La VII Cumbre de la Alianza Bolivariana de las Américas (ALBA) aprobó hoy nuevos pasos para reforzar su modelo de "comercio justo y complementario'' y ratificó su lucha contra las "amenazas del imperio'', como se refiere el bloque a EE.UU.
Las decisiones fueron asumidas en el encuentro celebrado en la ciudad boliviana de Cochabamba, al que asistieron los gobernantes de Venezuela, Hugo Chávez; Ecuador, Rafael Correa; Nicaragua, Daniel Ortega, y el vicepresidente de Cuba, José Ramón Machado Ventura.
También participaron Patricia Rodas, canciller del depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, y los primeros ministros de San Vicente y Granadinas, Ralph Gonsalves; Dominica, Roosevelt Skerrit; y Antigua y Barbuda, Baldwin Spencer.
El tratado del Sistema Unificado de Compensaciones Regionales (Sucre) fue la medida económica más importante aprobada en la cita presidencial.
Su objetivo es que los países de la ALBA tengan "soberanía monetaria y financiera'' y apunten "a la eliminación de la dependencia del dólar estadounidense en el comercio regional''.
Se trata de un primer paso, según explicaron fuentes oficiales, hacia la creación futura de una moneda común que Morales propone que se llame Pacha, que significa ‘‘tierra'' en quechua.
También acordaron los principios para que los nueve países de la ALBA desarrollen el ‘‘Tratado de Comercio de los Pueblos (TCP), iniciativa que reivindica un comercio ‘‘justo'', "complementario'' y "solidario'' para que los países del bloque puedan superar sus asimetrías.
La ALBA creará además la empresa comercializadora de exportaciones e importaciones ALBAEXIM, como mecanismo de complementariedad comercial y que abrirá tiendas en los distintos países para sus productos.
En el ámbito político, sintetizó Chávez al final de la reunión, el bloque avanza en el "exorcismo de la doctrina imperial'' de estas tierras para "recuperar la doctrina libertaria de Bolívar''.
En esta área, la principal resolución es que la ALBA plantea nuevas sanciones comerciales y migratorias contra el Gobierno de Roberto Micheletti en Honduras, donde el bloque exige la incondicional restitución del depuesto presidente Manuel Zelaya.
Además, el grupo regional pidió al Gobierno de Colombia en su declaración final ‘‘reconsiderar la instalación'' de bases militares de Estados Unidos y reclamó que el territorio ocupado por el país norteamericano en Guantánamo sea devuelto a Cuba.
La ALBA ratificó su pedido de que el bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba termine "de manera incondicional, unilateral e inmediata''.
La Declaración de la VII Cumbre plantea la conformación de un "Comité Permanente de Soberanía y Defensa de la Alianza Bolivariana para Los Pueblos de Nuestra América ALBA-TCP'', salvo para las islas, que son parte de un "Sistema de Seguridad Regional que está integrado por los países del Caribe Oriental''.
Ese comité tiene como objetivos principales la definición de una "Estrategia de Defensa Integral Popular Conjunta y la constitución de una Escuela de Dignidad y Soberanía de las Fuerzas Armadas de los países del ALBA-TCP''.
En la declaración, los países del grupo acusan al "imperialismo y las fuerzas derechistas'' de la región de haber reaccionado "con el golpe de Estado en Honduras y la instalación de bases militares en Colombia'' frente al "avance y crecimiento de las fuerzas e ideas progresistas en América Latina y el Caribe''.
Durante la reunión, Chávez insistió en que se cree una "alianza militar defensiva'' frente a las "amenazas del imperio''.
''Por qué no, quién nos puede prohibir a países soberanos hacer una alianza militar defensiva y cruzar soldados y oficiales y entrenamiento y equipamiento y logística'', se preguntó Chávez.
En el área de medio ambiente, los bolivarianos determinaron que en diciembre próximo llevarán una posición conjunta en la cumbre sobre el cambio climático de Copenhague.
La ALBA acordó como novedad estudiar la creación de un Tribunal Internacional de Justicia Climática para que "los países desarrollados paguen su deuda climática y cumplan efectivamente la reducción de sus emisiones domesticas de gases de efecto invernadero''.
El bloque impulsará en el marco de Naciones Unidas una Declaración Universal de Derechos de la Madre Tierra para buscar su preservación frente al "derroche del sistema capitalista''.
Morales propuso hoy a sus colegas que, después de su próxima cumbre prevista para el 13 y 14 de diciembre en Cuba por el quinto aniversario del bloque, todos puedan viajar juntos a Dinamarca para asistir a la reunión sobre el cambio climático.