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miércoles, 1 de junio de 2011

ATAQUE CONSTANTE A LOS VALORES INSTITUCIONALES PARA EVITAR EL RENACER INSTITUCIONAL // Por: VA (ARV) Jesús Enrique Briceño García


ATAQUE CONSTANTE A LOS VALORES INSTITUCIONALES PARA EVITAR EL RENACER INSTITUCIONAL

                                                                                                                                     *Jesús Enrique Briceño García.

Toda Institución se nutre, no solo de los avances tecnológicos y procesos de Desarrollo de Carrera del Capital Humano necesarios para mejorar la EFICIENCIA ORGANIZACIONAL, sino de las tradiciones que dan fuerza y valor de dignidad  a los hombres que la conforman. En nuestras actuales FFAA, hasta este álgido punto del Desarrollo Organizacional, ha sido trastocado por los actuales Altos Mandos en su pérfida trasgresión legal por tratar de sostener un Gobierno castrocomunista que en doce años, ha dividido la sociedad y presentado los peores índices de desempeño histórico en las variables del BIENESTAR GENERAL DE LA POBLACION. No hay tregua en las perversiones que tratan de imponer. Peroratas políticas como nunca se había visto en la historia moderna de las FFAA. Servilismo sin par, a la usanza de las montoneras de los inicios de la Historia Republicana. Aplausos parecidos a los de los mítines políticos en cientos de actos castrenses. Amenazas directas a los integrantes de la Institución que no se plieguen al designio comunista y amenazas al mismísimo Pueblo desde los diferentes Comandos de lo que una vez fue palestra de Institucionalidad y respeto a tradiciones y Valores organizacionales.

Sin duda, avanza la destrucción Institucional de las FFAA, para darle paso al partido armado de la revolución, con la total anuencia de Generales y Almirantes, seleccionados por el precursor de esta revolución, que es sinónimo de perdida incalculable del desarrollo de nuestro País.

Con tristeza vemos los dirigentes de las FFAA, dando respaldo activo a las violaciones a la Constitución y leyes venezolanas y a otros avalando con su silencio tantos desmanes que no conozco en mi vida profesional semejantes niveles de politización, entreguismo y celestina permisividad, materializando esa máxima de Lenin: ”Debemos engañar, mentir o matar, si el partido lo necesita”. ¿Donde quedaron esas enseñanzas de Mística y Dignidad profesional que contemplan en los Arts 5, 16, 28, 29 del Reglamento de Castigos Disciplinarios N°6 que resalta en los procesos de formación, los valores rectores de la vida Militar?.

Después de tanta revolución con invulsion, los venezolanos hemos comprobado que este gobierno se mantiene por artimañas, mentiras, subterfugios, coacciones, corruptelas y sin embargo no podemos contar con unas FFAA que rechacen tan indignas formas de actuación. ¿Es que esa Visión de Futuro que requiere toda Institución para Progresar, no les invita a la reflexión para evitar la violencia que se materializa a diario contra los ciudadanos, por la indolencia con que se esta tratando la Seguridad Fronteriza, permisiva a la invasión de los grupos guerrilleros de las FARC, mil veces constatados en los documentos que reseñan analistas estratégicos de otros Países? ¿No les da pena que a un evento de la magnitud de la Celebración Bicentenaria del Alma Mater de los hombres de la Seguridad de los espacios Acuáticos Nacionales, haya sido desdeñado por un discurso de poca consistencia profesional y alto contenido en lisonjas?. Es que no les produce inquietud que a diario existan cientos de evidencias donde oficiales del mas alto nivel están siendo señalados con indicios de participación en el narcotráfico y hasta ahora no se abren los procesos judiciales correspondientes?.

La trascendencia, Sres Oficiales, nos la enseñaron desde el ideario de nuestro Libertador Simón Bolívar, que exigía Institucionalidad por encima de politiquería. Libertad, por encima de la Vida y por eso lo dio todo para labrar con el resto de los Libertadores, una Republica Libre y Democrática y no lo que están apoyando, que se cae en pedazos por esa supuesta revolución castrocomunista, sin que el 87% de la población lo apoye. Un país que a la vista de cualquier ciudadano de las miles de protestas que se escenifican en los últimos seis meses, dirigen sus pedidos para llamar la atención sobre el deterioro en infraestructura y servicios, incapaz de brindar seguridad ni bienestar a sus pobladores. Un País, que registra cientos de casos de corruptelas en todos los órdenes e ineficiencia en la administración de los mas grandes recursos hasta ahora vistos en la historia. Un país en ruinas en salud, en educación y lo mas grave, invadidos como estamos por una de las dictaduras mas sangrientas del mundo, y que después de 50 años en el poder exhiben ese trato despreciable con su pueblo como la ha sido Cuba, en la que la mitad de su población fue obligado a emigrar a Miami y otras ciudades del exterior.

Pensar en la Seguridad y Defensa Nacional, es pensar en un inmediato cambio de su Dirección Política y Militar, porque ese Sector Estratégico tiene sus bases en la Institucionalidad que debemos comenzar a restituir. Restituir las bases de la Confianza que debemos legar a la Población, cuando se escuche nuevamente que un Profesional de las Armas y no un Político conduce su destino. Nos toca, Sres Generales y Almirantes rescatar la Seguridad y Defensa Nacional como factor primordial del desarrollo, porque si se ha pervertido la Seguridad Ciudadana, no es culpa de los pueblos sino de los Gobiernos ante su desconocimiento del manejo del Estado. Si se ha perdido los mínimos niveles de contención del delito, es solo culpa de un Gobierno que se ha dedicado a destruir las Instituciones con su penetración política hasta los más bajos niveles. Es culpa de los dirigentes que han cambiado valores como el pundonor, la honradez y el manejo de la meritocracia, solo para imponer una doctrina totalmente ajena a nuestra ideosincracia. Es culpa del Gobierno la ineptitud como conducen las diferentes instituciones al no respetar el desarrollo de carrera e imponer personas solo por su filiación política y no su preparación profesional. La pérfida politiquería en los cuarteles es la única razón de la carencia de alistamiento operativo en unidades que deberían resguardar la Seguridad Nacional.

La Politiquería de esta revolución es la que ha permitido que delincuentes reseñados por los diferentes organismos de seguridad del Estado, hayan accedido al poder y estos han destruido los símbolos de la lucha antiguerrillera de los años 60, con banderas y monumentos que exaltan los invasores cubanos y se olvidan de los cientos de soldados que ofrendaron sus vidas para mantener la Libertad. Es la entrega del poder a quienes masacraron nuestros policías y soldados y hasta pobladores inocentes y ahora son Presidente de la Asamblea Nacional y Ministros del Poder Ejecutivo. Ahora se permite que el Ministerio Público, pida la condena de un General retirado del Ejército, por la llamada Masacre de Yumare, en la que murieron en aquel tiempo nueve guerrilleros y que ahora llaman dirigentes sociales. Ahora se ve normal que un Ministro, pistola en cintura, de instrucciones en el juego socioeconómico para amedrentar trabajadores del campo. Ahora una milicia Inconstitucional y carente de valores de la Institución Militar, depende de la doctrina castrocomunista y no están insertas en procesos militares que requieren tiempo para la formación, capacitación y ni adiestradas, ni capacitadas para el Servicio Militar....sin duda los Sres. Generales y Almirantes han perdido el rumbo de la Institucionalidad que exige la Seguridad y Defensa Nacional

Amigos todos, es el momento de exigir que se respeten nuestras FFAA, o de lo contrario el Poder de las Armas seguirá en manos de politiqueros irresponsables, que no escuchan la voz del pueblo que clama por el regreso de la Institucionalidad. Por una Venezuela libre y democrática, acudamos al rescate de los Valores básicos que permiten materializar la Soberanía en esta mancillada Venezuela, con la que todo país es capaz de renacer en franco progreso, para alcanzar el Bienestar General que todos soñamos.

                                                                                  *Vicealmirante. Doctor en Administración.