Derroquemos a la dirigencia opositora para poder derrocar a Chávez
Somos
millones los venezolanos que entendemos claramente que Chávez pende de
un hilo y no termina de caer gracias a la genuflexión existente en la
dirigencia oposicionista. Ellos desde hace tiempo decidieron transitar
la ruta electoral a sabiendas de que el régimen controla todos los
poderes y utiliza al CNE como un apéndice de la dictadura. Todavía peor a
lo antes expuesto, es que han aceptado en las últimas semanas la
imposición arbitraria de un régimen dictatorial con visos comunistas sin
enfrentarlo frontalmente.
La imbecilidad opositora ha llegado hasta el punto de servirle al dictador cual tontos útiles, escoltándolo
en su recorrido hacia la Asamblea Nacional el sábado pasado (dos
diputados de oposición custodiaban al tirano de manera alegre y gentil).
Lo tratan y miman como si fuera un gran demócrata y hasta
aplauden su discurso maldiciente lleno de patrañas y promesas vacías. La
actuación de la dirigencia opositora es inaceptable y raya en traición a
la patria, por sus gestos los conoceréis.
En
el “feedback” que mantengo con mis lectores y en las conversaciones
privadas con personas de toda índole, noto un desespero que se va
incrementando y que de alguna manera se hará sentir en el transcurso de
los próximos meses. ¿Hasta dónde ese desespero producto de la
orfandad reinante en la mayoría democrática del país puede llegar y
cuáles serían sus consecuencias? No sabemos. Pero hay algo muy claro: La gente no se seguirá calando la pusilanimidad opositora.
Los
que no están de acuerdo conmigo dirán: ¿Y cuál es el afán de Roberto
Olivares de seguir criticando a la oposición a cada rato? La respuesta
es muy sencilla: La actual dirigencia opositora no me representa
ni a mí ni a millones de venezolanos. Además y lo que es peor, han
manipulado al gran grueso de la población y han cuasi perpetuado a un
dictador en el poder. Ya Chávez ha sido derrocado y no termina
de caer por ellos, de manera tal que los seguiré criticando y
desenmascarando hasta que muerdan el polvo de la deshonra.
La
actuación de la dirigencia oposicionista no deja otra opción que
considerarlos traidores y derrocarlos a la par del perturbado mental que
nos desgobierna. ¿Cuándo y cómo lo lograremos, nadie sabe? Pero los
vientos soplan a nuestro favor y cuando el universo decreta el cierre de
un ciclo, no hay nada ni nadie que pueda evitarlo. Poco o nada importa
la cantidad de sandeces que puedan alegar, ahora mismo actúan peor
que los chavistas y con sus 12 salarios mínimos y el carnet de
diputados, se creen más papistas que el Papa.
La
única observación importante que tengo en referencia al “show”
camaleónico del dictador y los diputados opositores el sábado pasado, es
la siguiente:
Chávez
sabe que si no lo matan o si el pueblo no se alza espontáneamente,
llegará tranquilo a las elecciones presidenciales del 2012. Eso es lo
que quiere la oposición y si no pasa nada extraño, así será. Es por ello
que muy bien asesorado y con la mirada puesta en el 2012, saludó de
manera tan efusiva a María Corina Machado. Chávez se quiere
enfrentar a ella y moverá cielo y tierra para que así sea. Ella es muy
vulnerable y la triturará sin duda alguna en caso de llegar allá.
Pero
para llegar a las elecciones presidenciales del 2012, tanto el dictador
como la dirigencia opositora, deberán sortear a un pueblo bien
“arrecho” y a ciertos grupos de radicales que no descansarán hasta ver a
Chávez preso, exiliado temporalmente y/o muerto. Dejo constancia
escrita de que no deseo un magnicidio ni tampoco deseo que Chávez se
muera de forma natural. Lo que más anhelo es verlo derrocado, procesado, enjuiciado y preso de por vida.
En
Túnez la oposición le hizo el juego al dictador por 23 años aceptando
al igual que en Venezuela pequeñas cuotas de poder y prebendas de bajo
perfil hasta que el pueblo hastiado dijo basta. En otros países ha
ocurrido lo mismo y los dictadores se han mantenido con la venia de los
pseudo opositores y en contra de las mayorías. En Venezuela el fenómeno se repite de manera grotesca y en pleno siglo XXI.
¿Estamos
los venezolanos democráticos y decentes dispuestos a servirle de
alfombra a Chávez y a la dirigencia opositora de manera silente? No lo
creo. Se avecina el 23 de enero, salgan en masa y actúen en
consecuencia. Solo derrocando a la dirigencia opositora y alzando
nuestras voces de manera decidida podremos derrocar la tiranía que
actualmente usurpa nuestra patria. ¡Venezuela levántate, que suenen los clarines de la libertad!
“El
hombre sabio no debe abstenerse de participar en el gobierno del
Estado, pues es un delito renunciar a ser útil a los necesitados y una
cobardía ceder el paso a los indignos”
Epicteto de Frigia
¡Patria, Democracia y Libertad!
Roberto Carlo Olivares
Blog: www.robertocarlo14.com
Twitter: @robertocarlo14
19-01-11
IMAGEN: Noticias24.com