GD. Oswaldo Sujú Raffo.
Si hemos acordado participar en elecciones nacionales, el próximo 26 de Septiembre, es porque pensamos que existe posibilidad cierta de ganar la mayoría parlamentaria, tan necesaria para enrumbar este barco a la deriva...
Con todos los riesgos existentes, con triquiñuelas, abuso de poder, cartas en la manga y cualquier otra amenaza que puedan mostrar en su desesperación el régimen rojito, los venezolanos amantes de la libertad y de la democracia estamos en tiempo de decisión. Por esta razón es inaceptable que individualidades y grupos políticos, poniendo por delante sus intereses personales antes que el interés nacional, le quiten al pueblo venezolano esta gran oportunidad de poner las cosas en orden y evitar llegar al precipicio, pues ya estamos al borde de ello...
Los venezolanos queremos gente idónea, culta, nacionalista, valiente y de carácter democrático granítico, para asumir las responsabilidades de legislar, en una Asamblea Nacional para la sociedad venezolana, para este pueblo y no para complacer los caprichos de un ególatra y mitómano presidente. Si hubiese existido hace una década un Parlamento que velara y defendiera los intereses del colectivo nacional, hoy no estuviéramos sufriendo las carestía de toda índole que enfrentamos. Por este motivo es imperdonable que la ambición o “piquiña” por un curul, pueda dar al traste con la unidad de criterios y de organización, en estas venideras elecciones parlamentarias.
Insisto que no solo es votar, es necesario estar presente en los escrutinios, asegurar la copia del Acta, informar a tiempo y quedarse para defender los votos de la rapiña u otra mala trastada... Debemos tomar en cuenta que al CNE le gusta cantar como los “gallos a medianoche” y le importa un pito hacer el ridículo internacional con demoras inusitadas, cuando se jacta de poseer el sistema mas moderno y automatizado del mundo. Debería imitar al Consejo Electoral de Chile, que realizó unos comicios presidenciales y votando a mano, en dos horas dió los resultados. El régimen desesperado para recuperar la voluntad y votos, de los que ya no son tan pendejos, está en campaña desde hace tiempo. Promesas de todo y para todos, no hay espacio en los medios para tanta propaganda del régimen y la pregunta más inocente es: ¿Si no lo hicieron en once años y con mas de 950.000 millones de dólares, lo quieren hacer ahora ? “Ni que el pecho fuera de hierro y los lomos de algarrobo...” como decía Don Goyo...
Es menester, la Patria lo reclama, los mejores hombres y las mejores mujeres, con suficiente inteligencia y preparación-así con criadillas y ovarios- para una Asamblea que legisle y vele por los intereses de la nación venezolana. Ya basta de permitir tantas violaciones a nuestra Constitución, tanta entrega de soberanía nacional y tanta regaladera de nuestros recursos a vividores y chulos. Que el régimen explique al pueblo cuales son los beneficios que recibe, por ese desangre de nuestro petróleo para Petrocaribe. De igual forma que justifique, que vaina es esa de permitir, la traidora invasión cubana en casi todas las instituciones del Estado. Y de esa abyecta y colosal corrupción que parece no tener fin y se refleja en la inseguridad que “como río por conuco” atraviesa campos, pueblos y ciudades.
Compatriotas es tiempo de decisión, es el último tren o chance electoral para salir de este atolladero nacional, en donde nos ha llevado la incapacidad, la negligencia, la corrupción y el populismo exacerbado. Que prive el sentimiento nacional y el interés de todos los venezolanos que hoy nos cobijamos, bajo el sublime tricolor nacional de las siete estrellas de la libertad. Recuerden que Venezuela es tuya, mía y nuestra. La Patria es primero. Fuera los invasores cubiches, vividores y magapas. ¡Hasta luego Columnista Oswaldo Suju: La Historia Paralela