INMORALIDAD, SÍMBOLO DE REVOLUCIÓN
*Jesús Enrique Briceño García.
Cuando se analiza
el comportamiento humano para demostrar el Liderazgo de un grupo, las
actuaciones organizacionales, son reflejo fiel de lo que enmarcan los valores
que el grupo que conduce, demuestra con su ejemplo. Por esta razón, uno de los
primeros requerimientos de los procesos de selección cuando se entra en una
organización, es revisar que el esquema de valores del aspirante, concuerde con
los valores organizacionales. Para el Estado, debe reflejar los valores fundamentales
con los cuales se hace permanente en el tiempo. Los dirigentes de partidos
políticos, quienes en Democracia son los que dirigirán cada nivel del Estado, deben
pasar procesos de selección que reflejen los valores del Estado venezolano y no
como ha sucedido en estos 15 años de obscurantismo, en los cuales sus
ejecuciones han estado alejadas de los principios contemplados en la carta magna.
Esto amigos todos, es INMORALIDAD. La
Moral es una facultad crítica, que no pertenece al orden jurídico y que permite
percibir un balance entre el bien y el mal de las actuaciones propias. Para
cualquier Organización, las actuaciones de los equipos de trabajo, deben tener
un marco referencial dado por los valores de esa organización y estos valores,
reflejan marcos de actuación de los líderes que son guías para el resto de los
integrantes de la organización.
Cuatro valores
fundamentales están destruidos y han escenificado esa conducta de los líderes
de este gobierno, el cual está conformado por personas con profundas
desviaciones, hasta llegar a viciosas actuaciones que los convierte en Extremistas del Poder. El primer valor
fundamental destruido es la DECENCIA,
cambiado por la represión hasta el terror sobre LOS ESTUDIANTES. Estudiantes
asesinados, violados en sus Derechos Humanos, presos por manifestar sus
creencias y unos vestidos de rojos, engañados vilmente por dirigentes castrocomunistas,
que actúan con las mismas perversiones, con las que les enseñan a actuar. La DECENCIA,
ha sido cambiada por el abuso, la violación, el desprecio hacia sus
conciudadanos, desatados con toda la fuerza, por las FAN, las Fuerzas
Policiales y los grupos de paramilitares que actúan en connivencia con los
dirigentes del PSUV y los altos niveles gubernamentales. El segundo valor
destruido, es la DIGNIDAD, el
respeto y consideración hacia la esencia de las personas, hacia el esfuerzo que
hacen las esposas y madres de la tercera edad por conseguir un kilo de alimentación
básicas, colas interminables que obligan perder miserablemente el esfuerzo
versus logros, de millones de personas, que a la intemperie y desde tempranas
horas deben legar su dignidad por un kilogramo de comida. Una verdadera
inmoralidad gubernamental que todos sufrimos. Con todo lo que hemos luchado por
el progreso, la generación de los 60´s, hemos sido obligados a hacer lo
indecible por un kilogramo de alimento. El tercer valor es la LEALTAD, no hacia las personas, sino
hacia las instituciones. Hacia los Ciudadanos, hacia los principios
fundamentales. Aquí puede más la fuerza de las armas, con su exigencia de
lealtad hacia la mentira, de lealtad a los abusadores y corruptos, que la
lealtad a un pueblo que exige juicio, a quien se merece. Decenas de exfuncionarios
del CNE han demostrado el engaño del sistema. Declaraciones notariadas de
exfuncionarios del TSJ, como el Crnel Aponte Aponte y Luis Velazques Alvaray
demuestran las corruptelas de todo el sistema Judicial. Funcionarios de
inteligencia como Wilmer Moreno y Jesus Aguilarte, el narcotraficante Walid Mackled,
los testigos estrellas de la fiscalía, exmiembros de barrio adentro y cubanos
de las fuerzas de ocupación cubana, funcionarios de puertos, registros, sistema
de identificación reclaman la invasión cubana. Antonini Wilson y los maletinazos,
el patético caso del guerrillero Raúl Reyes con cientos de relaciones
demostradas de FARC, FAL, Frente Bolivariano y decenas de mafias, grupos
paramilitares, milicia bolivariana y organizaciones de terrorismo internacional
como Hamas e Hezballah con el régimen, reclaman
por Justicia. Cientos de Oficiales de las FAN retirados recientemente, reclaman
la destrucción de las FAN como poder de la Seguridad y Defensa y su uso
político por el régimen castrocomunista. El periodista y agente cubano Mario Silva
y ahora las declaraciones del dirigente del PSUV y máximo técnico financiero de
la economía Giordani gritan a todo pulmón las corruptelas del gobierno
castrocomunista en 15 años. Todo esto es una simple expresión del engaño con la
cual han destrozado Venezuela desde todo punto de vista, pero principalmente, moralmente
y sus consecuencias se reflejan en la miseria que estamos viviendo, la baja
calidad de vida que tenemos, el robo a borbotones de boliburgueses que sin
tener dos centavos, ahora son potentados que despilfarran el erario nacional en
infames vicios. Por ultimo debo levantar mi voz contra un valor fundamental que
incluso en la oposición no le está dando el peso que tiene en la subsistencia
del Estado, LA SOBERANIA, con su
violación, se está permitiendo que entreguen territorio tan venezolano como lo
es Caracas y que son miles de kilómetros cuadrados, como es el mar patrimonial
que generan nuestras Islas en el Caribe, como la perdida de Guyana, que alerta
la perdida de mar, no solo rico en pesca, en posibilidades de transito
marítimo, en prospección, en petróleo, en gas y cientos de beneficios que estos
castrocomunistas, sin disparar ni un tiro están entregando a cuenta de su
revolución.
Si a todo esto lo llamamos
INMORALIDAD, debemos decir que esas actuaciones de funcionarios de este
gobierno castrocomunista, sin ninguna contención de quienes debían poner un
coto a tanta perversión, son la máxima expresión en contra el progreso. Es la
regresión en la forma de conducir el país. Es la vuelta al centralismo de los
caudillos más indecentes y escasamente preparados. Es la exacerbación inmoral del
presidencialismo. Es el total control de los poderes y de los bienes del Estado
por parte del partido de turno y del equipo de gobierno, es la anarquía total.
No hay orden Jurídico ante las continuas violaciones, ni el cumplimiento de los
principios de convivencia, orden social o ciudadanía, ante tanto descalabro,
ante el incremento desmesurado de la deuda interna y los desparpajos en los
manejos físico financieros, en fin, es INMORALIDAD en el manejo total del
destino del país. Este gobierno nos ha retrotraído en el tiempo, inhibiéndonos
en lograr un Estado Libre de Mercado que se encargue eficientemente, solo de la
Educación, la Salud, la Justicia, la Seguridad y los servicios de
infraestructura y que irradie valores fundamentales. El resto debe corresponder
a la acción productiva del individuo, quien con una base educativa competitiva,
en el marco de valores ciudadanos, enrumbe la maquinaria colectiva productiva,
para satisfacer las necesidades del bien común de la población.
Los dirigentes de
este régimen, siguen en su empeño de mantener el poder en la forma como la han
hecho hasta ahora, INMORALMENTE. Es hora de alertar al pueblo que aún no se da
cuenta del enorme engaño que hemos tenido. Hay que emularlo en defender nuestros
valores fundamentales como sociedad. La oposición, hemos escogido la ruta
democrática para esa defensa, pero ya son muchos los esfuerzos sin que
observemos cambios en las actitudes de los dirigentes castrocomunistas. El
cambio debe ser nuestro clamor ciudadano. Seguir como vamos, será engrosar la
lista de los 265.000 asesinados que en 15 años por acción u omisión ha
propiciado este régimen. Sera para muchos, el exilio o la prisión por pedir
mejoras a este gobierno inmoral o seguir indolentes ante tanta perversión, pensando
que se salvaran de las garras del castrocomunismo.
*Vicealmirante, Doctor en Administración