PAGINAS Y RECORTES

viernes, 5 de agosto de 2022

"La 3ª Guerra Mundial" - columna de Andrés Hoyos. Opinión. Politica. Internacional. El Espectador.


La 3ª Guerra Mundial

Después de los 50 a 70 millones de muertos que en un lapso de cinco años produjo la 2ª Guerra Mundial, sumada a la inmensa destrucción física en muchos países y al dramático reacomodo de la geografía política del mundo, de tarde en tarde se invoca el espectro de la 3ª Guerra Mundial. Esta tendría el agravante de involucrar armas nucleares, con la muerte potencial de decenas de millones de personas, quizá centenares, en unas pocas semanas. No, no es solo que nadie quiera una guerra así, sino que sería de muy lejos la peor catástrofe sufrida por la humanidad desde el comienzo de la historia conocida. Incluso, invocar la historia sirve de poco porque lo que está en juego no tiene antecedentes dada su enormidad.

Sin embargo, como ya pasó durante la Guerra Fría, ahora abundan las referencias irresponsables a la 3ª GM. De ahí, me parece, que haya que tocar el tema, dado que otros lo hacen de forma tan alegre. La timidez y el apaciguamiento contra un régimen botafuegos son de lejos la peor solución. Pensemos en una analogía que tal vez sirva. ¿Qué hubiera pasado si Polonia y Francia, en vez de caer como castillos de naipes, oponen a los nazis una resistencia tan feroz como la que Ucrania le ha presentado a Putin? Me perdonarán la alegría conceptual, pero lo más probable es que la 2ª GM se hubiera estancado ahí mismo. ¿Y si los alemanes de todo tipo, incluidos los judíos, arman unas guerrillas como las que están organizando los ucranianos? Los muertos de esa guerra civil hubieran sido cientos de miles, no el sartal de millones que hubo.

3 ago 2022 - 1:30 a. m.
Andrés Hoyos

REMISIÓN: 
De: PERSONAL andreshoyos@elmalpensante.com 
Date: mié, 3 ago 2022 a la(s) 17:29
Subject: "La 3ª Guerra Mundial" - columna de Andrés Hoyos
Hay psicópatas que están pensando en lo impensable: la 3ª Guerra Mundial. Por fortuna es una eventualidad remota, si bien es conveniente pensar en ella.
FUENTE: El Espectador
Andrés.