La lista robesperiana.
Enrique Meléndez.
A raíz de la orden de detención contra Tamara Sujú y Sebastiana Barráez se llegó a la conclusión, de que la ciudadanía quedaba bajo libertad condicional; por supuesto, allí en la lista de los conjurados, que estaban implicados en la Operación "Brazalete Blanco", entraban también Mario Iván Carratú Molina, Werner Enrique Villalobos, José Antonio Colina y Norbey Marín, pero menciono, en especial, a las dos damas; porque el secuestro, que ha ocurrido con Rocío San Miguel, entonces ha dado lugar a una interpretación misógina, en lo que atañe a la conducta de nuestros gobernantes. Claro, el país está en manos de dos mujeres: Cilia Flores, que sería la diosa Lar de los arquetipos femeninos griegos, la mujer doméstica, y Delcy Eloína, que sería la diosa Atenea, la que anda por los mundos; no obstante, el entorno masculino de ambas parece cultivar esta aberración, como diría Freud; tanto más que se ha visto, sobre todo, en el caso de María Corina Machado, con quien los voceros del régimen no han tenido paz, tanto de palabras ("esa mujer, no va", se desgañita Jorge Rodríguez), como de acción, como ocurrió recientemente en Charallave, donde por poco la linchan; pero a lo largo y ancho del país no han tenido misericordia con la pobre durante sus recorridos, de acuerdo a su agenda de trabajo.
Por supuesto, en estos planes macabros del régimen, como se ha comenzado a decir en la opinión pública, no está metida la mano ni de Cilia ni de Delcy; tiene que ser mano masculina, la de la orden de detención contra la señora San Miguel, y, a ese respecto, todo apunta a Nicolás Maduro, aunque no deja de sospecharse de Diosdado Cabello; que no profesa para nada eso que se conoce como el principio del honor y, quien al referirse a la señora Machado, por lo demás, la pinta de todos los colores de la estética de la fealdad y el deshonor; qué no dirá de ahora en adelante el susodicho de la señora San Miguel. Sobre todo, esa forma como fue detenida en el aeropuerto de Maiquetía, en momentos en los que se prepara para un viaje. He allí una forma de maltratar a una dama; que merece todo el respeto; como si se tratara de una ésas, que hoy en día llaman "muñecas de Pdvsa", y que se reparten entre los chivos de este régimen; que se le ha alzado a alguno de ellos con un botín suyo. Una dama que dignifica la condición de la mujer venezolana, tanto por su gallarda presencia, como por su lustre intelectual; profesora universitaria; defensora de los derechos humanos, con un alto perfil en el medio militar; una especie de capitana a lo Manuelita Saenz, y que fue internada, junto con su hija en un calabozo de la sede de uno de los aparatos policiales del régimen, incomunicada, que a esta altura se viene a saber que está en El Helicoide de Caracas; aun cuando el domingo en la noche, luego de haber sido desaparecida el día viernes, Tarek William Saab notificó a la opinión pública a través de la cuenta X de la Fiscalía, que la señora San Miguel se encontraba detenida, por formar parte de la conjura de la banda de los de "Brazalete Blanco", dirigida a asesinar a Nicolás Maduro, como lo señaló el propio Maduro, sufriendo cinco atentados a lo largo de 2023, en ese sentido.
Repito, en aquella oportunidad dijimos que quedábamos en libertad condicional, a partir de una lista que decía Saab, que tenía de muchos nombres, que aparecían implicados en esa trama, a la manera de Robespierre durante los llamados días del Régimen de Terror de la Revolución Francesa; poseedor también de una lista de corruptos; sobornados por la monarquía de Luis XVI, que iba ajusticiando día a día, a medida que los iba mencionando, y cuya pena era la guillotina. Hoy son los calabozos de El Helicoide; donde tienen a la señora San Miguel; como tuvieron en su momento a Luisa Cáceres de Arismendi, a quien ellos exaltan siempre por los canales del Estado. En efecto, durante nuestra Guerra de Independencia la mujer sufrió toda clase de abusos y humillaciones; que no es el tema que nos ocupa, pero que viene al caso, porque vemos pasiones desatadas, en ese sentido. La misoginia está peleada con el principio del honor, sobre todo, en un régimen poco viril.
Por supuesto, ellos saben que nosotros sabemos que ellos mienten; sobre todo, porque resulta difícil creer que la señora San Miguel iba a asumir el papel que, según la documentación que posee Saab, relativa a la Operación de los de Brazalete Blanco, tenía asignado durante el desarrollo de las acciones, de ir informando por teléfono la trayectoria de la "operación"; sobre todo, una mujer de su condición, que resulta especialista en armas de guerra, y que está al tanto de lo que sucede en materia armamentística en este país; resulta difícil de creer, repito, porque todo el que ha oído la narrativa que ha venido planteando Saab, de lo que iba a ser la secuencia de la Operación de los de Brazalete Blanco; comenzando por el secuestro y asesinato de Freddy Bernal, para luego venir contra Maduro, -todo el que ha oído dicha narrativa, considera que desde un punto de vista militar es un absurdo; que de inmediato una persona como la señora San Miguel iba a descalificar. Cervantes se quedó corto, para inventar historias truculentas de esta especie. El hecho cierto es que como uno está vacunado frente a las mentiras de esta gente, y ya se conoce de memoria el guión, entonces se espera que de un momento a otro aparezca la señora San Miguel en un video, reconociendo los cargos, que le achaca Saab, como viene de suceder con el ex militar Angelo Heredia; video donde seguramente va a reconocer que la señora Machado está detrás de la dichosa operación. ¿Por qué se detiene a la señora San Miguel? He allí la pregunta que está en boca de todo el mundo. No hay que pasar por alto que ella dirige una organización de defensa de derechos humanos; pero, además, maneja mucha información, como decíamos, relativa al tema del estado de nuestras fuerzas armadas en este momento, dada esa ascendencia, que tiene en este sector.
REMISIÓN:
De: Enrique Melendez O. melendezo.enrique@yahoo.com
Date: dom., 18 de febrero de 2024 7:46 a. m.