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jueves, 9 de junio de 2022

Los Suboficiales son una institución honorable, digna de admiración, de respeto y agradecimiento. G/D (Av.) Maximiliano Hernández Vásquez, en audio al Coronel (Av.) Hector Bermudez Diaz, y articulo del Coronel (Av.) Jesús Márquez García. ESCUTEFAV, DIC-1967.

Estimados integrantes de este chat SOMOS FAV, el día de ayer estuvo muy activo con el tema de los SOPC, al igual que en otras oportunidades, al final la cordura en algunos comentarios aplacó los ánimos y las aguas volvieron a su nivel. 

Como observador de toda  esta actividad, una persona admirada y querida por todos nosotros, conocedora de la historia de la FAV, ex comandante general de la Aviación y egresado de la EAM para el momento del inicio de la presencia de los SOPC en la institución, tuvo la gentileza de enviarle un audio al Coronel Hector Bermudez Diaz, integrante de este chat, con su apreciación sobre este importante tema,  que considero importante que sea escuchado por todos nosotros.  Nos referimos al General de División Maximiliano Hernandez Vasquez.

A continuación anexo dicho mensaje de audio


Escrito redactado el día de hoy 08/06/2022

Estimado y siempre atento General  Eduardo Caldera.

Una vez más se toca el tema sobre un grupo de militares  que nunca debió de existir en nuestro país.

Hago esta afirmación basado  en el análisis de las diferentes leyes militares del continente americano y algunos europeos.

Un aspecto muy significativo y común en todas ellas es que todos los ejércitos están conformados por Oficiales, Suboficiales y Tropa.

Esta clasificación obedece a que el eslabón entre el Oficial y la Tropa lo conforman los Suboficiales, personal proveniente de la tropa que hace vida profesional en la organización por largos periodos.

En Venezuela, a partir de la primera ley que organizó la estructura militar nuestra, a través de la Ley del Ejercito y la Armada promulgada en 1933, la estructura jerárquica militar mantenía la homogeneidad, o similitud, con la de otros países.

En la década de los años 40, se promulga una nueva Ley denominada Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas Nacionales (LOFANB) en donde se crean los Sub Oficiales Profesionales de Carrera (SOPC), personal, totalmente diferente a los provenientes de la tropa, necesario en dicha  época para operar y mantener el sofisticado material que el gobierno adquirió y que por carencia de personal técnico, era sumamente necesario para la institución.

Debemos recordar que en dicha época el promedio educativo del personal militar sobrepasaba, a duras penas, el sexto grado de educación primaria.

Para la época, la actividad que prevalecía en el Ejercito era el mando y conducción de tropas, caballería, pocas unidades blindadas, radio comunicaciones, artillería y sanidad militar. Al aparecer las unidades volantes con su tecnología extraña, nace la necesidad de contar con un personal, con capacidades y destrezas técnicas que el personal de suboficiales, procedentes de la tropa, carecía ya que en su gran mayoría eran analfabetas y poner en manos de este personal material con tecnología compleja, afectaría las operaciones aéreas en lo referente  en la seguridad y operatividad del material volante.

Hago esta introducción histórica para ponerlo en contexto sobre el nacimiento de los SOPC y la de los Suboficiales de tropa ya existente, pues hasta el día de hoy muchas personas consideran que se está hablando de lo mismo pero hay una gran diferencia entre cada uno.

Luego de tres años de promulgada la LOFAN, que da el nacimiento legal a los SOPC, se redacta y se pone en uso el recordado Reglamento de Castigos Disciplinarios Nro. 6, documento aplicado alegremente al personal de SOPC, en donde las sanciones aplicadas a este personal eran las correspondientes al personal  de suboficiales de tropa, en donde se cometieron todo tipo de injusticias por más de cincuenta años, ya que los SOPC no aparecían en dicho reglamento.

Con el correr de los años y el devenir de las necesidades, se conformaron diferentes cursos especiales para la formación de oficiales.

Tenemos el caso de la promoción graduada en Julio de 1968, a la cual le redujeron un año de formación y egresaron después de tres años.

Luego tenemos la del año 1969, conformada con un grupo de Bachilleres que egresaron de la EAM luego de dos años de formación y en donde fueron capacitados diversos pilotos.

En el Ejercito, a partir de Julio de 1967, se conformaron diversos cursos especiales de formación de oficiales tales como CEFEE, CACAO, AFORE, etc. en donde después de un periodo muy corto, egresaron como Sub Tenientes efectivos con las facultades necesarias para desempeñarse tan igual como los egresados de los diferentes institutos de formación de oficiales.

En estos cursos ingresaron  personal sin experiencia militar previa y sin embargo alcanzaron posiciones relevantes, tanto jerárquicas como organizacionales,  sin ningún contratiempo.

En lo referente al personal FAV que ingresó al curso especial en Julio de 1967, conformada por aprox. diez SOPC, no se efectuó ninguna selección y todo quedo en la opción personal de cada uno de ellos.

En este caso se evidenció que para dicha época, si existía la posibilidad de optar al cambio de categoría, pero por factores de falta de visión futurista y/o motivacional para todo el personal, se les negó tal posibilidad y solo se dedicaron a buscar en el mundo civil, bajo la figura de la asimilación, a personal profesional universitario sin tomar en cuenta que existía un gran número de SOPC con grados universitarios que pudieron haberlos ascendidos. En fin, no existía la voluntad para hacerlo y por ello la institución perdió a un grueso numero de valiosos hombres y mujeres que por falta de motivación prefirieron hacer vida fuera de la FAV.

Un caso emblemático en la FAV, lo conformó el personal de Oficiales egresado de la EAM en especialidades técnicas tales como electrónica, informática, mantenimiento, logística, administración, meteorología, etc.etc.

Este personal cumplió su misión, pero siempre acompañado de SOPC, pues los que verdaderamente efectuaban el trabajo eran ellos, pero en muchos casos, no los tomaban en cuenta para su desarrollo tanto institucional como personal, pues, por diversas razones, salvo poquísimas excepciones, no pudieron capacitarse en el IUPFAN u otras instituciones para así contar en la FAV con personal altamente capacitado para la vida militar y civil. Esto se denomina egoísmo.

Siendo el IUPFAN una institución militar, los afortunados estudiantes  civiles conformaban más del 90% del estudiantado, y el restante 10% solo para oficiales, negándose el ingreso a los SOPC. ?Como podemos denominar esto?,

señalar que el personal directivo de dicho instituto carecía de falta de visión futurista es solo un alago.

De todo esto podemos deducir que:

1- La creación de los SOPC fue un error, pues ningún Ejercito del mundo cuenta, o contaba, con cuatro categorías de militares.

2- Si un Oficial de Reserva, formado en menos de un año, pudo llegar al grado de General de Brigada, ?que le impide a otro Oficial, en este caso Técnico, con capacidades previamente comprobadas, educación de quinto nivel y todos los atributos que un líder debe dominar? para llegar al mismo grado. Yo, particularmente considero que es beneficioso para la institución pues en el universo de candidatos existen personas que superan a egresados de otros institutos.

3- La vigente LOFAN indica, en sus disposiciones transitorias, que en lo referente a los ascensos a los grados contemplados en la misma, se aplicaran solo a los Oficiales Técnicos egresados a partir de su promulgación. Esta disposición es discriminatoria, pues a los Oficiales de Comando se les debió aplicar la misma medida pues fue creado un nuevo grado de General y por lo tanto, la  medida también debió aplicarse.

4- Promulgar una nueva ley con una “Vacatio legis”, o periodo de espera para su aplicabilidad, muy extenso y en este caso con más de veinte años, diluye la motivación en el personal y abre las puertas para dejar la potestad de buscar otras vías en manos  de las autoridades del gobierno y aplicar la extrema necesidad para otorgar los ascensos militares pues es potestad del Presidente, y de no hacerlo, se perdería la oportunidad de contar con personal de alta valía y se desencadenarían factores desmotivadores que afectarían al resto del personal.

5- Todos nosotros conocemos, por lo menos a uno, que existieron, o existen, Generales que no merecen portar los Soles de dicho grado. En el hipotético caso que asciendan, por lo menos a uno por componente, estos candidatos, después del filtro respectivo y chequeados con la “Lupa” más grande, habrán cumplido con todos los requisitos para alcanzar dicho grado, condición que nos llenará de orgullo a todos nosotros, pues todo indica que, por ser los primeros, superarán las expectativas depositadas en ellos.

6- En relación al liderazgo, puedo indicarle que, a mi parecer, todos los Generales no son lideres ya que el verdadero líder nace y luego se pule.

En el acontecer del día a día, dentro y fuera de la FF.AA.NN., observamos a individuos que sobresalen de entre sus iguales ante situaciones normales y brillan con más intensidad a las inesperadas. El líder toma la iniciativa y actúa y esto se evidencia en todos los escalones jerárquicos, con la sola limitación del grado de responsabilidad de la persona. Un ejemplo clásico de nuestra infancia lo vemos en el juego de baseball, en donde un jugador dirige a sus compañeros de manera espontánea para lograr el éxito. Este jugador es el líder, igual comportamiento se observa en la FAN, en donde en cada actividad podemos ver el liderazgo.

Debido a la complejidad del tema, pido disculpa por lo extenso de este escrito, quedando de Ud., con la mayor estima, atte.,

Coronel (Av.) Jesús Márquez García.

ESCUTEFAV Dic.-1967