima elección. No hay reelecciones indefinidas. Los poderes públicos funcionar con autonomía e independencia garantizando el equilibrio de la sociedad.
b) Respeto al sistema de libertades. Funciona un estado de derecho, velador del trato igual de los ciudadanos ante sus leyes.
c) Hay economía de mercado. Tanto el sector privado como el público intervienen como agentes económicos y productivos. Además de alianzas entre ambos para acometer proyectos de interés nacional. Cada vez se observa menos participación del Estado en los grandes proyectos industriales; el Estado moderno progresivamente se ha ido concentrando en las responsabilidades de la educación, de la salud, de la seguridad social, de la seguridad individual y colectiva de sus habitantes.
d) La Educación, prioridad número uno de Estado. La educación básica y la secundaria, son responsabilidades públicas ejercidas muy profesionalmente. Muy importante son los logros en esta materia, se monitorea con mucho celo las estadísticas de acceso a la educación, los que la completan, pero también los “pensa” técnicos y universitarios desarrollados para dar respuesta a la demanda del mercado laboral nacional.
e) Inversión en las investigaciones científicas y tecnológicas. Reducir la dependencia externa solo es posible desarrollando técnicas y tecnologías. Cada nación prioriza las áreas donde se hacen estas inversiones; siendo las universidades las principales fuentes de esos estudios.
f) Moral, ética y perjurio. Estos valores están presentes en las conductas públicas, cuyas desviaciones son castigadas oportunamente. Los ciudadanos están informados de lo que hacen los gobiernos, la mentira es delito.
Internacionalista
Edición 1148. Twitter:@renenunezr Pueden oírme en “Diplomacia de Micrófono”, de 1:00 a 2:00 pm por la emisora LaMejor FM 91.5, acompañado del Lic. George Bello.