La ex Secretaria Privada del ex presidente venezolano Jaime Lusinchi,
  Blanca Ibáñez, envió una carta a la redacción de Noticias24 donde deja
  constancia de su enojo por las ‘irrespetuosas, sibilinas, mentirosas y cobardes’ palabras de Teodoro Petkoff en su editorial de hoy.
“Señor Petkoff Usted miente al decirle al país que el ascenso del  
general Rangel Silva “es sólo comparable a algunos honores militares que
  recibió la Sra. Blanca Ibáñez”. Entiendo que, en su caso, ésta  
afirmación  no es más que un recurso retórico mal empleado. Yo  
lo desafío a que responsablemente señale el sitio, la hora y el nombre  
de los oficiales que, según usted, me rindieron honores”, dice Ibáñez en su carta.
Petkoff dijo en su editorial de este lunes que el ascenso del general Henry Rangel Silva “es sólo comparable a algunos honores militares que recibió la Sra. Blanca Ibáñez”. 
Critica Ibáñez además que el director de Tal Cual le haga “el juego de manera perversa a los enemigos de la democracia”, y dudó de su condición de opositor a la administración Chávez.
Lea a continuación la carta completa de Ibáñez a Petkoff:
Señor Teodoro Petkoff
Director del diario Tal Cual
Director del diario Tal Cual
Leo su artículo, aparecido en esta fecha en el  diario bajo su  
dirección y reproducido por otros medios de comunicación, en el cual usted me alude  de manera irrespetuosa, sibilina, mentirosa y cobarde. 
Digo irrespetuosa porque no se trata sólo de exponerme al desprecio  
público al comparar mi paso por la administración pública con la gestión
  de miembros de nuestra institución armada inequívocamente vinculados 
al  narcotráfico y a la degradación moral y política. Personajes que de 
 manera abierta y desafiante han advertido que el sistema de gobierno  
actual es un sistema político rehén de miembros de esas fuerzas armadas 
 que desconocerían a cualquier otra persona que pudiera ser electa por  
voluntad popular distinta a Chávez Frías.
Digo sibilina porque su propia actuación pública a si lo ha puesto de
  manifiesto al usufructuar una pretendida posición de opositor y  
demócrata cuando  no escapa al lector acucioso las innumerables veces  
que abogó por respaldar y reconocer la bondad de muchas de las medidas  
dictadas por el actual régimen. Pero por encima de todo, usted es un experto en crear situaciones caóticas para aprovechar un minuto más de aliento en su moribunda carrera política. 
Señor Petkoff Usted miente al decirle al país que el ascenso del  
general Rangel Silva “es sólo comparable a algunos honores militares que
  recibió la Sra. Blanca Ibáñez”. Entiendo que, en su caso, ésta  
afirmación  no es más que un recurso retórico mal empleado. Yo lo  
desafío a que responsablemente señale el sitio, la hora y el nombre de los oficiales que, según usted, me rindieron honores. 
Usted, que sólo tiene el mérito actual de ser un fabulador político, 
 fue de los primeros en atentar contra el régimen democrático que  
desdeñosamente pasó a llamarse de la Cuarta República y que no sólo le  
dió el indulto por sus innumerables tropelías, sino que lo hizo  
parlamentario, candidato presidencial y ministro de Estado.
Hoy Usted les hace el juego de manera perversa a los enemigos de la  
democracia o, mejor dicho, a los enemigos de la Cuarta República. Y lo  
hace, no sólo ahora conmigo sino en muchos otros casos, cuando,  
deliberadamente, confunde a las nuevas generaciones equiparando este  
sistema actual con aquel, que con su carga de errores, entre los cuales 
 sin duda están los míos, existía la posibilidad, tal como inútilmente  
usted lo intentó, de ser un libre aspirante a la primera magistratura.
Usted, cobardemente utiliza ese medio de comunicación que no  
existiría si no existiera el chavismo, que es su infecto alimento, para 
 hacer reprochables comparaciones que satisfacen y alegran a quien Usted sólo en apariencia dice oponerse. 
Señor Petkoff, sé que estamos en posiciones distintas.
 Usted no es, como tantos exiliados venezolanos, un enemigo de este  
régimen. Usted, con su meliflua actuación pública no es sino un escritor
  de ocasión que hace afirmaciones sin respeto alguno para con sus  
lectores; lectores que son muchos pues no sólo están en la oposición  
venezolana sino también, mayoritariamente, en las filas del gobierno que
  se solazan con sus pretendidas diatribas y sus inconsistentes  
argumentos críticos.
Señor Petkoff, a personas de mi mayor respeto les he entregado el  
borrador de esta carta; he aceptado sus observaciones de sintáxis pero  
me he negado a excluir ninguna de las afirmaciones que he hecho.  Por  
ello, esta carta no ha sido escrita en estado de natural indignación, al
  contrario, la escribo con la tristeza de saber su evidente colaboracionismo. 
El mismo que intentó con el Primer Magistrado Chávez Frías y que,  
según la propia confesión de este,  rechazó en la cárcel de Yare donde  
usted lo visitara.
Usted sabe que es su obligación ética hacer publicar esta carta.
Atentamente,
 Blanca Ibáñez
 San José de Costa Rica, a los quince días del mes de noviembre del año 2010
FUENTE: Radio Fe y Alegría Noticias
IMAGEN SUPERIOR: Noticias24.com
FUENTE: Radio Fe y Alegría Noticias
IMAGEN SUPERIOR: Noticias24.com






