Leyenda: Imagen por cortesía de Morfema Press
¿Quién miente ellos o MCM?
Enrique Meléndez.
De verdad, que son tipejos malasangres, estos que nos gobiernan, sobre todo, ese Jorge Rodríguez, con esa prepotencia con la que le responde a María Corina Machado, a propósito de la revelación que hizo la candidata opositora, de que estaba en conversaciones con los jerarcas del régimen, como ese personaje del cuento de Arturo Uslar Pietri, que apuesta en una gallera a todo pulmón, sin tener plata, por la victoria del "marañón":
-Yo a esa señora jamás la he visto en mi vida. ¿Tú has conversado con ella, Diosdado?
Un Cabello descabellado por completo, tanto en su cuero cabelludo, como en su cerebro:
-Jamás- responde, más soberbio que nunca; empaquetado en un flux negro de paño inglés, que debe costar el salario de un millar de maestros, con su eterna sonrisa gorilezca, cuando se trata de desagraviar a una persona, como en el caso de la señora Machado, a quien la agarra de su cuenta en su famoso programa televisivo: la insulta, la veja, la somete a burla; como en los buenos tiempos, cuando ella era diputada y él presidente de la Asamblea Nacional, y donde su paso fue memorable, no sólo porque le dijo "ladrón" a Hugo Chávez, sino también porque les resultaba impertinente, incluso, a algunos homólogos suyos de la oposición. Fue el momento, en el que la oposición pasó a adoptar una posición casi sumisa; donde las posturas radicales, que ella asumía, se consideraban temerarias, tomando en cuenta que por esta vía no se había podido obtener un resultado positivo. "Chávez vete ya": una consigna gastada, que no conducía a nada, porque el hegemón cada vez se atornillaba más en el poder, desde los días duros de 2002, cuando todo se perdió por culpa de un grupo de ambiciosos, que pretendieron monopolizar las acciones de calle, que dieron lugar a la salida de Hugo Chávez el 11 de abril de ese año, transitoriamente, cuyo final terminó en tragedia; es decir, acciones muy peregrinas, que se iban adoptando, y que, repito, no hacían sino atornillar más al tercio. No hay que pasar por alto que la señora Machado fue objeto de una vil agresión por parte de una diputada oficialista; cuando ésta le hacía un reclamo a Cabello en la tribuna presidencial; que mandó a la clínica a la señora Machado, mientras la agresora aparecía al día siguiente en el palacio legislativo con un collarín; como para que se viera que ella había llevado también su parte, y había tenido que ir a una clínica, como su homóloga, lo que le quedó como una cobardía más, porque ésta había agredido a la señora Machado por la espalda, halándola por el cabello, y la había batido contra el suelo. Finalmente, Cabello logró despacharla, a propósito de la imprudencia diplomática, que cometió, al presentarse en la OEA, en representación del embajador panameño Willis Cochez, para solicitar la aplicación de la Carta Democrática a Venezuela, lo que se consideró una traición a la patria; sólo que esta gente obvia que, además de ser un satélite del castrocomunismo, con Cuba se sostiene un contrato petrolero, que consiste en enviarle una cuota diaria de crudo, en condiciones crediticias y a un bajísimo interés, y cuyos pagarés nadie sabe si los ha venido cancelando.
Como dice Sartre, al tirano no le interesa el amor; porque está consustanciado con el terror, y que es lo que maquinan Cabello y el psiquiatra Rodríguez, con esa arrogancia, con la que declaran, y entonces hacen ver que la señora Machado es una insignificante persona; que no hay que tomar en cuenta; como si tuvieran el poder en sus manos en Venezuela; cuando que el que lo posee es la señora Machado, con un mandato del pueblo, que se lo otorgó el 22 de octubre del año que finaliza: "este es el país de las nulidades engreídas y de las eminencias grises": he allí algo que se viene diciendo desde el siglo XIX. Ahora, ¿quién miente, la señora Machado o estos tipejos? Por lo demás, los dueños de las mentiras son ellos; mientras que la señora Machado no tiene necesidad de apelar a la mala fe; puesto que hasta ahora la realidad le ha venido dando la razón, a propósito de esa radicalidad, que ella ha venido sosteniendo, con una conducta inquebrantable hasta con el propio Chávez, puesto que esa vez, que le dijo ladrón a éste, había tratado de ganársela, dirigiéndose continuamente a ella, con ocasión de la presentación de una Memoria y Cuenta en la AN: "¿no es así María Corina?" En ese tono de igualado, que acostumbramos los venezolanos:
-Nosotros tenemos aquí cuatro horas sentados, oyendo hablar de un país, que las madres venezolanas no lo percibimos-, le dijo además.
Al tirano se le recomienda mentir, descaradamente, para hacerse el duro, sobre todo, en momentos en los que su poder está sustentado sobre unas bases de barro, como en este caso. Se los demostró el fenómeno electoral, que se produjo el 22 de octubre, a propósito de unas primarias, que se presumía, que iban a ser un fracaso, y allí salió hasta el gato a votar; que fue lo que no sucedió el pasado 3 de diciembre, cuando lo que se veía era el ánima sola en esos centros de votación, que instaló el gobierno para el referéndum.
Está llamado a negociar un mandatario, que tiene que viajar de incógnito en aviones privados; cuando el tiranuelo de Cuba Díaz-Canel lo hace en los de Conviasa, es decir, lo tienen precisado los cazafortunas, y en el orden interno tiene las calles encendidas con todos los gremios protestando por mejoras salariales, con motivo de un salario, que apenas es de tres dólares, y el hecho es que no cuenta con recursos, para el aumento que se requiere. En el fondo, Cabello y el psiquiatra Rodríguez lo que persiguen es la desmoralización de la ciudadanía. Claro, cuando Maduro pide que le levanten todas las sanciones, allí está la medida de recompensa, que se ofrece por su cabeza:15 millones de dólares, y se va tranquilo. Por supuesto, en el aire está la pregunta de si le darán o no.
REMISIÓN:
De: Enrique Melendez O. melendezo.enrique@yahoo.com
Date: dom., 14 de enero de 2024 10:34 a. m.
Subject: Artículo /
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