Mayo 01, 2013
Mía es la venganza…!
Por Carlos E Méndez
Yo estoy convencido tanto como usted, de que Dios le
dio la victoria al candidato Henrique Capriles el pasado 14 de abril.
Pero no ha habido manera de que el organismo electoral venezolano
escuche su reclamo y le de una explicación satisfactoria a las protestas
pacificas de los electores. Muy por el contrario, les han respondido
con más abusos y atropellos físicos y verbales los cuales han emprendido
contra la población civil y los diputados de la oposición victimas de
las autoridades infiltradas y de los diputados oficialista guapos y
apoyados de la Asamblea Nacional encabezados por su presidente el
terrible Sr. Diosdado Cabello.
Este comportamiento oficialista nos recuerda la
actitud intransigente del faraón de Egipto que se resistía a los
pedimentos del profeta Moisés de ceder y dejar en libertad al millón de
hebreos que vivieron como esclavos bajo su régimen imperial y el de sus
predecesores. En vista de su intolerancia ante las advertencias
pacificas de Moisés, Dios optó por enviarle tantas plagas como fueron
necesarias para que cambiara de actitud. El resultado de los juicios de
Dios fue la aniquilación de todos sus ejércitos y la salida gloriosa del
pueblo de Israel hacia la tierra prometida.
El pueblo de Venezuela y los diputados de la
oposición no desean la guerra sino una salida pacifica a sus justas
exigencias y a su derecho en el parlamento, pero los ministros y
diputados oficialistas insisten y persisten en crear un clima violento y
confuso con la intención de desconocer los verdaderos resultados del
14-A y pescar en río revuelto en caso de. Venezuela es un país rico en
reservas naturales y en reservas humanas, por lo que no se justifica que
su población viva en la pobreza y en la escasez, ni que su gobierno sea
conducido por individuos incapaces y sin escrúpulos. Menos aun su
destino merece ser dirigido desde la Habana donde impera un régimen
faraónico y comunista, que mata, encarcela y atropella a los que se le
oponen.
“Mía es la venganza dice Jehová Dios de los
ejércitos” del cielo. Dios quien es amor, también es fuego consumidor,
por si no lo saben los que están desafiando la tolerancia pacifica en
la Venezuela política de hoy. No hay poder humano ni esotérico que pueda
detener la mano del Altísimo. Dios nos tiene reservada a los
venezolanos una patria nueva donde reine la justicia del hombre a través
de una democracia participativa y un gobierno descentralizado que nos
libere del estatismo gubernamental y nos proyecte con dignidad hacia un
futuro mejor.
Carlos E Méndez
- El miedo tocó a la puerta; la fe abrió y no encontró a nadie -