Al Teniente Coronel Presidente, quien ha llevado a los venezolanos a
vivir la angustia, la tristeza, la desesperanza, y la inseguridad de la
peor etapa de sus vidas.
Hay
que ser muy descarado para aprovecharse del sentir de los venezolanos
que están viviendo la angustia y la incertidumbre que les produjo la
fuerza de la naturaleza. Cuando en sus líneas del domingo pasado
pretende con su lenguaje ladrón de esperanza comparar la situación de
los venezolanos con lo vivido en Jerusalén por José, María y Jesús. En
sus descaradas líneas habla de cómo el nacimiento del niño Jesús queda
reflejado en los refugios de los damnificados. Cuando la ineptitud e
ineficiencia de su régimen son responsables de la desesperanza y
tristeza de tanta familia venezolana.
Usted llama a quienes nos oponemos a que lleve a Venezuela a una DICTADURA INMORAL “oposición apátrida'' la que ha querido empañar nuestra Navidad cuando es usted el único responsable que desde hace once años los venezolanos no hayan vuelto a tener una navidad feliz. Usted, ha asesinado con su proyecto trasnochado los sueños de los venezolanos, sembrando odio y separando familias. Usted, no sigue a Cristo redentor como lo expresa en sus líneas, usted sigue a su propio Cristo, un octogenario anciano DICTADOR que le dicta directrices para que empobrezca y destruya al pueblo venezolano.
Su
desfachatez no tiene límite cuando afirma que “cada refugio es la
representación viva del pesebre originario”. No, Teniente Coronel
Presidente, en aquel pesebre hubo alegría, esperanza y paz. El niño Dios
nació sobre una cama de tibia paja, mientras en la Venezuela que ha
recibido miles de millones de dólares por la renta petrolera, los niños
de los refugios duermen en colchones plásticos conviviendo con la
tristeza, la desesperanza y la angustia. En su cita de Ludovico Silva
“No hay peor infierno que la falta de esperanza. Perder la esperanza es
no tener futuro, el porvenir se nutre de ella”. Acertada es su cita
porque los venezolanos y Venezuela están viviendo en un infierno desde
que usted desgraciadamente asumió el poder y les destrozó la esperanza.
Usted,
dice que como cristiano radical, entiende y asume el santo Evangelio
como salvación y liberación definitiva de todos los hombres y mujeres de
buena voluntad. y hace mención a las palabras de Juan Pablo II en el
documento “¿Qué has hecho tú de tu hermano sin techo? La iglesia ante la
carencia de viviendas”, que escribiera a propósito del Año
Internacional de los Sin Techo (1987) establecido por la ONU: …salir al
encuentro de quien tiene necesidad de una vivienda pertenece al espíritu
de las “obras de misericordia”, en función de las cuales seremos
juzgados por Cristo nuestro Señor (cf. Mt. 25, 31-46). Usted tendría que
preguntarse ''Que has hecho tu para que tus hermanos tengan un techo''.
La respuesta a esta pregunta es hartamente conocida, NADA.
Usted
pide que los venezolanos reflexionen profundamente sobre sus acciones y
decisiones. La reflexión debe empezar con una pregunta, ¿Porque usted
ha regalado a otros países el dinero que no le pertenece, porque otros
países reciben regalos mil millonarios mientras Venezuela se hunde en la
miseria?. Usted, quiere que los venezolanos saquen conclusiones
''sobre su decisión de legislar radicalmente en función de la felicidad
colectiva que nos merecemos que comienza necesariamente por la
resolución del problema de la vivienda''. El pueblo de Venezuela ya sacó
sus conclusiones. Usted, construyó viviendas en otros países mientras
los venezolanos carecen de ellas. Usted, es un mentiroso compulsivo y un
enterrador de futuro que pretende seguir tratando a todo un pueblo como
un rebaño de borregos.
Teniente
Coronel Presidente, Usted afirma que han comenzado a “ladrar los
perros”. En sus ladridos, desconocen a nuestra Carta Magna y van contra
su espíritu, alegando que estamos dando un golpe de Estado contra la
misma, como justificación y preludio del golpe que ellos sí están
tramando. No, Teniente Coronel Presidente, los venezolanos
le están gritando a un perro que desconoce la Carta Magna y desde el
Estado dió un golpe de Estado en contra del Estado.
Usted
dice en sus líneas que junto al pueblo conjurará a todos los diablos
que se le pongan por delante, se estrellarán y se seguirán estrellando
como sucedió esta semana en la que intentaron desestabilizar nuevamente
al país. Teniente Coronel Presidente, no le quepa duda que el pueblo
conjurará al diablo que rodeado de servidumbre lo ha engañado y se
burlado de él.
Usted
ha convertido a la Venezuela fraterna, amistosa y amable en un país de
enemigos, usted ha hecho que los venezolanos tengan que abandonar su
país y mueran lejos de sus seres queridos y de su tierra.
Usted
ha comprado la conciencia de quienes decidieron lanzar sus principios
al rio Guaire para que se mezclaran con el contenido de su pestilente y
oscuro caudal.
Pensándolo
bien a usted no sólo hay que llamarlo LADRON que es aquel que toma
clandestinamente un bien que no le pertenece, también hay que llamarlo
GENOCIDA, que es aquel que sistemáticamente extermina un grupo étnico,
racial o religioso. Usted, se ha apoyado en una miserable mezcla de
nacionales y extranjeros a quienes les extrajo del alma su vocación
masoquista de seres que necesitaban ser escupidos y maltratados que
sintiéndose abyectos se sentían realizados, esa es la atmosfera en la
que usted flota.
Usted
es ejemplo vivo del refrán ''Dios los cría y ellos se juntan''. Usted,
se ha rodeado de seres que han perdido los escrúpulos, les ha comprado
el honor, la decencia y el respeto por ellos mismos, los ha convertido
en un pellejo de huesos que después de servirlo y secundarlo en sus
innobles acciones contra Venezuela, sólo les quedará como único
requisito para enmendar sus errores señalarlo por sus crímenes para no
morirse de asco.
Teniente Coronel Presidente, usted es un miserable rufián que en nada se diferencia de los holgazanes que han cabalgado en la historia y que están a punto de morir. Quiero ponerlo al tanto de la respuesta que dió Fidel Castro a Ignacio Rasco, periodista católico en 1959 cuando intentó explicar porque no era comunista. Cito, ''No soy comunista por tres razones. Primera, porque el comunismo es la dictadura de una sola clase y yo he luchado toda mi vida contra las dictaduras y no voy a caer en una dictadura del proletariado. Segunda, el comunismo significa odio y lucha de clases y yo estoy en contra completamente de esa filosofía. Tercera, porque el comunismo lucha contra Dios y la iglesia''. Aun así usted, se empeña en seguir sus directrices y cambiar el sistema de gobierno en que el pueblo ejerce la soberanía (Democracia) por un gobierno que se ejerce fuera de las leyes constitutivas de un país (Dictadura).
Teniente
Coronel Presidente, será muy larga la cola de venezolanos que lo
estarán esperando cuando descienda de la escalera del poder a la que el
pueblo engañado lo encumbró, en ese momento se les hinchará el pecho de
regocijo cuando lo vean juzgado y condenado por la justicia divina o la
de los hombres. Usted, más pronto de lo que imagina se convertirá en un
bagazo mal oliente y olvidado en un rincón del chiquero de la historia.
Teniente
Coronel Presidente, como no sé si realmente usted ha leído los libros
que dice haber leído y mi duda radica en que un asiduo lector no incurre
en errores ortográficos como los exhibidos por usted en cadena nacional
sobre un pizarrón. Me inclino entonces en suponer que debe haber leído
alguno de los pensamientos del Libertador. Y como no me seria grato
invitarlo a nada que no sea que rectifique en su absurdo proceder cosa
que dificulto hará por su miopía de visión de historia y embriagues por
el poder, lo insto a que reflexione sobre el momento, los motivos que
llevaron al Padre de la Patria a escribir un pensamiento en aquellos
lejanos y aciagos días de la patria. Nunca imaginó el hombre grande de
América que un pensamiento suyo lo señalaría a usted de la misma manera
que usted señala las propiedades que habrá de robarle a los venezolanos.
Este es el pensamiento sobre el cual lo insto a reflexionar.
''MALDITO EL SOLDADO QUE VUELVE LA ARMAS CONTRA SU PUEBLO''
Cnel. (GN) Antonio Semprun
''MALDITO EL SOLDADO QUE VUELVE LA ARMAS CONTRA SU PUEBLO''
Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira