CADENAS PERPETUAS
Por Carlos E Méndez
Junio 13, 2010
Junio 13, 2010
Como Chávez es un perpetuo majadero y sueña con
perpetuarse en el poder, nos está dando a los venezolanos un anticipo
con sus alocuciones diarias o cadenas perpetuas. Me imagino que después
de dejar el poder también querrá seguir encadenado. En su debido momento
sabremos cuántas cadenas perpetuas le darán por haber destrozado a la
nación y por haber acabado con la precaria imagen del socialismo
mundial.
Otras cadenas tales como la ignorancia, hay que
evitar se perpetúen aunque a algunos pocos les incomode. Por eso es que,
los tiranos no educan al colectivo, sino que los idiotizan para luego
manejarlos a su antojo. De allí que se diga que el comunismo es una
secta más entre muchas, compuesta por hombres y mujeres dispuestos a
morir por su líder y en aras de una utopía: ”patria, socialismo o
muerte” es el eslogan o grito de guerra de esta nueva religión.
Las cadenas de galpones de la POLAR, las de los súper
mercados CADA, las de los abastos y bodegas de Quinta Crespo en
Caracas, las del Paso Los Teques, y las de Catia, así como las de
Central Maderense están en la mira del ejecutivo para ser adquiridas
“revolver en mano” o confiscados sus productos, debido a que en once
años este desgobierno fue incapaz de construir una red de mercados
populares para la distribución de alimentos a bajo costo. No conforme
con ello la principal industria nacional PDVSA que también “distribuye”
alimentos, incumple con la cuota petrolera de 3.000.000 de barriles
diarios al mismo ritmo que deja vencer o podrir más de 70.000 toneladas
de alimentos acaparados en 50 kilómetros de contenedores que tiene
estacionados en los principales puertos del país.
Por fortuna todo no es fatalidad gracias a las voces
de alerta y cadenas de oración que a diario elevan al cielo los
venezolanos y las venezolanas de todas las edades a ver si al fin Dios
se apiada de Venezuela y nos libra de las plagas faraónicas del siglo
XXI que se han ensañado contra la patria y le han cegado el
entendimiento a nuestros gobernantes. Son eslabones que no debemos dejar
que se rompan porque quizás sean los únicos que puedan ayudarnos a que
estas plagas no se perpetúen.
Autorizada su reproducción, difusión y publicación. Carlos E Méndez
"El miedo toco a la puerta; la fe la abrio, y no encontro a nadie" Martin Luther King.