POLÍTICA
AYUDA, PERJUICIO
Por Nelson Maica C
1.
¿Cómo se inicio el estado y el gobierno
venezolano? Parece que todos conocemos la historia y que la pregunta no tiene
sentido y actualidad. Pero hay gran cantidad de puntos de vista y, la mayoría
de las veces, vale la pena conocer más.
2.
Algunos tratadistas políticos sostienen que un
estado y un gobierno comienza, generalmente, con la derrota de alguien. “El
origen del estado es la conquista”. “El origen del estado es el contrato
social”. “El origen del estado está en la evolución”. Se refieren al orden
cronológico y lógico.
3.
Los hechos, afortunadamente, apuntan que buena
cantidad de estados deben su origen a la derrota de un pueblo por otro; al
dominio de un jefe y su sequito (banda, grupo, secta, etc.) sobre su propio
pueblo; como también a la emigración.
4.
No olvidemos el caso mediante el cual un pueblo
ha decidido, por su propio bien y/o interés, someterse voluntariamente a otro
pueblo, a un jefe, a un estado.
5.
¿Si el estado tiene un origen violento, cómo nos
explicamos lo del contrato social base y origen de un estado para muchos? Todo
tiene ilustración. Se argumenta que el contrato social es el tránsito de la
sociedad en estado de naturaleza hacia y hasta la sociedad civil organizada.
Hay más; el ciudadano obtiene mejores beneficios en la sociedad civil
organizada que en la sociedad en estado de naturaleza.
6.
Tampoco olvidemos la posibilidad de crear
rápidamente un estado por medios violentos únicamente. Las ganancias del
gobierno y de un sector de la sociedad serian más rápidas y mayores. Al emerger
por el atajo de la violencia, lógicamente, el gobierno cree y practica la
violencia. Así el ciudadano aprueba la violencia que le sea practicada por
cualquiera y el mismo recurre a la violencia.
7.
Este tipo de teoría sugiere que si el estado fue
creado por la violencia y puede ser útil para el pueblo, el pueblo se somete
tranquilamente a la violencia por su propio bien. ¿Es nuestro caso? ¿Por eso no
reacciona, aquí, ahora?
8.
¿Entonces el estado se formó para ayudar y/o
perjudicar al pueblo? Habrá que definir los términos “ayuda” y “perjuicio”. Y
eso depende del resultado de la acción del gobierno en un estado.
9.
Pudiéramos entonces plantearnos un supuesto: “El
estado ayuda/perjudica a algunos, perjudica/ayuda a otros y deja en el limbo a
los demás”. Todos somos perjudicados o ayudados de diferente manera y en
distinta medida y proporción. ¿Lo vivimos actualmente?
10. Al
realizar estas comparaciones entendemos que nuestras reflexiones están
orientadas hacia algunos aspectos de la teoría política. Lo que hace mucha
falta, por ahora, a mi entender. Aun cuando alguien, con todo derecho, dirá: ¿Con
qué se come eso? Bueno, le diré, mire en su entorno, la política de represión,
terror y crimen, la violencia, desde 1.999 ya terminó con más de 250.000
personas; continuó con el sometimiento por hambre mas el “corral con amenazas
de cerrar la puertita”… ¿Qué cree usted que seguirá? Mire bien y, si puede,
deduzca y/o amárrese los pantalones y/o pantale…, no se queje, no vocifere sin
sentido, tampoco hable y llore demasiado, no se paralice, salga, cante el himno
nacional y actúe con determinación.
11. ¿Por
qué si hubo pueblos en estado de naturaleza se uso la violencia para imponerles
el estado, un gobierno? ¿Por qué se ha sostenido como una verdad sin discusión
que un pueblo en estado de naturaleza prefirió el estado, un gobierno? O, en
otros términos: ¿El pueblo prefiere al estado, al gobierno? ¿El pueblo pudo
escoger, manifestar, si prefería el estado de naturaleza y/o el estado, a un
gobierno en particular?
12. De
inmediato los teóricos apuntan: Estas decisiones tienen razonablemente en
cuenta que las preferencias de la gente están, de alguna manera, relacionadas
con el ambiente político en que se desenvuelven, viven.
13. Pero;
pero, cuando un cientista afirma que “A” prefiere café al té, se refiere a
objetos que se presumen le son familiares y están a su alcance. Pero si “A” se
expresa sobre cuestiones “que ha oído”, “que le han referido personas de su
confianza, credibilidad”, surgen diferencias y aparecen dificultades. Todo el
que vive dentro de un estado ahora carece de experiencia vivida en un estado de
naturaleza y viceversa y no dispone de medios prácticos para pasar de uno al
otro; seria, por lo menos, un anacronismo histórico. (Pretender regresar al socialismo
comunismo castrismo superado históricamente, tal como ahora).
14. Se
cuenta, de diversas formas, que un aumento del tamaño de una unidad demográfica
favorece la creación de un estado a causa del cambio de escala y tipos de
guerra que ello impone. Así como un jefe indio apoyado por adeptos fanáticos
pueden obligar al resto de una tribu a una obediencia cierta.
15. ¿Los
indios, que los tenemos, por sus supuestas preferencias detestan la relación
mando-obediencia impuesta por el estado, el gobierno, y escogen permanecer en
el estado de naturaleza? ¿Vivir en el estado de naturaleza es lo que los
predispone a apreciar las ventajas comprobables e intangibles que se asocian
con ellos?
16. Los
seguidores de Marx, socialistas comunistas y ahora los castristas, dirán que la
agricultura de subsistencia, la recolección y la caza eran fenómenos de
existencia, de la base (para ellos el pueblo es base, utilitis), mientras que
las instituciones del estado serian fenómenos de conciencia, de la
superestructura. La primera determino la segunda. Otros, se remiten a quien fue
primero: el huevo o la gallina y todas son supuestamente valederas.
17. La
historia, los hechos, nos orientan hacia la consideración de que las
preferencias por ciertos acuerdos políticos que se le atribuyen a la sociedad,
al pueblo (realizados por elites políticas) son producidos por esos mismos
acuerdos y muchas instituciones políticas son fieles seguidores o rechazan, se
oponen, o ambas, porque así lo asumen las personas, unos y otros.
18. Al
observar que eso es así, que las teorías según las cuales el pueblo en general
o la elite o clase dirigente organizan los acuerdos políticos que les
convienen, entonces, la ciudadanía, el pueblo, la resistencia, la oposición no
oficial, debe tenerles y manifestarles su desconfianza, con hechos.
19. Solo
si consideramos que los resultados históricos son en gran parte no
intencionales, entonces, pudiéramos observar con cierta esperanza la
posibilidad y aproximación de determinadas relaciones entre el estado, el
gobierno y los ciudadanos. Solo entonces. Ojo con esto.-
Tips:
·
Las preferencias por los acuerdos políticos
dependen de la concepción que tengan las personas de lo que es bueno para
ellas, así como de los acuerdos que se suponen ser preferibles.
·
Propiedad privada: posesión, titulo. El estado
reconoce el derecho de propiedad privada. El titulo no es invalidado por la
escasez, no depende del merito. Si una persona puede ser dueño de un metro
cuadrado, puede ser dueño de un millón de metros cuadrados. El acceso a los
bienes está regulado por el precio y la sustitución y no por la autoridad, sea
como esté constituida.
·
La esencia del estado capitalista es la
propiedad privada. La propiedad desde el siglo XVI puede considerarse como
capital y de hecho ha servido como trampolín al capitalismo y, paradójicamente,
al comunismo.
·
El régimen no capitalista (feudal) de tenencia
de la tierra se originó en la servidumbre. El hecho de que la propiedad no
requiera un lugar de nacimiento, una dedicación vital, ni el servicio o el
sacrificio a causa alguna, sino que se limite a existir, no por ello es un
fenómeno menos ideológico.
·
El estado no es una entidad real, no tiene una
voluntad, tampoco toma decisiones. Mientras más se obliga a los ciudadanos a
cooperar es menos probable que conserven ese supuesto hábito. “Los que saben, hacen; pero no los que
hacen, saben” (Desconozco su autor).
·
Hemos observado que las personas acostumbradas a
depender del gobierno casi nunca aprenden a confiar en sí mismos, ni adquieren
los hábitos de la acción cívica. Tampoco hemos observado a un gobierno sin
políticas.
·
Hay dos límites que deberíamos, como ciudadanos,
por cualquier medio, establecerle al gobierno: A). No competir con ni aplastar
a los ciudadanos; B). No arrancarles, robarles, ni arrebatarles la libertad y
las propiedades a los ciudadanos. Eso requiere la total independencia de la
magistratura. Solo la acción política contundente de los ciudadanos, por
cualquier medio, puede imponer, por lo menos, esos límites.-
Caracas,
Venezuela, 30/04/2014.-