Jubilados e ignorados
Por: Jesenia Freitez // Fotos por: Renier Otto
Falta
poco para que la magistrada Luisa Estella Morales se jubile de sus
funciones públicas, probablemente en condiciones distintas a los 68.980
militares de la Fuerza Armada Nacional quienes esperan por la
cancelación del régimen de remuneraciones y beneficios socioeconómicos
que les corresponde.
Los castrenses retirados se postraron ayer en las
instalaciones del Tribunal Supremo de Justicia con una torta y mariachis
para recordarle a la magistrada, al mejor estilo de los cumpleaños
venezolanos, que debe hacer valer la orden de cancelación de una deuda
que ya alcanzó su cuarto aniversario.
Representantes del Grupo Pichincha, la Asociación Nacional de Guardias Nacionales en situación de Retiro (Asonaguanar) y la Federación Nacional de Tropas Profesionales de la Fuerza Armada Nacional en situación de Retiro (Fenatropofar), entre otras; cansados de esperar por una respuesta, introdujeron un documento para exigir que se cumpla la Orden Mandato dada por la Sala Constitucional del TSJ al Ministerio del Poder Popular para la Defensa para que expida las órdenes necesarias y se proceda a la cancelación del referido beneficio de alimentación.
Los militares en situación de retiro se proponen hacer una cruzada para exigir que se les trate con respeto y no se les violen sus derechos constitucionales. Aunque solicitaron ser atendidos por Luisa Estella Morales, se entrevistaron con Roy Hernández, asistente de la magistrada, quien les indicó que dejaran el documento y se retiraran. Ahora deben esperar cinco días hábiles más para que les den algún tipo de respuestas.
Hasta la fecha, más de 700 militares jubilados han fallecido esperando el beneficio de alimentación que les correspondía. Los que aún sobreviven esperan que los recursos les lleguen, pues la mayoría sobrepasa los 70 años de edad y se encuentran enfermos.
Representantes del Grupo Pichincha, la Asociación Nacional de Guardias Nacionales en situación de Retiro (Asonaguanar) y la Federación Nacional de Tropas Profesionales de la Fuerza Armada Nacional en situación de Retiro (Fenatropofar), entre otras; cansados de esperar por una respuesta, introdujeron un documento para exigir que se cumpla la Orden Mandato dada por la Sala Constitucional del TSJ al Ministerio del Poder Popular para la Defensa para que expida las órdenes necesarias y se proceda a la cancelación del referido beneficio de alimentación.
Los militares en situación de retiro se proponen hacer una cruzada para exigir que se les trate con respeto y no se les violen sus derechos constitucionales. Aunque solicitaron ser atendidos por Luisa Estella Morales, se entrevistaron con Roy Hernández, asistente de la magistrada, quien les indicó que dejaran el documento y se retiraran. Ahora deben esperar cinco días hábiles más para que les den algún tipo de respuestas.
Hasta la fecha, más de 700 militares jubilados han fallecido esperando el beneficio de alimentación que les correspondía. Los que aún sobreviven esperan que los recursos les lleguen, pues la mayoría sobrepasa los 70 años de edad y se encuentran enfermos.
FUENTE: TalCual Digital