La organización es
imperativa
El
mensaje que recibo de cientos de lectores es muy claro: NO HAY ORGANIZACIÓN, lo
cual conlleva a la desesperanza y a la frustración. Los compatriotas que me
escriben en su mayoría tienen algo en común, dicen estar dispuestos a dar la
vida por Venezuela, pero no a la ligera y mucho menos por el liderazgo actual
de oposición. Algo sumamente grave, porque es ese precisamente el meollo real
de la precaria situación nacional.
No
existe un liderazgo respetable, ni cohesionado y mucho menos patriota.
El país mayoritariamente y de forma
exponencial rechaza la cubanización de Venezuela, pero no se identifica con la
dirigencia opositora por considerarla colaboracionista, desfasada y sobre todo,
elitista. Gracias a esa dirigencia eunuca que no tiene agenda propia y
sencillamente se limita a esperar el libreto que los domingos, les impone el
dictador entre insultos y sandeces en su tragicómico programa, es
que se nos está perdiendo la patria de manera irreversible.
Lo
peligroso de la situación actual es que el país tiene cifradas sus esperanzas
en una nueva elección, que de darse, sólo servirá para re-legitimar al sátrapa y
sumir a la población en un nuevo trance hipnótico de desaliento, desasosiego y
amargura. Lo más triste del caso es que la mayoría de las personas van
a votar a sabiendas de que el régimen manipula su voto, pero no tienen
alternativa.
O se
quedan en sus casas sintiéndose culpables y traidores, o van a votar esperando
un milagro que nunca llega, esperanzados en una dirigencia opositora que
es experta en mercadear con las ilusiones y el futuro de los benevolentes
electores.
¿De
verdad creen ustedes que cuando se consuma el fraude masivo y descarado del 26
de septiembre, ultrajando una vez más la soberanía popular, Omar Barboza,
Pompeyo Márquez, Julio Borges, María Corina Machado, Teodoro Petkoff o algún
idiota de la Mesa de la Unidad Democrática va a defender nuestro voto? ¿Creen
ustedes que ellos no tienen es su manos las pruebas de los fraudes anteriores?
¿Creen
ustedes que ellos caen por inocentes o es que viven en el limbo deshojando la
margarita? ¿Por qué creen ustedes que el país es llevado al matadero en cada
elección trucada sin explorar otras vías legales y constitucionales de resistencia y
rebeldía? La respuesta es muy sencilla: No les
importa un carajo ni el país, ni los humildes tripones de la patria.
Muchos
se preguntarán: ¿Pero por qué la dirigencia opositora le hace el juego a Chávez y se
burla de nosotros?
Simple
y llanamente porque es un saco de gatos que prefiere convivir con el régimen,
subsistiendo de migajas en cada elección, cual rémoras politiqueras que solo
defienden su “status quo”. Lo más siniestro de esta relación simbiótica entre
el dictador y la dirigencia opositora, es que se necesitan mutuamente para perdurar
en el tiempo.
Son
un binomio perfecto en un engranaje mortífero de élites que persiguen un mismo
fin: Dominar a las masas, vivir a expensas del estado a través de jugosos
contratos y mercadear con los votos e ilusiones de la plebe. Nuestro
peor enemigo actualmente es la oposición que hace caso omiso al sentir
nacional, y pretende enterrar definitivamente los restos insepultos de nuestra
marchita democracia.
Su
proceder ilícito y traidor es harto conocido y sus penas serán proporcionales
al delito, no saldrán lisos de este embrollo castro-chavista.
Es
por eso precisamente que debemos organizarnos y estar preparados en cada
vecindario, parroquia y ciudad. El 26 de septiembre debemos volcarnos a la
calle apenas los resultados viciados de las elecciones sean anunciados. No
esperen por dirigentes ni líderes de pasquín, cada quien es responsable de
movilizarse a las plazas, a las sedes regionales del CNE, a los cuarteles
militares, o al frente de su casa, dependiendo del caso.
Ese día debemos crear el punto de quiebre.
Cuando las movilizaciones a nivel nacional cobren fuerza y el efecto dominó se
replique en las masas, debemos exigir la destitución inmediata del dictador y
su corte criminal. El que todavía cree
en el voto pues que vaya a votar, pero después que salga a la calle a defender
su voluntad, apoyando así al resto de los ciudadanos en la cruzada libertaria
de restauración nacional.
No se nos volverá a presentar una oportunidad
similar hasta diciembre del 2012, y para entonces, tal vez ya sea demasiado
tarde. A continuación coloco el enlace de un vídeo producido por la señora Ana
Guía de Díaz, ex funcionaria del CNE, en donde se hace referencia a los fraudes
electorales demostrando de forma técnico-científica la vulnerabilidad del sistema
de votación automatizado: http://farsaelectoralvenezuela.wordpress.com/
También
tenemos que estar muy pendientes de la repercusión que traerá el “show”
mediático del supuesto terrorista salvadoreño Francisco Chávez Abarca, detenido
en Caracas y deportado a Cuba, ya que a todas luces pareciese un montaje
muy bien diseñado para involucrar posteriormente a militares y civiles
patriotas que luchan a diario por la causa libertaria.
Algo
se traen entre manos y la inteligencia cubana es experta en estos menesteres.
Repito
una vez más que el 26 de septiembre debe ser aprovechado como un punto de
quiebre, debemos ser nuestros propios líderes y entender de una vez por todas
que en la unión está la fuerza. Debemos trabajar como las hormigas de manera
mancomunada y con el mismo norte: el derrocamiento del
tirano.
Mantengamos
la fe intacta y proyectemos una nueva Venezuela, una Venezuela de prosperidad,
paz, armonía y sobre todo reconciliación. La bota comunista por mandato divino no se
ha de imponer en la patria de Bolívar, construyamos nuestra propia historia y
disfrutemos en un futuro cercano del reconocimiento generoso de las nuevas
generaciones.
“Renunciar a nuestra Libertad es renunciar a nuestra
calidad de hombres, y con esto a todos los deberes de la humanidad”
Jean Jacques Rousseau
¡Patria,
Democracia y Libertad!
Roberto Carlo Olivares
07-07-10
IMAGEN: Organicémonos por Venezuela // Facebook