PAGINAS Y RECORTES

martes, 29 de julio de 2014

LA DEMOCRACIA LIBERAL VS. EL NEO-COMUNISMO COLONIAL (III) Por: Cesar Guillen Citterio.



LA DEMOCRACIA LIBERAL VS. 
EL NEO-COMUNISMO COLONIAL (III)  
Por: Cesar Guillen Citterio

La actitud inescrupulosa del Comunismo, se puede demostrar en las aventuras en el África de los años 70, estas acciones fueron en parte producto de la política timorata y zigzagueante de los gobiernos democráticos occidentales de entonces y de Norteamérica principalmente. (La “prudencia del comportamiento democrático”, descrito en nuestro artículo numero I)

Esta actitud de indecisión y temor a la condena internacional recientemente terminado el conflicto de Vietnam, permitió que los Rusos y sus cipayos cubanos volcaran enormes recursos en hombres y equipos militares, a las fuerzas marxistas de la región (Angola, Mozambique, Congo, Etiopia, etc.) bajo la falsa bandera de ayuda a la liberación de los pueblos del yugo capitalista y Colonial.

El presidente para entonces Gerald Ford y su gabinete no lograron conseguir el apoyo del congreso para enviar recursos a las fuerzas democráticas. En 1975 todavía estaba fresco el síndrome de Vietnam. El congreso norteamericano autónomo, prohibió toda ayuda exterior (Enmienda Clark) Esta política tuvo su mayor aplicación durante el mandato del irresoluto y ambiguo presidente Jimmy Carter. (Convertido ahora en un Moderno mercader del arbitraje democrático)

 Mientras las democracias se ajustaban a los procedimientos habituales del apego a las leyes y a la constitución, los regímenes comunistas sin permiso ni debate, enviaban 300 mil soldados-esclavos cubanos al África, mientras los Rusos proporcionaban todo tipo de  material bélico y toda la logística militar.

En las sociedades democráticas, las protestas de los ciudadanos en las calles ejerciendo sus derechos de opinión en contra de la guerra de Vietnam y de la invasión de Camboya (Aun ignorantes de la realidad por venir) eran celebradas y difundidas por el comunismo internacional. Estos tomaban lo que en una democracia es perfectamente normal “Protestar”, como una interpretación de apoyo al “sistema comunista liberador” que ciertamente se estaba instalando y después se instaló en el sureste asiático.

Sin embargo toda manifestación de protesta ciudadana desapareció y por supuesto estas nunca sucedieron en los países comunistas, al descubrirse posteriormente, la cruda y cínica realidad de  la violencia del régimen de Hanoi, el intento de invasión de la China de Mao al propio Vietnam, el genocidio criminal de Camboya a manos del líder rojo Pol Pot y la posterior y abusiva invasión Soviética de Afganistán.

El Iluso y manido estribillo libertario del “1,2,3 Vietnam” del Che Guevara, entonado por la juventud radical y emotiva latinoamericana, quedo en desuso vergonzosamente, traicionado por sus propios promotores.

REMISIÓN: César Guillén C.