Tiempos
primitivos 2
José Vicente Carrasquero A.
Me veo en la obligación de
continuar elaborando sobre este tema al enterarme del abominable asesinato de
Luis Manuel Díaz (QEPD), secretario general de Acción Democrática en el Estado
Guárico. No hace falta ser un semiólogo para intuir que este condenable
atentado es producto del discurso que mana de las bocazas de los trogloditas
que ocupan los más altos cargos de dirección institucional del país.
Mientras tienen a decenas
de personas imputadas por incitación a la violencia, usan un discurso propio de
las hordas de Atila que llamaban al pillaje y a la masacre de los
enemigos. El “como sea” ha resultado
mucho más peligros y dañino que cualquier otro discurso que se haya pronunciado
en el país. No debe ser casualidad que desde ese momento se han producido
múltiples ataques de las hordas paramilitares rojas a actos de la oposición.
Es necesario reseñar los
ataques a @hcapriles en Guayana,
otro a @liliantintori en
Altagracia de Orituco en un evento separado del atentado a Díaz. Actos
reprochables que ameritan un rápido accionar de la institucionalidad del país.
De lo contrario, el voto castigo será todavía peor.
Es bien sabido para
quienes manejan los códigos de acción de masas que estos discursos primitivos se
convierten en órdenes para grupos creados por el gobierno para atacar los actos
de la oposición. Estos grupos paramilitares no nacieron de la nada. Cuentan con
entrenamiento y armamento que viene del partido de gobierno. Son una imitación
de las tropas que en Cuba atacan las manifestaciones en contra del régimen.
Maduro, en su protuberante
ignorancia, pretende conseguir el favor de los seguidores perdidos a través de
un discurso lleno de odio y vacío de expectativas. Se comporta como un jefe de
montonera y no como un presidente. No es capaz de entender la complejidad del
momento que le tocó en mala hora vivir. Ha dilapidado un capital político que
le hubiese permitido tomar las acciones necesarias para evitar que el país
llegara a la precariedad que estamos viviendo.
Una de las muchas
equivocaciones de Chávez fue dejar el destino de su proyecto político en las
peores manos que se podía. Ese 8 de Diciembre de 2012, flanqueado por sus
dos delfines delegó en Maduro todo su
capital político. Error que le costará mucho al momento de escribir la
historia. No es que el chavismo se destaque por tener entre sus filas personas
preparadas, pero lo cierto es que habían personas mucho más competentes que un
Nicolás cuya mecánica bucal denuncia su poca formación y su evidente incapacidad
para asumir tanta responsabilidad. Por cierto, Cabello tampoco era ni es una
opción.
La reacción del primitivus furrialenses es la máxima
expresión de desparpajo y cinismo que se pueda observar en un mundo que aspira
a la civilización. Sus palabras, “Ahora la moda es que grupos armados del chavismo atacaron
los actos de la oposición” son un insulto a la inteligencia. Es una burda forma
de deslindarse de los ataques. No hay un llamado a las autoridades a poner
orden. Es como si las cosas no fuesen con él.
El diseño es burdo, tosco, rústico, basto, torpe, ramplón e ineficaz.
Ordenan que se den los ataques para hacer creer que son provocados por la
oposición para culpar al gobierno. Buscan en su infinita torpeza hacer creer
que estos actos violentos son parte de la campaña opositora. Lo realmente
estúpido es que las fuerzas del orden no hayan capturado a uno solo de estos
bandoleros para ponerlos en evidencia.
El primitivus militarenses a
cargo del ministerio de la defensa (con minúsculas) se limita a amenazar a
supuestos actos terroristas que se darían el día de las elecciones. Mientras
tanto, hace caso omiso de los ataques terroristas que se han dado contra actos
opositores incluso con armas de guerra. No se ha oído al que finge ser ministro
condenar la barbarie roja que se empeña en usar la violencia como mecanismo
para frenar la expresión de rechazo y asco que produce este gobierno.
Nadie puede negar que Maduro ha desmantelado al país. Reinan las
prácticas del narcotráfico, amenazan grupos armados que no son enfrentados por
los cuerpos de seguridad del estado, policías que practican la delincuencia,
delincuentes que tienen a generales como asistentes, sobrinos que usan la rampa
de la vicepresidencia para manejar su negocio de venta de drogas, políticos
asesinados en las tarimas al triste estilo de Luis Carlos Galán en Colombia.
Todo esto para lo único que sirve es para reforzar la decisión que los
venezolanos ya tomaron. Esta clase política tiene que ser sustituida. Los homus primitivus que ocupan la cúpula
putrefacta en el poder no tendrán más remedio que ceder el paso a nuevas
fuerzas que tendrán la difícil tarea de ensamblar el país. De devolverle a los
venezolanos la fe en el futuro. De acabar con el narcotráfico y los grupos
irregulares.
Esa tarea no puede esperar más. Votar por Maduro o Cabello es apoyar la
destrucción nacional. Las mentes primitivas solo producen acciones arcaicas.
Venezuela necesita un viraje hacia la modernidad. Tenemos recursos humanos y
materiales. Este 6D tenemos que darle una oportunidad al país.
Contra la barbarie y el primitivismo, vota el 6D. #Salvatupatria