Sr. Presidente: Usted está ubicado en su Nivel de Incompetencia.
Elaborado por: Richard González C.
Sr.
Presidente: Se ha preguntado usted, si realmente; ¿es un hombre de
éxitos que permitan pensar en su eficacia y eficiencia que lo llevaron a
la primera magistratura?
El
éxito no es lo que imaginamos. No tiene que ver con títulos académicos
ni Honoris Causa. Ni si eres jefe, director o similares o con el poder
que ejerzas, ni el hablar en forma vehemente, bonito o si las luces te
siguen cuando lo haces. No tiene que ver si estás rodeado de periodistas
o de personas en un determinado momento.
El
éxito es un equilibrio de la justicia que conduce al bien tener y al
bien estar. Se trata de poseer una conciencia tranquila y su dignidad
invicta y el deseo de ser más y no de tener más. Es su grado de bondad,
su deseo de servir; su capacidad de escuchar a los demás y su valor
sobre la conducta personal. El desempeño con moral, equidad y con
principios. El ser competente para el desempeño de una función significa
avanzar hacia el desarrollo, tanto personal como organizacional
generando éxitos en ambos casos.
Su
gestión se ha basado durante estos últimos años, en el tipo Gerencia
por Contingencia o quizás de Excepción. Significa, que en la mayoría de
los casos, se ha desempeñado como parte del problema y no de la solución
en sí, ante el atolladero que venía arrastrando el país y que ahora, ha
empeorado.
No ha buscado la forma de hacerlo mejor, sino por el contrario, ha tratado de justificar su revolución como un socialismo que no tiene otra vía.
Salta a la luz, que no es más que la atención puesta en mantenerse, a
como de lugar en el poder y que no se ha dedicado a atender las
verdaderas necesidades del pueblo, a cualquier costo económico que lo
han llevado al despilfarro del dinero y bienes de todos los venezolanos.
Dentro
del caudal de errores por usted cometidos, no admite su equivocación y
que pueda aprender de los mismos. Sólo se exime de culpa y
responsabiliza a otros que suelen ser los adversos a su forma de
pensar…. “Ellos son la culpa de todos los males: Que si la cuarta
república, el imperio etc.…, entre otros descalificativos”. Y por si
fuera poco, adopta una posición o papel de víctima durante las
adversidades, esgrimiendo un supuesto magnicidio o un golpe de estado.
Todo eso, es ya es un disco rayado.
Habría
que preguntarse: ¿Hasta dónde llega su vergüenza cuando compromete su
palabra en falsas promesas y sólo sabe justificarse cuando está lejos de
cumplirlas, pero con la satisfacción política personal de tener al
pueblo esperanzado con sueños que no llegarán a materializarse de manera
tal que sigan creyendo a cualquier costo en usted?.
Constantemente está invocando actuar en nombre de la paz…. pero
armándose para la guerra. Igualmente, no puede negar que está juzgando y
condenando a venezolanos que se le oponen, alegando igualdad, justicia,
libertad lejos de ser una realidad todo en nombre de la revolución,
utilizando la faz del pueblo como fachada a sus propósitos.
Su visión de País Socialista,
está lejos de los verdaderos postulados dogmáticos en la materia y ante
los errores, es fácil utilizar patrones de comparación que le sean
convenientes en determinado momento o tratando de justificar su conducta
o desempeño a través de la actuación de los demás, ocultando el fracaso
de sus actos.
Desde el momento que asumió la presidencia usted se colocó en su NIVEL DE INCOMPETENCIA
y el país ya no aguanta más. Salga por la puerta grande y asuma con
gallardía su responsabilidad ante el desmán de su gobierno. Hágalo
democrática y constitucionalmente que quizás la historia, algo le
reconozca.
Elaborado (16 de enero 2011) por: RICHARD GONZÁLEZ C.
IMAGEN: Las Armas de Coronel