11 A 2002; FUENTE DE ENERGÍA PARA LA RENOVACIÓN Y REACTIVACIÓN DE LA LUCHA FINAL
11 abril 2022
Estimados compatriotas, amigas y amigos. El 11 de abril del 2002, se produjo una gesta sin precedentes en la historia republicana de Venezuela.
Hoy se cumplen 20 años de dicha gesta, que fue la única oportunidad en la cual el soberano pudo desplazar al tirano traidor, por unas cuantas horas. Este suceso con toda su energía debe ser repetido cuantas veces sea necesario, hasta lograr el punto de inflexión que desencadene el desalojo del actual tirano traidor, y desemboque en la ejecución de las Elecciones en Libertad Plena. Tal como hemos exigido los venezolanos. Reitero que este régimen narco criminal, no soporta una protesta de tal envergadura.
Hoy por hoy, tenemos una nación desvirtuada, el territorio devastado, y entregado, la población despreciada y abandonada hasta los límites de una emigración forzada que la ha convertido en paria, buscando rehacer sus vidas en diferentes regiones del mundo.
En un mundo cuya coyuntura cambia sus prioridades, al margen de nuestro sufrimiento de dos décadas, para ser testigo y actor de otra "nueva" demostración de irrespeto y abuso inaceptables, ejercida por un mandatario totalitario como, Vladimir Putin, acusado de criminal de guerra y cuyos actos ya están siendo investigados por la CPI. Mientras eso ocurre, vemos como continúa avanzando en maldad y destrucción, porque según él, ese país es territorio perteneciente a Rusia, y vemos cómo los defensores de la libertad se esfuerzan para establecer los mecanismos de apoyo que implora el presidente Zelenski, para proteger al pueblo ucraniano.
Ante tal obscena agresión (que no es la primera), hemos percibido cuan lerdos e indecisos pueden ser los organismos encargados de establecer el orden y en reaccionar para impedir el uso indebido de la fuerza. Aun quedando bien claro que: Putin, de manera ilegal e ilegítima, usa la fuerza de las armas rusas para invadir y matar; mientras Zelenski, solicita al mundo apoyo de fuerza con armas, para de manera legal y legítima, proteger a los ciudadanos y recuperar su territorio.
Tanto la actitud patriótica de los ucranianos; como la extrema brutalidad de Putin; han dado una fuerte sacudida a los órganos del Mundo Libre (ONU - OTAN). Les ha ratificado que, históricamente, el NO reaccionar de manera inmediata, en defensa del agredido SÓLO favorece al agresor, el cual, contando con ello, sigue avanzando, porque así obtiene "mejores condiciones de negociación" al final; siendo común esa actitud, tanto en el caso de Ucrania como en cualquier otra parte del mundo. Sobre todo, hacia los estados que proclamen los valores de: libertad, soberanía y democracia, puesto que son considerados serias amenazas, para sus proyectos de poder totalitario, con pretensiones de imponer su versión de un nuevo orden mundial.
Ante esta coyuntura mundial, los venezolanos, debemos entender que; si ha sido difícil para los ucranianos lograr el apoyo, a pesar de la devastadora destrucción de la cual son víctimas; para nosotros será mucho más difícil, si no proyectamos al mundo que nuestra lucha y sufrimiento, continúan, que han pasado 20 años de una sistemática destrucción sin precedentes en américa latina. Debemos anunciar con hechos que ha sido un error el haber abandonado la lucha en las calles, lo cual ha sido interpretado por algunos países como signo de recuperación de la normalidad, y ha proyectado una imagen totalmente falsa sobre la terrible realidad que vive la nación.
Debemos entender, sostener y proyectar que la república bolivariana, forma parte de una "confederación de estructuras criminales transnacionales", del mundo totalitario. Debemos ser coherentes y constantes en continuar denunciando la seria amenaza hacia continente americano que representa el hecho de que, un jefe de esa confederación totalitaria como Putin, ejerza algún control en la región, con el apoyo del régimen criminal de Maduro, y de varios jefes de estados (10 según los votos en la ONU el 07 abril pasado), y que, esa amenaza vislumbra la posibilidad de incluir a Colombia, con un triunfo de Gustavo Petro. Consolidando así la instauración de varias "Bielorussias" en la región. ¿Si eso no es amenaza, pues entonces qué es?
A los venezolanos, en este momento de turbulencia mundial cuya duración ni resultados están claros, nos urge actuar, nos urge reactivar la lucha y contar con una nueva dirigencia que asuma tal responsabilidad, que tome el testigo de la gesta, del 11 de abril de 2002 y, con la consigna "prohibido olvidar", proyecte la lucha de los venezolanos al mundo y reorganice las fuerzas y formas de acción para lograr el desalojo del estado criminal.
La nueva dirigencia debe actuar con determinación absoluta. Debe: deslastrarse de los traidores; unirse para derrocar al régimen; entender que será fatal: seguir asignando la exclusividad de acción y esfuerzo a un probable evento electoral que podría producirse en el 2024, sin haber ejecutado y cumplido con las fases previas que garanticen las condiciones adecuadas para tal evento.
La nueva dirigencia debe navegar sobre las aguas turbulentas del momento y proyectar su solidaridad, pero simultáneamente ejercer presión en las calles. Debe recuperar la iniciativa, obedecer a nuestras prioridades, no podemos esperar el turno del destino, primero el COVID, ahora Ucrania, luego el nuevo orden mundial, más allá será el cambio climático y ¡Venezuela cuándo! Pues ahora es el momento de reaccionar con fuerza, mientras Putin y sus seguidores, al igual que nuestros aliados, estén ocupados en sus prioridades. Las proyecciones de duración de la guerra en Ucrania varían entre días, meses o años, no podemos ni debemos esperar sin actuar.
Debemos concebir, ya, el nacimiento de la Nueva Venezuela, con la asepsia institucional total garantizada por el cumplimiento de las consabidas fases de: Cese de la Usurpación, que genere el desalojo, sometimiento, captura y enjuiciamiento de los criminales; Gobierno de Transición, con los procesos de desarme y control de grupos violentos y reinstitucionalización de los órganos del estado; para entonces sí, pasar al evento final de las Elecciones en Libertad Plena, con las garantías que genera un estado de derecho y de justicia. En la medida en que se vayan cumpliendo las fases, se producirán los apoyos nacionales e internacionales, en todos los campos: judicial, económico y militar aliado. Apoyos que no me queda la menor duda se materializarán ante la actuación decidida del pueblo venezolano.
Para los que insisten en plantear como meta realizar Elecciones en Libertad Plena, en el 2024, pues bien, les digo que pongan su mayor empeño en apoyar a la nueva dirigencia en la realización de las fases previas, a partir de hoy, y durante el tiempo que nos queda hasta ese momento. De no ser así, no sólo no habrá garantía alguna de realizar tales elecciones, sino que, si se diera el caso, de nada servirá "ganarlas" para volver a "perder", por no contar con los órganos del poder, re-institucionalizados, que hagan cumplir el mandato constitucional y evitar el regreso de la pesadilla.
Pero en caso de cumplir las fases previas, no nos sorprendamos si logramos realizar las Elecciones en Libertad Plena, mucho antes.
El 11 abril del 2002 muchos países aceptaron la salida de Chávez, hoy por hoy, muchos más aplaudirán la salida de Maduro, y reconocerán el valor del pueblo venezolano. Dios quiera que para ese momento ya haya finalizado la guerra de Putin, pero de seguir en curso, ya Venezuela estará del lado correcto.
Daniel Comisso Urdaneta
Contralmirante
A.R.V.
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