Verdaderamente tu exageras
Enrique Meléndez
Todavía no se le ha oído decir a Nicolás Maduro, que este año sí le va a meter la mano a la economía; aun cuando habló de una recuperación del aparato productivo, sin precedentes en la historia del país; sin dejar por supuesto de referirse al peso de las sanciones; que han estrangulado, a su juicio, nuestra economía. Las madres francesas, cuando un muchacho está demasiado fastidioso, les dicen: "vraiment t´exageres" (verdaderamente tú exageras). Es posible que se haya registrado un salto estadístico en la economía, gracias al acercamiento, que ha tenido el gobierno con el sector privado; sobre todo, por iniciativa de Delcy Eloina, que se le ha visto en todos los eventos, que han hecho los principales gremios empresariales, consecuencia de lo cual se han concedido algunas garantías económicas y jurídicas, que han permitido un cierto repunte, y que es donde Maduro exagera los términos; aparte de las remesas de dólares, que están llegando del exterior; sólo que el año que acaba de finalizar ha sido uno de los más deprimidos desde el punto de vista económico; signado, especialmente, por una caída vertiginosa del consumo, a propósito de los niveles hiperinflacionarios, que vivimos. Obsérvese que el que hizo hallacas, apenas fueron contados; pues el costo de elaboración de cada una de ellas escapaba al poder de compra del venezolano de hoy con un salario mínimo de 3 dólares. Fue otra época, cuando la mesa navideña del venezolano era superabundante: hallacas, pernil, pan de jamón, ensalada de gallina, dulce de lechosa, torta negra, ponche crema. Todo eso brilló por su ausencia en la mayor parte de las casas; excepto en aquéllas donde los ingresos superan los 500 dólares, que sería el costo de la canasta alimentaria.
A los beneficiarios de las bolsas CLAP les prometieron, que les iban a vender unos perniles a precios módicos; asimismo, brillaron por su ausencia, y lo que se alegó fue que el dinero, que se tenía previsto para su compra, tuvo que ser utilizado, para pagar a los abogados de la defensa de Alex Saab, el héroe del momento. Ironías, con las que sale esta gente, y esto lo digo, para que se vea que estamos frente a un gobierno que no tiene plata; que se le acabaron los recursos, para seguir sosteniendo el petropopulismo; que ni los chinos ni nadie les quieren dar más financiamiento, y no le queda más camino que negociar con la oposición. He allí una de las figuras, que más ponderó en sus palabras Maduro, a propósito de la entrevista, que le hizo el periodista franco-hispánico Ignacio Ramonet: el recién nombrado Alex Saab. Marx hablaba de la fe del carbonero, que fue lo que hizo ver Maduro, que se trataba de la fe de Saab, con respecto al pueblo de Venezuela, por el que se esmeró para conseguirle alimentos y medicinas; burlando así las sanciones estranguladoras, que le ha impuesto el imperialismo yanqui; lo que lo convirtió en el enemigo número uno de ese imperio, y por esa razón se desata una persecución en contra de su persona; que se trataba de un empresario colombiano, que se había establecido en Venezuela, y al darse cuenta, de que era un sujeto hábil, para evadir las sanciones internacionales, y conseguir alimentos para el pueblo de Venezuela, lo comisionó para tal fin.
Allí en esa entrevista no hubo repreguntas, de esas que hacen batirse a Maduro, y levantarse de la silla, como lo ha hecho con algunos de mis colegas, cuando se ha sentido incomodado; porque, por lo demás, el entrevistador se trata de uno de los grandes tarifados internacionales del régimen, a quien traen en ciertas ocasiones, en momentos en que Maduro necesita masajearse el ego: ¿50 mil euros de recompensa? He allí la cuota, que les cobra un José Luis Rodríguez Zapatero. Tipejos que pertenecen a una izquierda europea, que cada día se hace más retrógrada en sus respectivos países, y que se pliegan a cualquier sátrapa, estilo Fidel Castro, por el sólo hecho de declararse enemigo de los EEUU.
Aun cuando lo que más llamó la atención de la entrevista de marras, fue el momento en que se abordó el tema de su posible candidatura para las elecciones de 2024, y en donde hizo ver que tan segura su fórmula no está, aun cuando Jorge Rodríguez le ha asegurado a sus amigos en conversaciones privadas, que el candidato indiscutible del PSUV será Maduro, y entonces dijo éste que sólo Dios sabe quién lo será, y no, por lo demás, Diosdado. ¿Acaso Diosdado tiene intenciones de enfrentar ese fenómeno electoral, en el que se ha convertido María Corina Machado? Por cierto, que ha llamado la atención la ausencia de este señor en los últimos actos oficiales, en especial, al del recibimiento, que se le propició a Alex Saab en Miraflores, una vez llegado a Venezuela. Como suele decirle Cabello a los opositores: "no te vistas, que no vas". ¿El que va es Nicolás o Delcy Eloina, en su defecto? No hay que pasar por alto que esta gente dice una cosa hoy y dispone de otra mañana. El hecho cierto es que Maduro resultaría mejor candidato, que Cabello; que no es sino un operador político, como lo fue en sus buenos tiempos en AD su paisano y padrino Luis Alfaro Ucero, sólo que tan presumido el uno como el otro, como para ambicionar tal propósito. El hecho cierto es que Maduro está demasiado mal en las encuestas; con niveles de rechazo de más de 80% y, según ha trascendido, en los últimos sondeos, que se han hecho, la señora Machado está por encima de él en un 60%; que es lo que, al parecer, ha llevado a que se plantee en el seno del PSUV la posibilidad, de una renovación de su liderazgo, y para lo cual se barajan algunos nombres, y entre los cuales se ha planteado el de Delcy Eloina que, por su condición de mujer, sería una figura interesante, para enfrentarla a la señora Machado; tomando en cuenta, por lo demás, que hasta ahora le ha servido de caballo de batalla a Maduro, tanto en el campo internacional, como en el nacional, y donde entra su vinculación con el sector privado empresarial, así como suena Rafael La Cava y Héctor Rodríguez.
De: Enrique Melendez O. melendezo.enrique@yahoo.com
Date: dom, 7 ene 2024 a la(s) 9:01 a.m.