ASESINARON A DOUGLAS
Martes 11 de mayo de 2010
Buenos días Mingo...
Este  capítulo de la historia de un mundo que cada día se aleja más de lo  posible y sufrible,  comienza hoy por recordar a Douglas Serrano a quien  aún vemos y veremos en nuestra sesión de trabajo de los martes sobre  Historia Actual en el Doctorado en Ciencias Sociales de la Faces / UCV.
Douglas, el hijo siempre pendiente de su madre, el  padre  responsable, el economista, el inquieto investigador, siempre empañado  en adquirir una mayor formación, el de los pasos comprometidos con la  construcción de la historia de otros tiempos.
A  Douglas, el militante de los sueños y esperanzas de mañanas diferentes,  le fueron arrancadas las ilusiones de ver crecer los dos hijos. Le fue  arrancada la vida. Ya forma parte del registro luctuoso  que tiene  establecida la inseguridad en este ex país.
¿Qué ocurrió?  ¿Cómo y porqué lo asesinaron? ¿Simplemente para robarle el auto que no  le encendió a los hampones quienes en supuesta venganza le disparan al  profesor?
Sobre el fondo de todo esto poco o nada se  sabrá. Y eso es explicable en una sociedad que se mueve entre la sobre  descomposición y la sobre decadencia. 
En un ex país cuyo  control y autoridad está en manos de muchos cuerpos irregulares, donde a  nadie le importa la muerte que se produce a diario en el colectivo,  está claro que no hay ninguna posibilidad de detener el huracán del  asesinato.
Un tiempo de asesinos que cuenta  entre sus  actores a muchos agentes de los cuerpos de seguridad de un Estado que  se comporta, en consecuencia, como un auténtico criminal.
Un  Estado además regido hoy por las más perversas y nefastas fuerzas que  han hecho de la incapacidad su máxima credencial. De allí el hundimiento  de esta Venezuela. Por ello la continuación de una república que no es,  a la total deriva.
Una sociedad que se pretende controlar con  autoridades y mecanismos que nada tienen que ver con ella. Porque este  se vende como un período de revolución que tiene el propósito de  llevarnos a todos a cumplir con las disposiciones de un proceso que la  mayoría siente que no le pertenece.
Porque esta es una  ‘revolución a la cubana’. Y por ello, como lo denuncian los generales  Antonio Rivero y Ángel Vivas Perdomo, la propia conducción de lo que nos  queda de país se ha puesto en manos de los hermanos Castro.
No  hay aquí actividad que no cuente con la injerencia cubana. Ya se  reconoce oficialmente un ejército de 60 mil miembros para defender la  revolución bolivariana y fidelista. De allí la acusación de traición a  la patria adelantada por estos oficiales.
Y es en esta  sociedad, regida por una unión concebida y realizada a nivel de la  politiquería de los intereses del reparto, donde asesinaron a Douglas  Serrano. Es en esta parte de VENECUBA donde le quitaron el aliento al  compañero en el Paredón de la Inseguridad castro-chavista.
Douglas,  amigo, nos quedamos  comprometidos contigo a hacer el aporte que nos  corresponde para la construcción de un tiempo sin asesinos. Salud,  hermano y recibe un abrazo grande.
Qué historia,  amigos!!! 
Mingo, lunes 10 de mayo del 2010.
Fuente: Red Internacional del Colectivo 
