Rodrigo Coelho/ BBC Sao Paulo
"A mí no me agrada la idea de otra base militar en Colombia", dijo Lula, destacando que ésta es su opinión personal y que el asunto debe tratarse con cuidado con Colombia, sus países vecinos y Estados Unidos.
"No queremos crear conflicto ni con Uribe ni con EE.UU.", aseguró.
Bachelet dijo estar de acuerdo con las opiniones del presidente brasileño y que el asunto debe ser ampliamente debatido en los próximos diez días en la capital de Ecuador, Quito, cuando se celebre la cumbre de a Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Alta tensión
El reciente anuncio hecho por el gobierno colombiano sobre un eventual acuerdo con EE.UU. sobre la utilización -por parte del ejército estadounidense- de tres bases militares en Colombia está provocando tensión entre ese país y Venezuela.
La sociedad entre Colombia y EE.UU. es señalada, incluso, como una de las razones que llevaron a Venezuela a congelar sus relaciones diplomáticas con el país sudamericano el martes pasado.
El acuerdo prevé la entrega de las instalaciones de, al menos, tres bases aéreas en Colombia al ejército de EE.UU., lo que facilitaría las operaciones contra grupos armados y la producción de drogas.
No queremos crear conflicto ni con Uribe ni con EE.UU.
Luiz Inacio Lula da Silva, presidente de Brasil.
Según el presidente Lula, otro de los temas que se abordarán en Quito es la presencia de la 4ª flota de la Marina estadounidense en la región petrolífera conocida como "pre-sal" donde se descubrieron grandes reservas frente a las costas brasileñas.
"Yo había hablado con Bush y tenemos que hablar con Obama. La 4ª flota está casi encima de la pre-sal", dijo.
En la reunión celebrada en la sede de la Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (Fiesp), Lula reforzó su apoyo a la reelección del chileno José Miguel Insulza al cargo de secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA).
A su vez, Bachelet dijo que Chile apoya la candidatura de Brasil para un puesto permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Ambos dirigentes repudiaron lo que Lula llamó el "golpe de estado en Honduras" y pidió el regreso del depuesto presidente del país centroamericano, Manuel Zelaya.
"Vergüenza"
Lula y Bachelet también estuvieron presentes en una reunión con empresarios de ambos países.
Ahí se firmaron varios acuerdos de cooperación en infraestructura y bienes y servicios, entre otros.
El presidente brasileño dijo -en español- que es una "vergüenza" el hecho de que las inversiones brasileñas en Chile son cuatro veces menores a las de los chilenos en Brasil.
"Es una vergüenza que Chile con sólo 20 millones de habitantes y, en consecuencia, un PIB menor que el brasileño invierta cuatro dólares por cada uno de los que Brasil invierte allá", dijo.
Lula pidió a los empresarios brasileños que inviertan más en los mercados emergentes -como el chileno- como una manera de diversificar su cartera internacional y prevenirse contra la crisis mundial.