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jueves, 26 de noviembre de 2020

maradona ( con minúscula ). Por: Rafael Urribarri. Opinión. Venezuela. Exilio. EEUU.

 


maradona ( con minúscula ).

Cuando veo la foto y los videos de maradona (con minúscula) no puedo sino contemplar la imagen y representación de ese mundo decadente que se le quiere imponer a esta humanidad.

La ignorancia, la perversión, la desmesura, el hedonismo, el vicio, el exceso, la corrupción, la alienación ...  elementos presentes, todos ,  en una sociedad occidental que se va hundiendo y auto destruyendo .

En él vemos reflejados concepto del “liberalismo“, del modernísimo “Progre” ( la imposición a ultranza de lo transgresor del género humano ), del globalismo ...  aprovechados y estimulados por las agendas de los políticos socialistas,  mafiosos de la franquicia de la izquierda internacional, para hacerse de su apoyo y alcanzar el poder en todos los gobiernos y naciones que logren engañar.

El representa el inicio y final de los seres que nuestras sociedades enfermas han venido  conformando , fabricando , elaborando, muchos de ellos con unos  talentos que Dios le dio , voces extraordinarias ( Mercury,  Amy Winehouse, Whitney Houston... ), otros con destrezas deportivas ( Maradona ), creativas, artísticas ... muchas consumidas, destruidas por un entorno vacío de contenido espiritual e intelectual, lleno de vacuidad lisonjera y rapacidad de tantos que usufructúan de su fama, dinero y debilidad.

Es lo que una sociedad carente de principios familiares, integridad, honor, humildad, sin vida espiritual, promueve,  seres, vacíos,  débiles, extraviados en sus laberintos internos que finalmente los succionan, se los tragan, para desaparecer devorados por esa vorágine que se conforma alrededor de la gloria y celebridad que alcanzaron .

Así ha llegado una oscuridad que amenaza nuestra sociedad,  revestida de un liberalismo que se transmuta  para transformarse simplemente  en un libertinaje transgresor y asesino que pretende arrasar con nuestras vidas y especialmente con la de los más jóvenes.

Queda en nuestras manos y responsabilidad  el contraponer,  a todo esto,  una nueva cultura, inspirada en valores espirituales que iluminen y eleven nuestras conciencias  y entendimiento y que promuevan e inspiren a las nuevas generaciones.

 

Rafael Urribarri

26-11-2020


Rafael Jose Urribarri / Twitter: @rjurribarri