Comunismo. La Mayor Suma de Infelicidad
Al totalitarismo comunista se le imputan más de 100 millones de muertos por represión y hambruna en el libro negro del comunismo, a Mao 65 millones, a Stalin 20 millones, (nunca se sabrá la cifra exacta de asesinados, los totalitarios son expertos en ocultar y falsear la verdad). Aquí, el del siglo XXI, lleva más 170000 y la cifra aumenta vertiginosamente. Además mediante diversas tácticas este régimen va acostumbrando a la gente a ser no persona y a tener nada, a sobrevivir sin libertad, sin principios y sin bienes; su política de control total, de extinción de la vida privada de la gente y de toma de los medios de producción, comprende: 1 El uso de cuerpos armados, oficiales y paramilitares, y del hampa para mantener presa a la gente en las casas, quien para colmo es la culpable de que le asesinen, encarcelen injustamente, le roben, etc., por provocar, “quien lo manda a tener una camionetota o un BlackBerry o a resistirse a vivir en socialismo”. Lo grave es que el régimen lleva años atizando odio y muerte también en las cárceles convencionales y, luego de crear un clima favorable, va a desconcentrarlas otorgando libertad plena o condicional a numerosos reclusos, no quiero ni imaginar lo que nos viene, pues ya los asesinatos múltiples son rutina y tenemos hasta violaciones masivas de mujeres que viajan en autobús. 2 El uso de la gente que participa protagónicamente en el daño moral y material de sus semejantes, entre otros, en la discriminación y amedrentamiento de la disidencia, recopilación de información para el régimen cubano-venezolano, invasiones, expropiaciones-expoliaciones, etc. 3 El uso de la Ley y la justicia. Mediante leyes como la de “Precios Justos” y “Contra el Desalojo Arbitrario de Viviendas” el régimen criminaliza la libertad económica y la propiedad privada, “ser rico es malo”, toma los medios de producción, incluyendo la capacidad para pensar y crear; de modo que, si lo que usted tiene no se lo quita el hampa común se lo quitará el régimen. 4 La sustitución de la educación por adoctrinamiento comunista y de la meritocracia por lealtad irracional como medio para obtener títulos profesionales y ascenso social. 5. Las políticas económicas para depauperar, igualar hacia abajo, una doméstica y un médico ganan lo mismo. Sólo la nomenclatura vive como los más ricos del mundo.
La gente pierde el sentido de lo bueno y lo malo, de lo justo y lo injusto y del deseo de superación -para qué esforzarse en estudiar, para qué tener algo si no se puede disfrutar-, así vive muerta en una guerra fratricida que produce la mayor suma de infelicidad.
FUENTE: Frente Patriótico