¡RECORDANDO AL MAESTRO DE AMÉRICA!
Enrique Prieto Silva
Sábado 14
de marzo de 2020
Siempre rememoramos el 14 de marzo la fecha del
nacimiento de Luis Beltrán Prieto Figueroa, nuestro insigne y nunca bien
ponderado ¡Maestro de América! Tal vez, el más insigne de los venezolanos que
nace en 1902, cuando comienza el virtuosismo del parecer democrático en nuestro
país y tal vez el comienzo del siglo que dio cabida a los mayores cambios
políticos surgidos después de las dos conflagraciones mundiales, las que a
nuestro entender, es lo mas signado de cambio político después de la
independencia lograda el siglo anterior.
Pudiéramos repetir el trillo
de los aconteceres que nos han traído a estos avatares de la anti política,
pero con el merecimiento de uno de los paladines de nuestro gentilicio educado,
libre y progresista, que hizo trayectoria con su vida, preferimos edulcorar la
sabia virgen de nuestros ancestros incólumes, liberándolos del daño pestilente
de la torpeza militarista que sobrevino en el inicio del actual siglo, a
sabiendas de que el destino de Venezuela siempre será de progreso económico y
social, tal como lo acuñara nuestro ponderado Maestro.
Muchas son las razones que
fundamentan esta apología, pero en rezago al mito del panegírico surgido del
parentesco, seguimos nuestro avatar en la lucha por la libertad de pensamiento
y culto, como es el sustrato del ideario del Maestro, de lo que no hay dudas.
Es de nuestro máximo interés
este recordatorio, para vislumbrar el ideario del Maestro, contra quienes
quisieron involucrarlo en esta locura gubernamental transformada en militarismo
iletrado, ya que conociendo su sentir, nunca podemos imaginárnoslo imbuido en
esta imbecilidad del “socialismo del siglo XXI”.
En una entrevista que tuvimos con él hace algún tiempo
en la entrada del restaurant en Playa Guacuco, a nuestra pregunta de ¿por qué
dicen que usted es antimilitarista?, su respuesta no deja dudas de nuestro
pensar: “Yo no soy antimilitarista como engendro; me opuse a los militares
luego que en 1948, fuimos traicionados por los mismos jefes militares que
gobernaron con nosotros. Ellos llamaron a Acción Democrática para que
participara en el golpe del 45’ y luego nos traicionaron. Desde ese momento
perdí la confianza en los militares, pero recuerda que el 6 de mayo de 1961, cuando por disposición
transitoria de la Constitución aprobada el 23 de enero, se incorporaba el
general en jefe Eleazar López Contreras al senado, dije más o menos lo
siguiente: ‘En esta Cámara usted tendrá el respeto y la consideración que se
merece por sus altas ejecutorias y porque a pesar de las ideas que nos han
colocado en causas diferentes, hemos colaborado en la estabilización de la
República y en la creación de un clima de concordia y de paz en este país, en
donde los rencores se ponen por encima de las transitorias peleas políticas
para construir una patria que siendo de todos nos pertenece a cada uno de
nosotros’. Ya puedes ver, que no soy antimilitarista sino tal vez resentido contra
la traición militar”.
Este recordatorio, para mantener nuestro pensar en ¡el
Maestro!, ese eslabón de oro amalgamado con acero de alto tenor, que en esta
fecha nació para la defensa de un verdadero sistema democrático; ese sistema
por el que tanto y siempre hemos luchado y queremos recuperar.
Sin dudas, el recuerdo de ese personaje, para quien
“…cada pueblo tiene además de su raíz humana, lo que está en la conciencia de
todos, transmitido por la herencia y por el medio, lo que inventaron para él,
mito y leyenda…su herencia cultural”; para quien el pueblo lucha enfrentado al
“...muro hecho de amor…”, donde “…la argamasa
es sangre pura del pueblo…” y, donde: “…sobre las almenas ondea la
esperanza…”.
Un personaje retrotraído de la historia, un mago de
las letras y del verbo, un pintor de libros que, como el mismo bautiza en su
obra poética: “Isla de Azul y Viento”, “…es un muro largo a la orilla del mar,
pintado con una brocha de pintar barcos que encontré abandonada en la playa…”.
“…es un muro vivo donde se quiebra el viento y se oyen las voces de un pueblo
amaneciéndose, que canta en los caminos, que llora y gime en las horas de
íntima congoja, pero que ostenta la firme voluntad de seguir adelante…”. Dirá
siempre: ¡Mañana será mejor¡
Es nuestra remembranza de ese maestro, de ese jurista,
de ese académico, de ese filósofo político, de ese poeta, de ese pariente, que
sin ambages viviera creyendo en la “Gente Emergente” y en el “Movimiento del
Pueblo”. Para quien “…ese pueblo comienza a ser cuando la historia es canto en
la voz de sus poetas y lección para el futuro en la voz del maestro”. Así nos recuerda,
que “…la Ilíada y la Odisea anunciaron a Grecia, como la
Eneida a Roma y los cantores de gesta, la Chanson de Rolan y el poema de Cid,
expresan a Francia y a la España inmemorial”.
En nuestro recuerdo, vemos al ebanista esculpír ideas,
alfabetos y normas, con los que quiso dar y dio al pueblo venezolano y al
universo, normas y directrices en la enseñanza, en el acontecer social y en el
comportamiento ciudadano. Por ello fue y es llamado ¡El Maestro de América!
Un hombre que se encontró a sí mismo. En su poema “El
Hombre Inacabado” se preguntó cual Sócrates escolástico: ¿Quién soy? ¿Qué soy?
Y el mismo se responde con su verso:
“En este mudar interminable
he sido tantas veces
y he dejado de ser.
Es el camino y sus recodos
el que modela el paso
aunque sea nuestro camino
y el pie señale la postura.
Seguiré siendo,
Siempre inconforme de lo que soy,
¿Cómo seré mañana?
Que mi YO me sorprenda
afirmando como quiero ser
y no como debo ser según los otros.
El hombre es un proyecto:
¡Subir, crecer hasta perfecto!
El anhelo infinito:
¡Ser es hacerse cada día!
Para exaltar nuestro parentesco y recordando a su
primo hermano, su hermano y mejor amigo, nuestro padre Enrique Prieto Albornoz,
concluimos con el que creemos es su más sublime poema: VIVE, dedicado al poeta
Ali Lameda:
El tiempo de vivir es infinito.
El tiempo de morir es de relámpago.
¡Vive!... Para morir te sobra tiempo.
Enrique Prieto Silva
IMAGEN SUPERIOR:
Luis Beltrán Prieto Figueroa (Sector El Copey, La Asunción
, Nueva Esparta
, Venezuela
, 14 de marzo
de 1902
-Caracas
, Venezuela, 23 de abril
de 1993
), fue un educador
, filósofo de la educación
, abogado
, político
, poeta
y crítico literario
venezolano
. Por cortesía de Wikipedia