BARVIJA, Rusia (Reuters) - El presidente venezolano, Hugo Chávez, consolidó el jueves una alianza más estrecha con Rusia al reconocer como estados independientes a dos regiones rebeldes de Georgia afines a los rusos y a cambio asegurar el suministro de armas y préstamos.
Su reconocimiento de Abjasia y Osetia del Sur está considerado un extraño éxito diplomático para Rusia, que ha intentado persuadir a sus aliados durante más de un año para que respondan a su liderazgo y traten a estas dos pequeñas regiones como soberanas. Sólo Nicaragua las había reconocido hasta ahora.
"Venezuela a partir de hoy se une al reconocimiento de la independencia de Osetia del Sur y Abjasia", dijo Chávez al presidente ruso, Dmitry Medvedev, a través de un traductor en la residencia oficial del presidente ruso en Barvija, a las afueras de Moscú.
Pronto Caracas iniciará el proceso para el establecimiento de relaciones diplomáticas con ellos, añadió.
El resto del mundo considera como parte integral de Georgia a las dos regiones, que expulsaron al Gobierno georgiano a inicios de la década de 1990 y desde entonces se han encargado de sus propios asuntos. El tema se ha convertido en un punto de tensión en las relaciones entre Rusia y Occidente.
ARMAS
Medvedev agradeció a Chávez su apoyo. Poco después dijo que Rusia suministrará los tanques y armamentos que Venezuela buscaba comprar.
"Suministraremos a Venezuela las armas que Venezuela nos pide", dijo tras las conversaciones sostenidas entre ambos.
"¿Por qué no tanques? Sin duda, tenemos buenos tanques. Si nuestros amigos quieren tanques, se los entregaremos", agregó.
No ofrecieron detalles sobre la negociación de las armas, pero la agencia de noticias estatal rusa, RIA, citó a una fuente militar diciendo que Venezuela compraría 100 tanques por 500 millones de dólares (unos 345 millones de euros).
Ambas partes anunciaron además planes conjuntos para la creación de un banco con un capital de 4.000 millones de dólares para financiar sus proyectos.
Chávez ha dicho que Venezuela quiere reforzar su armamento para resistir a lo que denomina la influencia del imperialismo estadounidense en Latinoamérica.
Las tensiones se han incrementado entre Venezuela y su vecina Colombia, un aliado cercano de Estados Unidos e histórico rival de Venezuela, a pesar de que comparten una frontera de más de 2.000 kilómetros.
Venezuela y Colombia estuvieron cerca de una confrontación bélica el año pasado y el presidente colombiano, Álvaro Uribe, ha acusado a Chávez de apoyar a la guerrilla marxista de las FARC. por su parte, Venezuela rechaza el uso de siete bases militares en Colombia por parte de Estados Unidos para operaciones antidroga.
Diplomáticos latinoamericanos en Moscú expresaron preocupación por el impacto potencial de la negociación de armas sobre la seguridad regional.
"Si los tanques son enviados por Rusia para su despacho inmediato, esto desestabilizará a la región", dijo un diplomático. "Si se trata de una orden para que los tanques sean ensamblados y entregados en los próximos años, entonces se trataría más de un acto político".
El poderoso ex primer ministro ruso Igor Sechin dijo a reporteros el miércoles que un pacto entre la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) y un consorcio de firmas rusas para desarrollar un bloque en la Faja Petrolífera del Orinoco será firmado pronto.
El consorcio ruso está integrado por las petroleras Rosneft, Gazprom, Lukoil, TNK-BP y Surgutneftegaz.
Rusia es el segundo mayor exportador de petróleo del mundo, mientras que Venezuela es socio de la OPEP.