SACO DE GOLES
Jesús Elorza
A su regreso de la gira a Brasil, el Comandante Presidente cómodamente sentado en su avión “Guacharaca 1” revisaba los acuerdos firmados para preparar su discurso en donde informaría al pueblo de los “beneficios” que obtendría la nación y como siempre ocultaría la suma de recursos económicos que pasarían a manos de los empresarios cariocas. De repente, como tocado por un rayo, se acordó del juego de futbol entre Venezuela y España.
De inmediato, ordenó a uno de sus edecanes que sintonizara VTV o TVES para ver el partido. Mi comandante, respondió el guardia, la señal de esos canales no llega a la aeronave, todavía el satélite chino no ha logrado acoplar las frecuencias. Bueno chico, entonces pon ahí a ESPN, FOX o DIRECTV que a pesar de ser canales oligarcas e imperialistas la señal y la trasmisión son del carajo. Así se hizo y la imagen de alta definición ocupo el plasma de 60 pulgadas que tanto le gusta cuando viaja en su aeroplano.
El presidente, aprovecho los cortes comerciales para recordar que cuando el ministro del deporte lo notifico del referido encuentro, no dudo en pensar que la hora de la venganza contra el colonialismo español había llegado. Desde la Batalla de Carabobo no había existido una oportunidad como esta para humillar nuevamente al insolente invasor. Ahora el Rey, va a tener que tragarse sus palabras en mi contra.
Poseído por el espíritu de Bolívar lanzo a los aires de la Patria su particular y pintoresco Decreto de Guerra a Muerte:
“Españoles y Canarios Temblad, os vamos a meter un saco de goles”
En su delirio aeronáutico, fue despertado por el grito independentista de la tripulación y los acompañantes: ¡GGGGOOOOLLLL de España! Animo compatriotas, atino a decir el Presidente. No se desesperen, vamos a reagrupar nuestras fuerzas para buscar el empate y luego ganar por amplio margen. Pero, antes de terminar su patriótica arenga, otro grito de gol se escucho en todo el avión y antes de finalizar el primer tiempo un tercer gol de España sello definitivamente el marcador.
Ante la superioridad de la Furia Española, le ordeno al Capitán de la nave, que cambiara el plan de vuelo y se dirigiera a Cuba. Fidel, es el único que me comprende y apoya en mi lucha contra el imperialismo- colonialista de los españoles. Además, ordeno que llamaran al ministro del deporte y al gobernador de Anzoátegui para que se encarguen de manipular la información del resultado final del juego. Jugamos mejor que los gringos que perdieron por cuatro goles.
Que mis milicias sepan, que si no es por la lesión de mi rodilla, yo estaría jugando con la selección y el resultado hubiese sido otro.
Los guardias pretorianos que se encontraban en el avión, comentaban entre si que el Comandante era un visionario único y extraordinario, pronostico un saco de goles y al final esto se cumplió….pero, en contra nuestra. Todos estallaron en risa.
Mientras tanto, en el estadio de Puerto la Cruz, miles de fanáticos parafraseando a Quico, uno de los personajes de la serie de televisión El Chavo, gritaban a todo pulmón….Cállate, cállate que nos desesperas y nos empavas.
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