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miércoles, 9 de marzo de 2016

AL CANCILLER GUYANES, GREENIDGE, Por: G/D (Ej). Oswaldo Sujú Raffo. ¡LA VERDAD SEA DICHA!

FOTO: Canciller de Guyana, Carl Greenigde, por cortesía de La Razón 

AL CANCILLER GUYANES, GREENIDGE, 
¡LA VERDAD SEA DICHA!
                           
 G/D (Ej). Oswaldo Sujú Raffo. 
(IDEFV) 03-03-2016.

Las recientes informaciones de la prensa internacional y de Guyana, recogen la afirmación del Canciller guyanés Greenidge, donde aboga por llevar a la C.I.J la disputa territorial con Venezuela por el T. Esequibo o Guayana Esequiba. Esta afirmación es repetitiva, el funcionario guyanés demuestra desconocimiento del contenido del Acuerdo de Ginebra de 1966, firmado hace 50 años y en forma ladina “ignora” el reconocimiento que la Gran Bretaña y su colonia, La Guayana Inglesa, hicieron de la contención de Venezuela, sobre lo irregular e írrito del Laudo de París de 1899 donde se nos despojó cobardemente de 160.000 kms2 de territorio nacional.

Le recomiendo al Canciller guyanés, sea más asiduo en la lectura que profusamente existe sobre el origen de esta problemática fronteriza entre los dos países vecinos, porque es necesario para que la verdad sea dicha y no sigan aprovechando la grave situación interna nacional, que lamentablemente hoy vive Venezuela, para expoliar en convite con empresas internacionales un territorio que nunca les ha pertenecido.

Primero: Es falso que la disputa entre Venezuela y Guyana se agudizó cuando la empresa petrolera EXXON MOBIL, autorizada por Guyana y sin aviso a Venezuela, en franca violación a legislaciones internacionales, encontró petróleo en áreas marinas limítrofes, según la proyección del canal de mayor profundidad y anchura en el delta del río Esequibo.

Segundo: La disputa de Venezuela por su T. Esequibo cobra mayor fuerza y se agudiza, cuando se publica en 1949 el Memorándum Póstumo del Dr. Severo Mallet Prevost; abogado y asesor de los jueces norteamericanos que representaron a Venezuela y pudimos tomar conciencia de lo sucedido en el Tratado de Washington de 1897 y en el Laudo de París de 1899. Textualmente dijo:” Fue una conspiración contra Venezuela, una burda y cruel burla a los principios jurídicos, a la Historia, a la dignidad humana y a la justicia internacional” ¿Ud. sabía esto Canciller Greenidge?

Tercero: Se informó de la visita del Canciller del Brasil a Georgetown y su opinión ante la disputa fronteriza y se mencionó el Punto Trifinio en el pico Roraima, que “supuestamente marca” los límites entre Venezuela-Brasil y Guyana… Sr. Canciller creo que olvidó que Venezuela participó de “bono fine” en ese acto, durante el gobierno del Gral. Juan Vicente Gómez en el año 1932, sin haber conocido el Memorándum de Mellet Prevost. También usted olvidó el Tratado de Límites entre Venezuela y Brasil de 1859 y ratificado en 1860, en donde se reconocen los territorios de las cuencas de los ríos  ESEQUIBO, Cuyuni y Caroní para Venezuela… Esto último usted lo sabe, pero se hizo el zonzo. ¿verdad?
                                                 
Cuarto: Sr. Canciller, ustedes protestaron unas líneas administrativas de control, en las áreas marinas de Venezuela del mar Caribe venezolano y en nuestro mar Atlántico, modificadas luego en las zonas donde había solapamiento; en contraste Guyana estableció a priori e ilegalmente 4 “bloques de exploración” de petróleo y gas, en áreas marinas ancestralmente de Venezuela sin discusión alguna y en las áreas marinas que proyecta el Territorio Esequibo, hoy en reclamación para su recuperación. Usted conoce la jurisprudencia vigente de Tribunales Internacionales de Justicia, que prohíbe las atribuciones en áreas marinas mientras exista un litigio terrestre. ¿Verdad Sr. Canciller?

Quinto: Si el punto anterior es de su conocimiento, Sr. Canciller entonces que hacen seis buques de exploración petrolera de la EXXON en aguas limítrofes a solicitud de Guyana, para iniciar labores durante seis meses. Me imagino que no será en las aguas marinas del T. Esequibo, porque ello podría complicar la tensa situación en el área y la situación de Guyana, cuando se le responsabilice de la depredación y contaminación ambiental, destrucción de bosques y ríos, muertes de especies animales y de indígenas autóctonos sin que vuestro gobierno lo hayan evitado. Sr. Canciller, lo mencionado en este punto, está contemplado y les está autorizado hacer por el Acuerdo de Ginebra de 1966?

Sexto: Canciller Greenidge, según los medios de prensa: La O.N.U y el Sr. Bem-Ki-Moon, Secretario General son intermediarios en la controversia y llevarán el caso a la C.I.J “a menos que Venezuela haga lo decente y abandone su posición de que el Laudo de Paris de 1899 es nulo…” Esto último es un chiste ?. Quien lo dijo?. Lo dijeron bajo los vapores etílicos de un brindis? O fué que alguien se fumó una lumpia piche ?. Esta frase quedará como ejemplo de la estupidez humana y de la ignorancia supina del bárbaro autor ó tal vez fué una travesura de la prensa..?

En lo personal estoy de acuerdo en llevar esta controversia limítrofe centenaria a un Tribunal Internacional de Justicia, cuando se agoten los mejores medios pacíficos de solución práctica y antes, de que la razón de la fuerza se imponga a la fuerza de la razón…

Hoy Venezuela atraviesa mares turbulentos, grandes olas, rayos y centellas pican sus mástiles, pero mañana vendrá la calma y recuperaremos con justicia y voluntad, nuestra Guayana Esequiba, Para los legos, que abundan por ambos lados: la Provincia de Guayana se fundó en 1595 e integró la Capitanía General de Venezuela de 1777. El írrito Laudo de Paris de 1899 la despojó de Venezuela lo que involucra un lapso de 304 años y hoy tenemos 117 años reclamando ese despojo a nuestro territorio nacional, que significa 421 años…Guyana todavía no ha cumplido los 50 año y está usurpando y destruyendo, por nuestra pasividad e indiferencia traidora, un pedazo de nuestra Venezuela que es tuya, mía y nuestra. La Patria es primero. Hasta luego!!

Oswaldo Sujú Raffo