GUYANA:
UN ZORRO CON PIEL DE CORDERO.
G/D (Ej). Oswaldo Sujú Raffo - IDEFV-
(31-03-2016).
La llamada “Política Diplomática de Paz” que hace meses
inició el gobierno de Guyana, ante la poca y flatulenta respuesta de nuestra
Cancillería, ha provocado un ambiente internacional favorable a ese país,
usurpador de nuestra Guayana Esequiba, en su afán de eternizarse en un
territorio que nunca les perteneció, ni a ellos ni a su pérfida progenitora:
Inglaterra.
Esa diplomacia agresiva y continua de Guyana, por todos
los escenarios internacionales con prisa y sin pausa, ha logrado sus
frutos y ventajas políticas-estratégicas. La astucia de un zorro arropado con
piel de cordero, es la manera como el presidente guyanés Granger pudo mover con
ventajas, el ajedrez diplomático en este litigio fronterizo de 117 años y
más…La repetida y lagrimosa frase: “Somos un país pequeño y pobre, amenazado
por un país grande y rico, que se opone a nuestro desarrollo.” ha calado en la
opinión internacional. Sin dudas.
Se ufana el gobierno de Guyana de los apoyos y éxitos
alcanzados en ese periplo diplomático “pacifista”. Esa iniciativa logró el
respaldo irrestricto del Commonwealh ó comunidad de 48 países, unidos por un
lazo común con la Corona Inglesa, en los cinco continentes. Países de América y
de otras regiones, con intereses económicos en Guyana, también la respaldan e
incluso los “países hermanos” y los deudores de favores recibidos de Venezuela,
permanecen mudos y sordos.
La diplomacia de paz guyanesa, es lógico entenderlo,
aprovecha nuestra situación interna de confrontación política, económica,
social y militar, como nunca se vivió en nuestro país en el último siglo y por
eso su astuto cabildeo y plañidero lobby con la O.N.U, O.E.A, MERCOSUR, UNASUR,
CARICOM, ALBA, PETROCARIBE y otros organismos internacionales que olfatean la
participación en un “Festín de Baltazar”, con las riquezas que encierra nuestro
Territorio Esequibo.
Pero existe algo que es necesario nombrar y tener
presente: Las informaciones publicadas por medios internacionales y de la misma prensa guyanesa, recogidas, traducidas y analizadas
por la O.N.G “Mi mapa Venezuela incluye nuestro Esequibo”, fundado y dirigido excelentemente
por el Lic. Jorge Fuguet N. nos actualiza en lo que hoy sucede, al este y al
oeste del río Esequibo. El gobierno de Guyana sabe, así lo disimule, que ellos
no podrán demostrar jamás la titularidad histórica y jurídica sobre el
territorio venezolano que ocupan, por el despojo de las potencias del Siglo
XIX, en cambio Venezuela si lo puede y holgadamente.
Por esta razón implementa una nueva Ley de Defensa
Nacional, incrementando sus efectivos regulares y reservistas en: Fuerza de
Defensa Nacional y Fuerza de Milicias Populares; adquiere y moderniza su
material bélico; logra acuerdos de cooperación militar, adiestramiento y
material de guerra con EE.UU, Francia, Inglaterra, Brasil, China, Canadá,
Israel, Surinam, Cuba, Nicaragua y los Cuerpos de Defensa del CARICOM.
Pero Guyana al quitarse “la piel de cordero” no puede
disimular ni esconder, las atrocidades que se comenten en nuestro Territorio
Esequibo, en franca violación de leyes y acuerdos internacionales, contaminando
y destruyendo selvas vírgenes y aguas marinas, fluviales y lacustres en
detrimento de la flora, fauna y de etnias autóctonas amerindias y arawacos;
todo ello con la euforia y la voracidad de quien disfruta riquezas ajenas, en
tiempo medido por la verdadera Justicia Internacional.
La explotación de hidrocarburos, por transnacionales de
los EE.UU, Inglaterra, Canadá, Saudi, China, India con anuencia de Guyana, en
aguas venezolanas ancestrales del Delta del Orinoco o en las aguas que proyecta
el Territorio Esequibo, es causa de conflicto bélico regional, sea ahora o
después o cuando sea inevitable... La contaminación de los suelos, por la minería
destructiva de empresas aupadas por Guyana, procedentes de Canadá, Dubai y la
India, en contratos de hasta 85 años, en terrenos donde el oro se encuentra a
cielo abierto, con explotación a gran escala y ganancias multimillonarias, igual
sucede en menor escala con los otros minerales preciosos y estratégicos que
allí abundan.
La explotación salvaje de nuestros bosques, de madera
fina de alta calidad comercial, es simplemente apocalíptica y merecen sanciones
internacionales para Guyana y sus socios depredadores de Malasia, China y la
India. La concesión de explotación maderera de esas empresas asiáticas abarca
una extensión de 3.700.000 hectáreas de bosques vírgenes, es decir la suma de
las superficies de los Estados Barinas, Vargas y Nueva Esparta; deforestación
criminal que atenta contra el cuidado del clima y los bosques tropicales y por
el cual Noruega paga anualmente a Guyana la cantidad de 250 millones de US$ por
su “vigilancia y cuidado.”
No debo dejar de mencionar el proyecto hidroeléctrico Amalia,
en nuestro río Mazzaruni, para darle energía a Boa Vista (Brasil) y a
Georgetown (Guyana) y donde se debe inundar un área selvática de la extensión
del Estado Carabobo, con desprecio de los miles de indígenas que,
ancestralmente allí viven y el silencio cómplice de quienes deben evitarlo…y
cuantas otras cosas más suceden en ese pedazo de nuestra Patria, que nos
enardece y nos obliga a unir esfuerzos, inteligencia, voluntades, criadillas,
ovarios y sacrificios por recuperar lo
que es nuestro.
¡¡ Se perdió una gran oportunidad en los últimos 15 años,
con suficientes recursos para un excelente Lobby diplomático y sin necesidad de
ponernos “piel de corderos”!! como lo hace Guyana, pues la razón y la justicia
nos asiste, en esta Venezuela tuya, mía y nuestra. La Patria es primero. ¡Hasta luego! Fuera los bandidos, vividores y corruptos
cínicos.
Oswaldo Sujú Raffo.
idefvsoberania@gmail.com
NOTA DE REMISIÓN: Apreciados amigos, les envío este artículo del IDEFV que señala las progresiones y éxitos de Guyana, aprovechando nuestra lasitud...No tiene culpa el que hace, sino el que se deja hacer. Saludos. GD. O. Sujú Raffo.