EFE - Caracas - 18/06/2009
Las autoridades venezolanas han considerado que no podían dejar a ninguno de los suyos en alta mar. Por ello han anunciado este miércoles (madrugada hora española) el desembarco de 376 ciudadanos que se encontraban a bordo del crucero español Ocean Dream, aislado porque al menos tres de sus tripulantes padecen la nueva gripe.
El crucero ha llegado al puerto de El Guamache de la Isla Margarita a las 9.30 hora local. Tras ser rechazado por las autoridades de Granada y Barbados, dos islas caribeñas, ha obtenido el permiso en Venezuela. "Vamos a garantizar el ingreso de estos venezolanos al país", ha asegurado la viceministra de Salud Colectiva, Nancy Pérez. Entre los 1.159 pasajeros a bordo, 376 son del país sudamericano. Pérez ha señalado que, una vez en tierra, se les tomarán las muestras respectivas para conocer si tienen la nueva gripe.
La viceministra ha aclarado que si los viajeros no presentan síntomas serán enviados a sus casas. En caso contrario, deberán entrar en supervisión y permanecerán en cuarentena hasta que se confirmen si las muestras tomadas son positivas o no.
La empresa española Pullmantur, a la que pertenece el buque, ha asegurado este miércoles que hasta catorce tripulantes mostraban síntomas sospechosos y que tres de ellos padecen la nueva gripe. El brote se detectó hace tres días cuando el barco atracó en la isla de Curaçao. Ahí fue donde se tomaron las muestras y este miércoles llegaron los primeros resultados. La empresa ha asegurado que se han adoptado todas las medidas de seguridad y se han respetado todos los protocolos sanitarios para estos casos. También han querido señalar que no hay ningún miembro más de la tripulación ni del pasaje afectado gracias a su rápida reacción.
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