Crisis militar
Fernando
Ochoa Antich
Un porcentaje muy importante de
venezolanos piensa que la gran mayoría de los miembros de la Fuerza Armada
Nacional están totalmente de acuerdo con la orientación ideológica de la
Revolución Bolivariana. En verdad, no es así. La razón es muy sencilla. Nuestra
sociedad, desde hace muchos años, se encuentra totalmente polarizada en dos
grandes sectores. Ese ha sido el más estruendoso fracaso de la Revolución
chavista. No lograr imponer una verdadera hegemonía política. Esta realidad
social, como es natural, también se expresa dentro de los cuarteles. En algunas
oportunidades habrá una relativa mayoría favorable a la acción del gobierno, en
otras circunstancias surgirá un importante rechazo. Hugo Chávez, siempre tuvo
un objetivo: romper a través de la ideologización el espíritu de cuerpo que
siempre ha caracterizado a nuestra Institución. Estoy seguro que no lo logró.
La mejor demostración de lo que afirmo
es el contenido de un interesante artículo escrito por el periodista José
Ignacio Mayorca, titulado: ¿Qué pasa en los cuarteles? Allí resume, demostrando
tener una importante información de primera mano, un conjunto de hechos que
tienen que estar afectando gravemente la disciplina y la cohesión interna de la
Fuerza Armada. La remoción de los comandantes de la Aviación y del Comando
Regional No 5, mayores generales Giuseppe Yoffreda Yorio y Manuel
Salvador Quevedo, en el mes de mayo, es una decisión que por
lo menos llama la atención. La remoción, lo confirman los rumores, tuvo su origen en un creciente descontento,
tanto en la Aviación como en la Guardia
Nacional, por el comportamiento poco profesional de estos dos generales. El malestar
en las dos Fuerzas parece haber
alcanzado niveles realmente preocupantes.
En el caso de la Aviación, se llegó a
tal deterioro en su capacidad operativa, que los generales Carlos Millán, José
Machillanda y Oswaldo Hernández, en cumplimiento de su deber, se decidieron a
informar a sus superiores, después de escuchar las novedades de un importante
grupo de oficiales. De manera sorprendente, en lugar de discutir con ellos lo que estaba ocurriendo, se decidió abrirles
un juico e iniciar numerosos Consejos de Investigación en contra de los
oficiales que habían manifestado su opinión. “Este estado de ánimo se ha venido
expresando en los graffitis que
constantemente aparecen en los baños de los institutos militares y cuarteles,
así como en las distintas intervenciones
que hubo en la reunión celebrada en el auditorio de la Academia Militar en
abril para convencer a los integrantes de la Fuerza Armada de que hay “un golpe
de Estado continuado” contra el heredero de Chávez”.
El creciente
descontento militar no es un problema particular de la Aviación, sino que se ha
generalizado en todas las Fuerzas. Las razones están a la vista: Nicolás Maduro
enfrenta una compleja situación política, económica y social, que se expresa en
la percepción negativa (70%) que tienen los ciudadanos de su gestión de
gobierno. Esa es una de las causas del malestar militar. En una situación como
la actual es muy difícil ejercer el mando. Se requieren particulares
condiciones de ecuanimidad y equilibrio
personal. Yo espero que el nuevo comandante de la Aviación, el general Eutimio
Criollo, sea capaz de defender como corresponde a
sus subalternos. Es inaceptable que se someta a la Aviación a una purga de
excelentes oficiales sólo por decir la verdad. El general Fabio Zabarse presenta una brillante hoja de
servicio. Ojalá, que en su desempeño como comandante del CORE 5, respete plenamente
los derechos humanos.
Nuestra Institución va a enfrentar una
difícil situación histórica. Durante esta semana han corrido muy delicados
rumores. Se habla de que en el Parlamento se va aprobar una Ley sobre Educación
Militar. Parece ser que el real objetivo de la ley es autorizar a miembros de
la Milicia Bolivariana, que sin haber recibido ninguna preparación militar en
Venezuela, puedan ir a formarse en otros países. No se requiere ser muy
perspicaz para entender que serán enviados a formarse en Cuba. Si esto es
verdad, es de suma gravedad. Lo que se busca es crear un cuerpo que, sin
mayores vinculaciones con nuestros valores militares tradicionales, puedan en
un momento determinado enfrentar militarmente a la Fuerza Armada Nacional. La
historia hay que recordarla. La SS fue creada por Adolfo Hitler para controlar
y dividir a la Fuerza Armada Alemana. La
utilizó en contra del golpe de Estado de
1944.
La decisión de la Juez de la Causa en
contra de Leopoldo López es una injusticia, que no tiene justificación alguna. La
historia recordará este hecho como un acto de arbitrariedad de un régimen
totalitario e ilegítimo. Me solidarizo plenamente con mi amigo Leopoldo López Gil y toda su familia.
Caracas, 8 de junio de 2014.
IMAGEN: Cortesía de El Nuevo Herald