POLITICA
BASES DEL LIBERALISMO 13
Por Nelson Maica C
1.
Nota 13. Seguimos. ¿Son mentirosos los políticos?
Veamos: ¿Cuánto deben mentir los
políticos? Sugerimos consultar el articulo de Pedro Schwartz publicado en Cinco Días el lunes, 27
de noviembre de 1995, p. 4.
2. A pesar de las consideraciones formuladas
anteriormente, no debemos engañarnos: son
muchas las restricciones de los políticos y en la mayor parte de las ocasiones
su margen de maniobra es muy escaso.
3. Es
más, las dificultades que en el día a día de la política se producen son tantas
que ha llegado a aceptarse con carácter general que una de las características típicas de los políticos sea su habilidad
para engañar y mentir al electorado.
4.
¿Es esto inevitable? ¿Cuáles son los
límites que, desde nuestro punto de vista, nunca debe traspasar un político
liberal? Los socialistas comunistas son, por doctrina, mentirosos. Ejemplos
vivientes y actuales.
5.
El reconocimiento de las limitaciones
y restricciones a las que se ve sometido el político liberal nunca debe hacerle
olvidar la ineludible necesidad de seguir la estrategia dual que hemos explicado
con anterioridad.
6.
El político liberal, por tanto, nunca
deberá perder la guía de referencia (que son los objetivos finales y sus
implicaciones teóricas y éticas esenciales) y, como mucho, podrá aceptarse que
adapte su comportamiento a las dificultades y escollos de cada momento.
7.
Así, podrá disculparse que, en
determinadas ocasiones, silencie algunas reformas que piense llevar a cabo
cuando las circunstancias lo permitan, e incluso que calle sobre ciertas
consecuencias e implicaciones de algunas de sus decisiones políticas.
8.
También se pueden aceptar algunos
comportamientos de calculada ambigüedad, sobre todo en épocas electorales, con
la finalidad de no plantear la discusión de algunos temas que, por su mayor
complejidad, puedan hacer muy espinosa su detallada explicación a la
ciudadanía, o dejen innecesariamente flancos abiertos a la demagogia fácil del
contrario.
9.
Finalmente, puede aceptarse que el
político liberal “sepa decir las
verdades” según convenga, e incluso que haga uso de una “sana demagogia”, como cuando se
defienden medidas siempre populares pero de gran contenido liberal como las
relativas, por ejemplo, a la disminución indiscriminada de los impuestos, o a
la reducción o eliminación del servicio militar obligatorio.
10. En todo caso, hay que evitar dejar el
monopolio del uso de la demagogia a los partidos intervencionistas socialistas
comunistas y, si bien hay que reconocer que es ciertamente más difícil para un
liberal el recurso a la demagogia, esto no significa que no existan importantes
prescripciones liberales cuyo contenido demagógico pueda, en ocasiones, ser
convenientemente explotado.
11. Pero lo que en ningún caso puede admitirse
desde el punto de vista liberal es alguno de los comportamientos siguientes: a) mentir deliberadamente en relación
con algún aspecto concreto de la actividad política diciendo a los ciudadanos
justo lo contrario de lo que se piensa llevar a cabo; como es sobradamente
conocido, esta táctica de mentira deliberada ha sido una y otra vez utilizada
por los políticos del partido socialista-comunista en el poder; b) aceptar modificaciones en el
programa que desdibujen del todo el ideario liberal; y c) lo más grave, tomar medidas que vayan en la dirección opuesta a
lo que se dice perseguir a largo plazo y que incluso traicionen los principios
éticos o teóricos esenciales del ideario liberal.
12. No
traspasando nunca los límites anteriores, puede aceptarse incluso una
estrategia de tipo “leninista”, este es, por ejemplo, el calificativo que S.
Butler y P. Germanis dan a la estrategia que proponen para las reformas
liberales en su artículo “Achieving Social Security Reform: A “Leninist”
Strategy”, The Cato fournal, vol. 3, n.” 2, otoño de 1983, pp. 547-556.
13. Sobre
la estrategia más adecuada para lograr el triunfo de la libertad debe leerse el
sugestivo trabajo de Murray N. Rothbard, “La estrategia de la libertad”, cap.
XXIX de La ética de la libertad, Unión Editorial, Madrid 1995, pp. 345-367)
dirigida a conseguir tantos apoyos como sean necesarios para sacar adelante
las reformas liberales y que, en función del ámbito y las circunstancias
concretas sobre los que se actúe, exigirá buscar aliados en unos u otros grupos
e instituciones sociales.
14. Además, como ya hemos visto, es preciso que
las reformas liberales se consoliden y se efectúen de tal manera que terminen
haciéndose irreversibles.
15. En suma, nuestra estrategia liberal debe estar
siempre dirigida a ganar apoyos y a debilitar e inhibir la posición
intervencionista, socialista comunista, totalitaria.
Seguiremos.
TIPS:
·
Prohibido olvidar. El socialismo comunismo No
volverá. Apuntes sobre el comunismo en Rusia: 1917. 25 de
noviembre. Elecciones para la asamblea constituyente. Resultados no favorables
para los bolcheviques. Acciones desencadenadas: prisión para los eseritas de
más peso político. 18 enero 1918: toma de la asamblea por Lenin, Stalin y
Bujarin y el 19, al día siguiente, el consejo de comisarios del pueblo la declaro
disuelta.
·
Gueorgui
Valentinovich Plejánov, nació en Rusia 1856 y murió en Finlandia 1918. Fundador
del marxismo ruso, dijo que la dictadura impuesta por los bolcheviques no era “la del pueblo trabajador, sino la de una
pandilla”.
·
Terror
de las masas y exterminio. El terror rojo: aniquilación de clases. Dictadura de
Lenin. Feliks Dzerzhinsky: comisión especial para exterminar los
contrarrevolucionarios y especuladores. Creación de la CHK – Vecheka, Cheká – Comité Militar Revolucionario de Petrogrado – Implantar el terror
del Estado para mantenerse en el poder – Nombres posteriores: GPU, OGPU, NKVD,
MUD, KGB.
·
Lenin sostenía desde 1908: fusilar a todos los
contrarios…”someter o exterminar a
determinadas clases sociales”. Apoderarse de todos los medios de comunicación.
Comisión de Investigación Militar para arrestar a los oficiales
contrarrevolucionarios. La burguesía debía ser aniquilada. Expulsión de los
mencheviques. Estrategia: provocar una
guerra civil para facilitar el exterminio de toda oposición. Se aseguran
de que la oposición no reciba ayuda exterior.
·
Posibles lecciones obtenidas:
A. Los socialistas-comunistas, que son una minoría, hacen uso de la
democracia para luego violentarla y hacerse con el gobierno.
B. Enseguida ponen en práctica el terror sobre la población, mediante dos
mecanismos favoritos: 1- ataque y eliminación prioritaria de la aristocracia,
oficiales, clero, propietarios, partidos políticos; 2- eliminación de los
distintos partidos de izquierda, todo el que se identifique como otros
socialismos, comunismos.
C. Aniquilar clases sociales enteras.
D. Creación de diversos aparatos represivos, de terror y criminales.
Procederían con cierta jerarquización: a- creación de nuevas categorías
penales; b- supresión de las garantías judiciales; c-confinamiento de rehenes y
sospechosos; d- creación de campos de concentración; e- ejecuciones masivas; f-
disponer de un inmenso aparato de propaganda (ocultar todas las atrocidades
cometidas y vilipendiar a quienes las señales, criminalización de la política).
·
Pensadores del siglo XX: JEAN-PAUL CHARLES AYMARD SARTRE: conocido comúnmente como Jean-Paul Sartre, filósofo,
dramaturgo, biógrafo, crítico literario, novelista y periodista político
francés, uno de los principales representantes del existencialismo y del marxismo
humanista. Sartre nació en París el 21 de junio de 1905; estudió en la Escuela
Normal Superior de esa ciudad, en la Universidad de Friburgo (Suiza) y en el
Instituto Francés de Berlín (Alemania). Enseñó filosofía en varios liceos desde
1929 hasta el comienzo de la II Guerra Mundial, momento en que se incorporó al
Ejército. Desde 1940 hasta 1941 fue prisionero de los alemanes; después de su
puesta en libertad, dio clases en Neuilly (Francia) y más tarde en París, y
participó en la Resistencia francesa. Sartre dejó la enseñanza en 1945 y fundó,
con Simone de Beauvoir entre otros, la revista política y literaria Les temps
modernes, de la que fue editor jefe. Se le consideró un socialista
independiente activo después de 1947, crítico tanto a la Unión de Repúblicas
Socialistas Soviéticas (URSS) como a Estados Unidos en los años de la Guerra
fría. En la mayoría de sus escritos de la década de 1950 están presentes
cuestiones políticas, incluidas sus denuncias sobre la actitud represora y
violenta del Ejército francés en Argelia. Rechazó el Premio Nobel de Literatura
que se le concedió en 1964, y explicó que si lo aceptaba comprometería su
integridad como escritor. Sartre
afirma que la influencia de la sociedad moderna sobre el individuo es tan
grande que produce la serialización, lo que él interpreta como pérdida de
identidad y que es equiparable a la enajenación marxista. El poder
individual y la libertad sólo pueden recobrarse a través de la acción
revolucionaria colectiva. A pesar de su llamamiento a la actividad política
desde ópticas marxistas, Sartre no se afilió al Partido Comunista Francés, y
así conservó la libertad para criticar abiertamente las intervenciones
militares soviéticas en Hungría (1956) y en Checoslovaquia (1968). Murió en
París el 15 de abril de 1980.
·
10. “Las instituciones democráticas
tienen por función mediar en las tensiones y mantener el equilibrio entre las
aspiraciones competidoras que son la diversidad y la uniformidad, tanto en lo
individual como en lo colectivo, con objeto de reforzar la cohesión y la
solidaridad sociales”. Declaración Universal sobre la
Democracia, CI, 161ª sesión, El Cairo, Egipto, Septiembre de 1997.
·
Los cristianos entierran a sus muertos. Que en paz descansen.
“Pero para que el que se defiende haga
también la guerra, debe asestar golpes, es decir dedicarse a la ofensiva. Así
la guerra defensiva comprende actos ofensivos que forman parte de una defensiva
de un orden más o menos elevado”, Carl
Von Clausewitz
Caracas,
Venezuela, 30/03/2013.-