Por MARIANELA JIMENEZ
The Associated Press
TAMARINDO, Costa Rica -- El grupo de diálogo y cooperación, conocido como mecanismo de Tuxtla, concluyó el miércoles su XI cumbre presidencial con la incorporación plena de Colombia y República Dominicana como miembros plenos y una serie de compromisos reunidos en el proyecto Mesoamérica.
A la cumbre, que tuvo como anfitrión al presidente Oscar Arias, acudieron los mandatarios Alvaro Uribe, de Colombia; Felipe Calderón, de México; Ricardo Martinelli, Panamá; Mauricio Funes, de El Salvador; Alvaro Colom, Guatemala, así como representantes de Honduras, Belice y de República Dominicana. El único país ausente fue Nicaragua.
"Salimos con logros muy importantes en lo diplomático, primero con Colombia aceptada como miembro pleno en el mecanismo de Tuxtla y segundo, ratificada en Proyecto Mesoamérica'', comentó a periodistas el comisionado colombiano Miguel Peñaloza. El presidente Uribe viajó de regreso a su país antes que finalizara la actividad.
La iniciativa busca la integración y el desarrollo de Centroamérica, México, Colombia y República Dominicana en áreas como telecomunicaciones, salud y transporte.
Uno de los acuerdos presidenciales destacado en la declaración final es la orden para "llevar a cabo el estudio de factibilidad y diagnóstico de infraestructura y servicios portuarios necesarios, para la implementación del transporte marítimo de corta distancia en Mesoamérica''.
El plan es coordinado por Panamá.
El secretario mexicano de Salud, José Angel Córdova, explicó que el miércoles la cumbre entre los 10 países que forman el mecanismo sirvió además para "firmar la creación del Instituto Mesoamericano de Salud Pública'', que integra a los ministros de esa área y a rectores de las universidades.
"Tiene varios objetivos, entre ellos desarrollar un programa homogéneo de vacunación en toda la región, luchar contra la desnutrición infantil y, luchar contra enfermedades como el dengue y el paludismo'', detalló el jerarca.
Sin embargo, dos de los principales proyectos son heredados del Plan Puebla Panamá: la interconexión eléctrica y la red de cable de fibra óptica, que según la comisionada costarricense Gioconda Ubeda entraría a funcionar en un 95% a finales del próximo año en Centroamérica.
"Luego se incorporarán México y Colombia para una cobertura a 196 millones de personas'', apuntó.
El otro es el proyecto para un corredor de carreteras en el pacífico que irá de Puebla en México hasta Panamá y que fue denominado como una "prioridad regional'' en la Declaración de Guanacaste, firmada por los mandatarios asistentes.
La ministra costarricense de Transportes, Karla González, explicó que se trata "de un cordón de 3.244 kilómetros a través del cual se transporta el 95% de los bienes comerciales de la región cruzando siete países y seis pasos fronterizos internacionales''.
Resaltó que el comercio intrarregional ha crecido y para el año pasado representó unos 6.000 millones de dólares, aunque para los primeros cinco meses del 2009, la crisis económica derivó en una reducción del 17%.
La idea es reducir el tiempo de viaje entre Puebla y Panamá de las actuales 190 horas en promedio a 54 horas promedio, lo que según González "generaría ahorro en gastos de operación, transporte, disminución en emisión de gases y estimularía el crecimiento del comercio''.
El corredor pacífico mesoamericano cuenta con 1.537 kilómetros, de los cuales solo un 47% está en buenas condiciones. Para completar el plan se requiere una inversión estimada de 1.072 millones de dólares, de los cuales la mayor parte se concentraría en Costa Rica, con 345 millones de dólares, seguido por El Salvador con 222 millones.