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lunes, 14 de marzo de 2011

UNA JUSTICIA EXTRAÑA. Por: VINICIO GUERRERO MÉNDEZ

UNA JUSTICIA EXTRAÑA. 
Por: VINICIO GUERRERO MÉNDEZ

“Y les advirtió: Cuidado con lo que hacen, porque no juzgaran con autoridad de hombres, sino con la de Dios, que estará con ustedes cuando pronuncien sentencia. Por tanto, teman al Señor y procedan con cuidado. Porque el Señor nuestro Dios, no admite injusticias, favoritismos ni sobornos”.    (2cronicas 19: 6-7)  
Cuando se  lucha por nuestros derechos debemos actuar con la  convicción que hasta las piedras nos darán la razón.

El incumplimiento de la orden impartida por la propia Sala del Tribunal Supremo de Justicia el 16 de mayo 2008 relativa al pago del Beneficio de Alimentación al personal militar en situación de retiro, jubilados, pensionados  y sobrevivientes decidió en audiencia este 3 de marzo del presente año, dictar “Improcedente” la solicitud de amparo y  revocar la medida cautelar dictada “procedente” por ustedes mismos. ¿No parece justo verdad? 
 
Después de tan irónica medida fuimos cordialmente invitados a continuar con nuestras pretensiones por tiempo indefinido. Tan sorprendente veredicto hubiera quedado parcialmente explicado (o distorsionado), en cierta manera, por la inquietud que me produce la esterilidad  judicial.

Deseo recordarles que acudimos a ustedes a favor de un derecho con la intención de recibir amparo ya que como personas de la tercera edad en su mayoría, simbolizamos la falta de protección y debilidad, no para sufrir esa injusta medida de desamparo humano. Con ello queda entendido que no les preocupa en absoluto las injusticias cometidas contra nosotros. Un caso más excepcional de injusticia.

Muchos de nuestros compañeros abrazados a la esperanza en recibirla se han ido calladamente a la tumba. Hombres probos que lo dieron todo por nuestra patria convencidos que una vez retirados recibirían por parte del gobierno en su justa medida  el merecido  respeto. Juzgando por los valores del mundo su fe fue en vano pero no es así, sabemos que Dios se encargara en su totalidad de esos detalles. 

Irónicamente tal derecho no hubiera padecido tantas trabas debido a que un militar retirado es quien dirige actualmente los destinos de nuestro país. Vendrá un día en que a la manera de Dios recibiremos el merecido derecho,  porque la justicia no deja nada sin cobrar

Señores jueces sabemos que algo anda mal y lo condicionados que se muestran a la práctica de la justicia, pero sean más concientes y sensibles desde el punto de vista de la libertad para juzgar con autoridad. 
  
Deseo recordarles que el arrepentimiento es un don de Dios y no sumisión. Este viene después del reconocimiento sincero a la culpa mediante un acto injusto subyugado bajo soborno de un tercero con daño a la justicia. Causa pena su visible temor a juzgar y la falta de  respeto y responsabilidad a Dios a quien juraron con toga y birrete honor y dignidad
 
Afectuosamente,
Imperfecto.
 
VINICIO GUERRERO MENDEZ
Vinguerrero@hotmail.com
 “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”. (Art.19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos) 

FUENTE: Notivargas