Referirse a La Salida Militar se asocia con una posibilidad de actuar en contra del gobierno del Comandante Hugo Chávez Frías quien con sentido prepotente de “iluminado” deteriora el funcionamiento de la Institución Militar y la orienta al fracaso por la “ausencia de líderes” que se enfrenten a los deseos militaristas del Presidente Autócrata y salven a la Fuerza Armada Nacional de la peor hecatombe.
Particularmente he expresado y declaro que soy una persona con formación militar pero no “militarista” he dicho y afirmo nuevamente que el error en que incurrieron algunos votantes al elegir a Chávez fue por el deseo de ver “orden en el país” situación que el propio Comandante en Jefe confundió y creyó que se necesitaba “orden militar” cuando eso es la última acción que se pueda aplicar contra un pueblo noble que requería y requiere: Disciplina, Patriotismo, Honestidad y confianza en sus Instituciones.
Al analizar la peligrosa presencia militar hasta en el “pabellón con barandas” no me queda alternativa que fijar posición ante el militarismo y de allí que exprese que la República Bolivariana de Venezuela necesita urgentemente ejecutar acciones tendentes a Una Salida Militar, la cual no es otra que fomentar acuerdos, consolidar un frente opositor que constituya como “freno ante la ocupación militarista” materializada en una vuelta a los cuarteles, que devuelva la confianza en toda su extensión a la sociedad civil, profesionales y técnicos, especialistas, magíster, doctores, phd, etc. que se han preparado en sus diferentes ramas y se ven desplazados, para lo cual se necesita operativizar en el país los siguientes objetivos:
1. Sacar a la FAN del debate político
De esa manera recuperaríamos la paz institucional y se erradicaría la tendencia política que orienta a “partidizar las tropas” lo cual constituye una bomba de tiempo que al estallar no podríamos predecir sus incalculables daños. Debemos también luchar para mantener el carácter apolítico y no deliberante de la FAN preservando su orientación fundamental en que las mismas le pertenecen al Estado y no están al servicio de un Gobierno en particular o Gobernante alguno.
2. Suspender el voto militar
Con ello erradicaríamos la politización y partidización actual de la FAN materializada por la derogación del Art. 330 de la Constitución Bolivariana y eliminaríamos totalmente el nuevo acontecer de los procesos electorales: Los militares custodian el material electoral, además prestan seguridad al proceso, vigilan los centros, las mesas, trasladan las actas de escrutinios, permanecen en juntas municipales, distritales y regionales, están en el CNE, dirigen totalmente el Plan República, prestan apoyo a las maquinas electorales de la cuestionada empresa INDRA, ejercen el sufragio y para colmo les tocó decidir por dos (2) candidatos presidenciales Tenientes Coroneles retirados del Ejercito. ¿Le parece a Ud. que hubo imparcialidad? De allí que la solución se orientaría en anular el artículo mencionado hasta que la sociedad esté totalmente preparada para que el sector militar vote.
3. Retornar a los militares a sus cuarteles de:
3.1. Los Servicios de Tránsito Aéreo
Cuando se “militarizaron” estas Dependencias en tiempos de la IV República se orientaron acciones para desarrollar un Instituto Autónomo de Aeronáutica Civil que nunca se creó. Se diseñaron organismos mixtos (civiles y militares) que nunca se consolidaron y actualmente se vive en el sector una anarquía, una desorganización, un descontento, una rivalidad, una supervisión mediática y una situación extremadamente peligrosa que coloca en “alto riesgo” la operación de la Aviación General y Comercial Venezolana.
Debe buscársele la solución inmediata y castigar a tantos bandidos que investidos con el honorable uniforme azul pizarra de nuestra gloriosa y querida Fuerza Aérea venezolana, se pasean por el cargo de Director General Sectorial de Transporte Aéreo del Ministerio de Infraestructura y han resultado severamente cuestionados por incapaces, fracasados y ladrones a quien no les dolió ni le duele el país, ni los acuerdos que se ejecutaron para militarizar el sector en el desaparecido MTC porque el carácter de Seguridad y Defensa que se le dio a la “Operación Canguro” no convenció ni convence a nadie, ni demostró a nadie su eficiencia. Se observa pura ineficiencia e incapacidad y los militares cuestionados por malversación de fondos que rayan en peculado señalados en el expediente 8346 instruido en la Fiscalía 23 del Distrito Capital en denuncia que impulsa el Dr. Elio García París y que conoce desde el Presidente Hugo Chávez hasta el último funcionario militar y civil pero que al final no pasa nada y la vida de mucha gente que usa el medio Aéreo peligra mientras no se definan las funciones militares en los Servicios de Tránsito Aéreo a la par de la mejor conveniencia para el país que a mi manera de ver las cosas, los militares deben retornar progresivamente a sus cuarteles. Veámonos en este ejemplo antes que ocurra una tragedia que lamentar.
3.2. Del plan Bolívar 2001
Se hace necesario que los programas sociales de mantenimiento de atención especializada a la población retornen a los entes idóneos para ejecutar esas acciones las cuales son: Las Alcaldías y las Gobernaciones.
3.3. Demás dependencias de la Administración Pública
Especial mención merece el retorno a los cuarteles de los militares que cumplen funciones en la Administración Pública Nacional en los Ministerios de Sanidad, Educación e Institutos Autónomos entre otros.
3.4. Industrias Básicas y PDVSA
La formación Militar e intelectual de los profesionales de la FAN no los capacita para dirigir las Industrias Básicas y PDVSA de allí que se plantee el retorno de los militares a su sitio de origen por que las tareas que ejecuta no son acordes con su profesión principal. Deberíamos solicitar al Presidente una respuesta con relación a la existencia de algún militar activo que ostente el titulo de: Ingeniero petrolero o rama afín. ¿Verdad que es difícil?
3.5. Cancillería y Servicio Exterior
Hay que devolver al país su capacidad para ejecutar procedimientos de servicio exterior ya que con la “invasión de militares,” la diplomacia, las relaciones internacionales, la negociación, la socio política y las practicas consulares aprendidas por nuestros honorables funcionarios de carrera del Ministerio de Relaciones Exteriores en su Licenciaturas, Especializaciones y Maestría cursadas en el Instituto de Altos Estudios Diplomáticos Pedro Gual por mencionar alguno, el Gobierno los echo a la papelera, con el debido respeto de esos ilustres venezolanos. Me pregunto y le pregunto a la Sociedad Civil:
¿Cómo se sentirá un funcionario de la Cancillería que después de lograr una brillante carrera diplomática sea sustituido por un militar incapaz para cumplir con esas funciones? En torno a esto se plantea que el Gobierno debe revisar esa situación ya que su flamante Ministro de Exteriores quien se declaró “incapaz” en el MIJ Cnel. Luis Alfonso Dávila García, no vislumbra que estamos quedando muy mal en el servicio exterior y que el daño se le hace a Venezuela.
4. Elegir verdaderamente a las autoridades
Con la “ola militarista chavista” todo aquel militar retirado con curriculum ó no, se sintió representante del pueblo soberano y confundieron a los electores, de allí que alerto de cuidarse en no seleccionar nuevamente a aquellos que por su “reprochable conducta” fueron expulsados por borrachos, homosexuales, ladrones, traficantes, asaltantes, contrabandistas y ahora dirigen nuestros destinos como Concejales, Alcaldes, Gobernadores y acólitos miembros del Alto Gobierno. Por ello se hace necesario que cada cual los detecte e identifique porque vale la pena estar prevenido.
Como conclusión expreso que “La Salida Militar” para el país se circunscribe en:
Particularmente he expresado y declaro que soy una persona con formación militar pero no “militarista” he dicho y afirmo nuevamente que el error en que incurrieron algunos votantes al elegir a Chávez fue por el deseo de ver “orden en el país” situación que el propio Comandante en Jefe confundió y creyó que se necesitaba “orden militar” cuando eso es la última acción que se pueda aplicar contra un pueblo noble que requería y requiere: Disciplina, Patriotismo, Honestidad y confianza en sus Instituciones.
Al analizar la peligrosa presencia militar hasta en el “pabellón con barandas” no me queda alternativa que fijar posición ante el militarismo y de allí que exprese que la República Bolivariana de Venezuela necesita urgentemente ejecutar acciones tendentes a Una Salida Militar, la cual no es otra que fomentar acuerdos, consolidar un frente opositor que constituya como “freno ante la ocupación militarista” materializada en una vuelta a los cuarteles, que devuelva la confianza en toda su extensión a la sociedad civil, profesionales y técnicos, especialistas, magíster, doctores, phd, etc. que se han preparado en sus diferentes ramas y se ven desplazados, para lo cual se necesita operativizar en el país los siguientes objetivos:
1. Sacar a la FAN del debate político
De esa manera recuperaríamos la paz institucional y se erradicaría la tendencia política que orienta a “partidizar las tropas” lo cual constituye una bomba de tiempo que al estallar no podríamos predecir sus incalculables daños. Debemos también luchar para mantener el carácter apolítico y no deliberante de la FAN preservando su orientación fundamental en que las mismas le pertenecen al Estado y no están al servicio de un Gobierno en particular o Gobernante alguno.
2. Suspender el voto militar
Con ello erradicaríamos la politización y partidización actual de la FAN materializada por la derogación del Art. 330 de la Constitución Bolivariana y eliminaríamos totalmente el nuevo acontecer de los procesos electorales: Los militares custodian el material electoral, además prestan seguridad al proceso, vigilan los centros, las mesas, trasladan las actas de escrutinios, permanecen en juntas municipales, distritales y regionales, están en el CNE, dirigen totalmente el Plan República, prestan apoyo a las maquinas electorales de la cuestionada empresa INDRA, ejercen el sufragio y para colmo les tocó decidir por dos (2) candidatos presidenciales Tenientes Coroneles retirados del Ejercito. ¿Le parece a Ud. que hubo imparcialidad? De allí que la solución se orientaría en anular el artículo mencionado hasta que la sociedad esté totalmente preparada para que el sector militar vote.
3. Retornar a los militares a sus cuarteles de:
3.1. Los Servicios de Tránsito Aéreo
Cuando se “militarizaron” estas Dependencias en tiempos de la IV República se orientaron acciones para desarrollar un Instituto Autónomo de Aeronáutica Civil que nunca se creó. Se diseñaron organismos mixtos (civiles y militares) que nunca se consolidaron y actualmente se vive en el sector una anarquía, una desorganización, un descontento, una rivalidad, una supervisión mediática y una situación extremadamente peligrosa que coloca en “alto riesgo” la operación de la Aviación General y Comercial Venezolana.
Debe buscársele la solución inmediata y castigar a tantos bandidos que investidos con el honorable uniforme azul pizarra de nuestra gloriosa y querida Fuerza Aérea venezolana, se pasean por el cargo de Director General Sectorial de Transporte Aéreo del Ministerio de Infraestructura y han resultado severamente cuestionados por incapaces, fracasados y ladrones a quien no les dolió ni le duele el país, ni los acuerdos que se ejecutaron para militarizar el sector en el desaparecido MTC porque el carácter de Seguridad y Defensa que se le dio a la “Operación Canguro” no convenció ni convence a nadie, ni demostró a nadie su eficiencia. Se observa pura ineficiencia e incapacidad y los militares cuestionados por malversación de fondos que rayan en peculado señalados en el expediente 8346 instruido en la Fiscalía 23 del Distrito Capital en denuncia que impulsa el Dr. Elio García París y que conoce desde el Presidente Hugo Chávez hasta el último funcionario militar y civil pero que al final no pasa nada y la vida de mucha gente que usa el medio Aéreo peligra mientras no se definan las funciones militares en los Servicios de Tránsito Aéreo a la par de la mejor conveniencia para el país que a mi manera de ver las cosas, los militares deben retornar progresivamente a sus cuarteles. Veámonos en este ejemplo antes que ocurra una tragedia que lamentar.
3.2. Del plan Bolívar 2001
Se hace necesario que los programas sociales de mantenimiento de atención especializada a la población retornen a los entes idóneos para ejecutar esas acciones las cuales son: Las Alcaldías y las Gobernaciones.
3.3. Demás dependencias de la Administración Pública
Especial mención merece el retorno a los cuarteles de los militares que cumplen funciones en la Administración Pública Nacional en los Ministerios de Sanidad, Educación e Institutos Autónomos entre otros.
3.4. Industrias Básicas y PDVSA
La formación Militar e intelectual de los profesionales de la FAN no los capacita para dirigir las Industrias Básicas y PDVSA de allí que se plantee el retorno de los militares a su sitio de origen por que las tareas que ejecuta no son acordes con su profesión principal. Deberíamos solicitar al Presidente una respuesta con relación a la existencia de algún militar activo que ostente el titulo de: Ingeniero petrolero o rama afín. ¿Verdad que es difícil?
3.5. Cancillería y Servicio Exterior
Hay que devolver al país su capacidad para ejecutar procedimientos de servicio exterior ya que con la “invasión de militares,” la diplomacia, las relaciones internacionales, la negociación, la socio política y las practicas consulares aprendidas por nuestros honorables funcionarios de carrera del Ministerio de Relaciones Exteriores en su Licenciaturas, Especializaciones y Maestría cursadas en el Instituto de Altos Estudios Diplomáticos Pedro Gual por mencionar alguno, el Gobierno los echo a la papelera, con el debido respeto de esos ilustres venezolanos. Me pregunto y le pregunto a la Sociedad Civil:
¿Cómo se sentirá un funcionario de la Cancillería que después de lograr una brillante carrera diplomática sea sustituido por un militar incapaz para cumplir con esas funciones? En torno a esto se plantea que el Gobierno debe revisar esa situación ya que su flamante Ministro de Exteriores quien se declaró “incapaz” en el MIJ Cnel. Luis Alfonso Dávila García, no vislumbra que estamos quedando muy mal en el servicio exterior y que el daño se le hace a Venezuela.
4. Elegir verdaderamente a las autoridades
Con la “ola militarista chavista” todo aquel militar retirado con curriculum ó no, se sintió representante del pueblo soberano y confundieron a los electores, de allí que alerto de cuidarse en no seleccionar nuevamente a aquellos que por su “reprochable conducta” fueron expulsados por borrachos, homosexuales, ladrones, traficantes, asaltantes, contrabandistas y ahora dirigen nuestros destinos como Concejales, Alcaldes, Gobernadores y acólitos miembros del Alto Gobierno. Por ello se hace necesario que cada cual los detecte e identifique porque vale la pena estar prevenido.
Como conclusión expreso que “La Salida Militar” para el país se circunscribe en:
Sacar definitivamente a la FAN del debate político, suspender el voto militar, retornar a los militares a sus cuarteles y elegir verdaderamente a las autoridades en pro de devolverle a la Nación su capacidad para que en forma integral funcione con sus instituciones propias. Para que sus Gobernantes no se apoyen en demostrar “Poder y Mando” sobre la sociedad civil, amparados en el ejercicio de “militares con metralleta.” Estos; en vez de crear el “ Orden y la Disciplina” que los electores pensaron y soñaron, sumen al país en Incertidumbre, Incapacidad, Desconfianza y Descontento por la Acción Revolucionaria Chavista, Militarista Inconveniente y Retrograda. Acción que alejo totalmente a los profesionales militares de su función principal y contribuye aceleradamente con la pérdida de la Misión en la Fuerza Armada Nacional, por la distracción de sus miembros en otras tareas, en detrimento de la colectividad en general.
Institucionalmente:
Sammy Jesús Landaeta Millán.
Coronel Aviación.
C.I. 3.441.697
Email: sammylan@yahoo.es
Twitter: @ProtestaMilitar
NOTA: Artículo publicado en el Diario Regional ANTORCHA. El Tigre. Estado Anzoátegui, Lunes 25 de Abril de 2001. Opinión. A-4.