17 de julio de 2013 21:33
A la almirante en jefe de la "revolución"
Por: Enrique Prieto Silva
Almirante
Meléndez, no sé cómo tratarla, si como superior o como subalterna, ya
que la "generalización" en la FAN actual, no es indicativo de grado y
mérito, sino de aceptación y connivencia "revolucionaria". En las
Fuerzas Armadas que a mediados del siglo pasado ayudamos a consolidar en
democracia, el interés institucional se dirigía a "formar hombres
(genérico) útiles a la patria", y todos nos comprometíamos a defender
esa patria legada por los libertadores, que hoy ustedes niegan su
existencia, desvirtuando la historia. Ha sido designado ministro de la
defensa, pero pareciera que usted hubiera sido tocada por el hada de la
incertidumbre, al extremo de creer, que como el hábito al monje, solo
los soles proyectan el hálito del general, ya que como se ha proyectado,
no ha dado muestras de capacidad creativa, ni de futurista visionaria,
sino de "revolucionaria hija de Chávez", arrastrando a decir de muchos,
"un costal de irregularidades por las que nadie respondió durante su
gestión en la Tesorería Nacional, cuando el actual ministro de Finanzas,
Nelson Merentes presidia el Banco Central de Venezuela", siendo además
curioso y sorprendente, que en su Twitter haya suplantado su nombre por
el de "@gestionperfecta", algo así como una autoalabanza replicadora.
Déjeme
decirle, que en las redes sociales de militares, circuló con
beneplácito el mensaje de una colega suya, también "mujer de mar", quien
decía: "…le deseo el mayor de los éxitos en este nuevo reto que le toca
cumplir ante nuestra querida Venezuela. Para mí, una excelente oficial
de mi querida Armada, y de gran sencillez y calidad humana. Trabajamos
en la Escuela Naval de Venezuela, y siempre demostró un gran
profesionalismo. Independientemente de las opiniones que cualquiera
tenga, las cuales respeto, pienso que este gran paso que damos, al tener
en nuestro País a una Mujer en ese rol tan importante, nos debe llevar a
darle el voto de confianza y que el Todopoderoso la ilumine, y le
permita crecerse en la grandeza". ¡Gloria a Dios en las alturas, la
patria vive! Es el pensar de gente de bien, que sin comulgar con el
"proceso", sigue creyendo en la bondad, el profesionalismo y la
honestidad e imparcialidad de las personas, que como usted, han jugado
un papel de protagonismo y liderazgo durante ya casi 15 años de un torpe
gobierno "militarizado", donde el uniforme verde, rojo, blanco o azul,
se ha apoderado de todo el quehacer de la República.
Parece
increíble, que conociéndola, como ha sido conocida por su desempeño en
cuanta finanza ha pasado por sus manos, se pueda creer en su libertad
militar, apoliticidad y credo, para esperar de usted un trato de amistad
y de buena voluntad, partiendo de un borrón y cuenta nueva, a pesar de
la cultura proselitista, sembrada en su mente por el "comandante
eterno". Usted ha dado muestras de insinceridad profesional, abriendo su
mandato como ministro de la defensa, declarándose "revolucionaria" y
comprometida con los "valores" del socialismo y comunismo que es lo
mismo. Ha dicho: "Tengo un reto como revolucionaria, legar a Venezuela
los valores del socialismo y comunismo, que son los valores …del
presidente fallecido, y como su hija y hermana del Presidente actual
quien también es su hijo, soy una soldada en un taller de herrería en
¿Cuba? …constitucionalista, leal al espíritu y a la letra de nuestra
Carta Magna", Almirante, usted ha vuelto trizas las esperanzas y
confianza de sus admiradores, promotores y seguidores, quienes creían
que usted iniciaría la reinstitucionalización de la FAN, el "alma mater"
que la catapultó a desempeñar un rol tan importante, que requiere
inteligencia, capacidad, profesionalismo, sindéresis y personalidad
propia. Ud. ha demostrado todo lo contrario y pareciese que arma su
escudo para defender y tapar un pasado no muy santo.
Muchos,
indignados protestaron el verbo opositor en su contra, pero en el aire
esta la realidad. Alguien dijo, que "Si en el chavismo se defiende a
Venezuela, deberían investigar la Tesorería Nacional bajo Jesús
Bermúdez, Carmen Meléndez y Alejandro Andrade", además de su paso por la
Tesorería, por la Dirección de Presupuesto de la Armada, su
participación en la directiva del Fonden, la dirección de gestión
Interna del Despacho de la Presidencia; la jefatura de la División de
Administración Financiera de la Dirección de Finanzas y la jefatura de
la Oficina de Programación y Control de Presupuesto y de Abastecimiento
de la Armada.
Nicolás
Maduro, quien ejerce la presidencia de la República y a quien usted
llama su hermano "hijo de Chávez", al hablar de su comportamiento el 4
de febrero de 1992, dijo que "…la FAN tuvo la capacidad para unir a
quienes participaron y a quienes se opusieron al intento de golpe de
Estado de ese año..." En nuestra opinión, a diferencia de lo dicho por
Maduro, eso no es verdad, no se trata de quien estaba a favor o en
contra; esa historia todos la vivimos, y aunque nadie es poseedor de la
verdad, en nuestro mundo actual de la cibernética, ésta no puede ser
manipulada y siempre seguirá siendo el decir de los vencedores. Se trata
del respeto a la Constitución. Usted fue consecuente con la formación
profesional que recibió en la Armada y por eso defendió con las armas la
Constitución de 1961, violentada por un hecho de fuerza de quienes hoy
la designan Ministro de la Defensa. Lo que espera el común de los
venezolanos, es que siga defendiendo su buen prestigio, el del militar y
el de la mujer venezolana, y no se haga cómplice de la corrupción y la
abierta traición a la Patria que vienen promoviendo, quienes dicen
llamarse "revolucionarios".
Su
actitud almirante, quiéralo o no, es un irrespeto a la FAN, que
constitucionalmente es una institución apolítica. Ud. no puede, por
ningún motivo o derecho, llamarla "revolucionaria, socialista y
chavista". Ello es también un irrespeta a todos los venezolanos.