EXPLOSIÓN DE UN ARSENAL MILITAR
(Chernòbyl Criollo)
Me llenó de inquietud conocer de la explosión (en horrible serie) de
algunos almacenes del arsenal de CAVIM ubicados en Maracay y, en
cambio, me alivió un poco conocer que no había habido muertes ni heridos
graves militares. Por desgracia para ella y sus familiares, una señora
muy joven, quien vivía aledaña, parece que pertenecía a la planta de
profesionales de una estación de Televisión, COLOR TV, local, y resultó
muerta por una explosión cuando intentaba cubrir el evento.
Debo
lamentar esa muerte, y aún las heridas por más leves que sean, de
cualquier persona, ellas nos entristecen y preocupan. Aún la más leve
zozobra que ese evento pudo haber producido en la comunidad y sus
secuelas sicológicas en niños y adultos, son verdaderamente de lamentar.
Expresados
estos primeros sentimientos, debo decir que me sorprendió que, ante
explosiones tan severas como las que preliminarmente dicen ocurrieron,
no haya habido muertos militares.
Uno explota un “tumba ranchos”
navideño o de esos terribles como odiosos “mata suegras” mal manipulado
y puede hasta perder la vida, y lo más seguro es que pierda dedos, etc.
En un almacén donde se depositan
armas, municiones y explosivos de tanto poder, uno sabe que debe
existir un soldado de guardia por cada puesto diseñado para ello, uno o
varios recorridas, los guardias de dormitorio, los oficiales de guardia,
cocineros de guardia, etc., y todo ese personal que nutre y dota, según
los cuadros de dotación, ese tipo de unidad, y todo ello ubicado o
desplegado en un perímetro relativamente corto. Esos efectivos militares
deberían haber estado en, o próximos a, los almacenes; y se salvaron.
Alabado sea Dios, si así fue..!
Resulta
una endiablada suerte que a esa hora, y en el perímetro donde uno ve en
las fotos y videos de youtube se produjo la tragedia, no haya caído
ningún militar.
Por
supuesto, se debe entender que una información de esa índole o
naturaleza debe ser tratada con la mayor discreción; así como no se debe
detallar la magnitud, ni las perdidas asociadas en materia de
municiones, explosivos y armas, por cuanto no se debe exponer a la
información abierta, detalles que serían un “lomito” para los miembros
de la comunidad de Inteligencia Estratégica de países vecinos. Eso no le
interesa sino a la FAN; pero, lo de los fallecidos, si los hubiere, o si en efecto se salvaron todas esas almas, es una maravillosa información que aliviaría la angustia nacional.
Tampoco
debe criticarse que, a la brevedad posible, el gobierno procure
adquirir armas, municiones y explosivos para recuperar el APRESTO
MILITAR Y LA CAPACIDAD DE REACCIÓN de nuestra
FAN lesionado por este indeseable suceso. Ese material de guerra no
estaba allí sobrando o por no dejar, era, es y sigue siendo necesario
para nuestra defensa militar. La Guerra no es un juego caprichoso de un
partido, sino una actividad que involucra a todos los venezolanos.
Por
otra parte, tragedias mayores a esta, como la de Chernóbil en Rusia, se
han producido, o como la del Challenger que explotó escasos minutos de
su despegue. Esos son sacrificios que se hacen y cuotas de dolor que se
pagan, por el progreso de la humanidad. En este caso, esos almacenes han
estado allí desde siglos (Gómez incluido) y se toman todas las medidas
para disminuir riesgos; pero, estos siempre se dan, “hasta en las mejores familias” (Leyes de Murphy dixit).
Ruego
a Dios y sea como inicialmente se ha dicho, que no hubo ni un solo
muerto militar, sino heridos leves y recuperables, y envío mis
condolencias a los familiares de la señora que perdió la vida en esos
menesteres, ya señalados por la prensa. Igualmente al pueblo de Maracay a
seguir luchando por superar este trauma y a los heridos a curarse
pronto y totalmente.
Esta
es una extraordinaria ocasión para sacar ventaja de la experiencia,
revisando, corrigiendo y multiplicando con sentido óptimo las medidas de
seguridad para el manejo de estos materiales, como lo establece la
Doctrina Logística Militar, y hacer lo conducente para preparar a una
población que vive aledaña a estos almacenes para que adopten las
medidas de seguridad que tiene que observar quien vive tan cerca de
ellos.
De ser posible alejar estas poblaciones fuera del
perímetro de seguridad, o mudar los almacenes. El problema es que ellos
están donde deben estar y son primeros allí que las poblaciones que se
edificaron a su alrededor después. Con los establecimientos militares
sucede como con los Aeropuertos. “Todo el mundo quiere uno que esté a 5 minutos de su casa; pero, que no esté en la ciudad”.
Todo puede mudarse, y traigo el caso de Fort D’Ors y de Fort Worth en USA que eran fuertes militares y ahora son ciudades civiles urbanas.
Otra
buena experiencia por analogía es la de observar que cada edificación,
área urbana, deposito, hotel, casa, apartamento, galpón, etc., esta
diseño y concebido para unos fines específicos y no se debe - de la noche a la mañana - aun en caso de necesidad, usarlos para fines distintos. Un
hotel no es un lugar óptimo para vivienda familiar, como tampoco un
edificio de oficinas lo es. Cada edificación tiene sus características y
compromete los servicios urbanísticos, tales como cloacas, agua dulce o
potable, estacionamientos, ascensores, seguridad, esparcimiento, etc.
Todo ello se diseña así para evitar el hacinamiento y la aglomeracion de
grandes contingentes humanos sin respetar las relaciones
interpersonales que se derivan de este hacinamiento y para incrementar
la seguridad de quienes viven allí.
Un
campo de Golf es un uso compartido como óptimo de un parque o pulmón
vegetal urbano. No se debe edificar viviendas, sino más bien conservarlo
como pulmón vegetal. Si no se quiere que los ricos, ni la clase media
jueguen golf, siémbrenles a esos campos árboles frutales, ornamentales, etc., y eso le dará vida y salud a la ciudad. ( Cultivos Organopònicos, ¿no?)
Los
animales , y nosotros seguimos siéndolo aún cuando nuestra neo-corteza
haya moderado las emociones primarias y haya diseñado respuestas
conscientes, cognitivas y racionales a los sentimientos primarios y les
llamamos pensamientos, éstas emociones no desparecen del
todo, y, en su oportunidad, ante un estimulo determinado, afloran en
ciertas circunstancias y estímulos y producen reacciones animales, poco
racionales, y causan mucho daño a quienes las ejecutan, como a quienes
las sufren (David Goleman dixit, en su obra “La Inteligencia Emocional”).
Todo ello es bueno observarlo, especialmente cuando, ante las vaguadas, se mete gente en edificaciones no
preparadas para ello. O cuando sin previsiones ningunas, se permite la
proliferación de barriadas adosadas a Bases Aéreas, Cuarteles, etc., a
veces por extranjeros de países vecinos. Por eso, es que existen las llamadas ZONAS MILITARES o ZONA DE SEGURIDAD MILITAR. SI no observamos esto, estaremos facilitando los sabotajes, si es que se sospecha de estos, como lo ha asomado nuestro señor
presidente.
Por
lo pronto, no debemos acelerar conclusiones, y esperar los resultados
de la investigación, si es que éstos pudieran hacerse públicos.
¿Qué pasó aquí?
CN.Eddy Darìo Barrios Orozco
58-(0242) 361 40 64 Habitaciòn (Home).
58-(0414) 148 37 08
58-(0416) 605 04 64
IMAGEN: La Patilla