Moralista por fuera y corrupto por dentro:
Vladimir Padrino López contrató con el Estado venezolano
Written by Pan Caliente // 11 febrero, 2015 // Politica // No comments
Vladimir Padrino López contrató con el Estado venezolano
Written by Pan Caliente // 11 febrero, 2015 // Politica // No comments
Inversiones Neliyari, C.A. es una empresa venezolana identificada
con Registro de Información Fiscal, RIF, No. J312132973, y cuyo
domicilio fiscal se encuentra en Caracas, específicamente en la avenida
Los Próceres, urbanización Santa Mónica, Almacenes militares del
Instituto de Previsión Social de las Fuerzas Armadas, IPSFA. Tiene un
capital suscrito y pagado de 20 millones de bolívares y se dedica a la
distribución de juguetes, instrumentos y artes musicales, equipamiento,
material, accesorios y suministros para educación .
Hasta aquí, todo bien y hasta muestra loable del esfuerzo por
levantar emprendimientos en medio de la difícil situación que atraviesa
Venezuela. Estamos, pues, ante la presencia de personas que creen en su
país y se empeñan en luchar en contra de la adversidad para crecer como
personas y al mismo tiempo hacer crecer a su país.
Esta empresa había corrido con la suerte de ser proveedora de
Petróleos de Venezuela, PDVSA y de las Fuerzas Armadas, a todas luces
una gran oportunidad de avanzar al contar con la confianza de
instituciones de tanto prestigio y envergadura. Obviamente Inversiones
Neliyari debía tener amplios méritos como para obtener el visto bueno de
los citados entes gubernamentales, con fama de tener altos estándares
de exigencia –por lo menos así lo suelen referir con insistencia– a la
hora de establecer todo tipo de relaciones, en especial comerciales.
La razón social de Inversiones Neliyari puede encontrarse en el
Registro Nacional de Contratistas del gobierno venezolano en donde reza
que dicha empresa tiene como objeto “el desempeño de toda actividad
lícita de carácter mercantil y en especial la compra venta de regalos de
toda especie, distribución, importación y exportación de bienes de
cualquier clase o naturaleza”. Como puede verse una gente dispuesta a
todo, a lograrlo todo con tal y sea lícito, eso sí.
El mismo registro refiere que Inversiones Neliyari, constituida el 6
de octubre de 2004 y cuya junta directiva se actualizó en septiembre de
2004, tenía previsto, por lo menos así lo refiere el RNC, tener una
vida hasta el año 2024, cuando seguramente reanudarían “votos” por
llamarlo de alguna manera y decidirían seguir adelante ya seguramente
afianzados como una empresa sólida de Venezuela.
Lamentablemente no fue así. La empresa cerró sus puertas en 2007,
según puede deducirse, y quedó inhabilitada para contratar con el Estado
de conformidad con el articulo 50 de la Ley de Contrataciones
Públicas.
No tan santos
¿Por qué nos ocupamos de Inversiones Neliyari, C.A.?
Pues, porque al detenernos a observar quienes eran sus accionistas e
integraban su Junta Directiva y eran sus representantes legales, los
nombres de estas personas resaltan, en especial uno de ellos, quien a la
sazón funge como vicepresidente.
Y es que, a saber, Ángel Vicente Betancourt Infante, figura como
presidente u representante legal; Nélida de los Ángeles Betancourt
Contreras, es la gerente de administración; Sharon Angélica Betancourt
Contreras aparece sin cargo específico.
Esto nombres, como vemos dicen poco, pero como ya referimos en la
vicepresidencia de Inversiones Neliyari, C.A. ejerció Vladimir Padrino
López, actual Ministro de la Defensa de Venezuela y Jefe del Comando
Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
El mismo de verbo encendido que en su cuenta Twitter se presenta
como “soldado bolivariano, decidido y convencido a seguir construyendo
la patria socialista! ”(sic), el mismo que pregona su honorabilidad y
patriotismo.
Vladimir Padrino, el que sorprendió a toda Venezuela en un desfile
militar en refiriendo ante el difunto Hugo Chávez que “Se hacen
presentes en la avenida Monumental de Los Próceres 10.890 patriotas,
bolivarianos, socialistas, antiimperialistas, revolucionarios,
adiestrados y equipados para asumir el sagrado deber de la defensa de la
Nación”. Unas palabras que a todas luces contravenían lo expresado en
el artículo 328 de la Constitución que declara a la Fuerza Armada
Nacional como una institución al servicio de la nación y no de
parcialidad política alguna.
Pero a todas luces, no es ese el único artículo de la legislación
venezolana que viola Vladimir Padrino López, sino aquellos también que
le prohíben a todo funcionario público – y Padrino López lo ha sido
durante los últimos 30 años cuando menos– actuar al mismo tiempo como
proveedor y contratista del gobierno.
Además, al descubrir el nombre de Padrino López en el registro de
empresas contratistas del Estado venezolano, queda claro el porqué de la
dirección de ubicación de la empresa Inversiones Neliyari, C.A. en la
sede de los almacenes militares del IPSFA en Los Próceres. Sin duda,
otra evidencia del usufructo de los bienes públicos en beneficio propio
haciendo uso de su poder e influencia
Cabe destacar que quien ejerce funciones como presidente de la
empresa en cuestión, a saber, Ángel Vicente Betancourt Infante, es
suegro de Padrino López , mientras que de Nélida de los Ángeles
Betancourt Contreras y Sharon Angélica Betancourt Contreras, es fácil
deducir el vínculo de afinidad con el militar
Lo que resta es determinar en cuánto se benefició Vladimir Padrino López de esta relación comercial ilegal que ejerció con el Estado venezolano.
FUENTE: PANCALIENTE.INFO